viernes, 8 de enero de 2016

Pequeñas Semillitas 2902

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 11 - Número 2902 ~ Viernes 8 de Enero de 2016
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
Estos son dos aspectos esenciales que resumen toda la espiritualidad cristiana.
- Del egoísmo nace todo lo malo y todas las maldades entre los hombres: la codicia, la soberbia, la envidia, la violencia, la infidelidad, el odio… y de esto nacen guerras, genocidios, racismos, hambrunas, opresión, venganzas…
- Del amor, todo lo bueno: ayuda, perdón, diálogo, respeto, colaboración, comunidades fraternales, comunión de bienes, unión mundial, paz universal… ¡Y Reino de Dios en la tierra, para felicidad de todos los hombres!

¡Buenos días!

Ventajas de caminar
Caminar favorecerá tu respiración, comprimida muchas veces por la vida sedentaria. Ayudará a tu corazón al estimular una buena circulación de la sangre especialmente en los pies. Descansará tu mente ya que tu atención es atraída a todo tipo de percepciones sensoriales.

Andar es el ejercicio que no requiere gimnasia. Es una prescripción sin medicina, la regulación del peso sin dieta, el cosmético que no se vende en las perfumerías. Es un tranquilizante sin comprimidos, una terapia sin sicoanalista, una fuente de juventud que no es simple leyenda. Una caminata es una vacación que no nos cuesta un centavo.

Ayuda a quemar calorías. Disminuye el estrés: serena la mente y los nervios. Favorece el sueño. Regula el funcionamiento del aparato digestivo. Devuelve la capacidad de atención y concentración. Da vuelo a la creatividad.  Dinamiza si ha entrado la modorra. Es un tiempo propicio para rezar, reflexionar y programar. ¿Por qué no haces la prueba?
* Enviado por el P. Natalio

La Palabra de Dios:
Evangelio de hoy
En aquel tiempo, vio Jesús una gran multitud y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tienen pastor, y comenzó a enseñarles muchas cosas. Y como fuese muy tarde, se llegaron a Él sus discípulos y le dijeron: «Este lugar es desierto y la hora es ya pasada; despídelos para que vayan a las granjas y aldeas de la comarca a comprar de comer». Y Él les respondió y dijo: «Dadles vosotros de comer». Y le dijeron: «¿Es que vamos a comprar doscientos denarios de pan para darles de comer?». Él les contestó: «¿Cuántos panes tenéis? Id a verlo». Y habiéndolo visto, dicen: «Cinco, y dos peces».
Entonces les mandó que se acomodaran todos por grupos de comensales sobre la hierba verde. Y se sentaron en grupos de ciento y de cincuenta. Y tomando los cinco panes y los dos peces y levantando los ojos al cielo, bendijo, partió los panes y los dio a sus discípulos para que los distribuyesen; también partió los dos peces para todos. Y comieron todos hasta que quedaron satisfechos. Y recogieron doce cestas llenas de los trozos que sobraron de los panes y de los peces. Los que comieron eran cinco mil hombres. (Mc 6,34-44)

Comentario
Hoy, Jesús nos muestra que Él es sensible a las necesidades de las personas que salen a su encuentro. No puede encontrarse con personas y pasar indiferente ante sus necesidades. El corazón de Jesús se compadece al ver el gran gentío que le seguía «como ovejas que no tienen pastor» (Mc 6,34). El Maestro deja aparte los proyectos previos y se pone a enseñar. ¿Cuántas veces nosotros hemos dejado que la urgencia o la impaciencia manden sobre nuestra conducta? ¿Cuántas veces no hemos querido cambiar de planes para atender necesidades inmediatas e imprevistas? Jesús nos da ejemplo de flexibilidad, de modificar la programación previa y de estar disponible para las personas que le siguen.
El tiempo pasa deprisa. Cuando amas es fácil que el tiempo pase muy deprisa. Y Jesús, que ama mucho, está explicando la doctrina de una manera prolongada. Se hace tarde, los discípulos se lo recuerdan al Maestro y les preocupa que el gentío pueda comer. Entonces Jesús hace una propuesta increíble: «Dadles vosotros de comer» (Mc 6,37). No solamente le preocupa dar el alimento espiritual con sus enseñanzas, sino también el alimento del cuerpo. Los discípulos ponen dificultades, que son reales, ¡muy reales!: los panes van a costar mucho dinero (cf. Mc 6,37). Ven las dificultades materiales, pero sus ojos todavía no reconocen que quien les habla lo puede todo; les falta más fe.
Jesús no manda hacer una fila de a pie; hace sentar a la gente en grupos. Comunitariamente descansarán y compartirán. Pidió a los discípulos la comida que llevaban: sólo son cinco panes y dos peces. Jesús los toma, invoca la bendición de Dios y los reparte. Una comida tan escasa que servirá para alimentar a miles de hombres y todavía sobrarán doce canastos. Milagro que prefigura el alimento espiritual de la Eucaristía, Pan de vida que se extiende gratuitamente a todos los pueblos de la Tierra para dar vida y vida eterna.
Rev. D. Xavier SOBREVÍA i Vidal (Castelldefels, España)

Santoral Católico:
San Severino
Predicador
Nació en Roma de familia noble. Sacerdote y monje, fue primero ermitaño en Oriente. Tras la devastación causada por Atila y los hunos, se trasladó a la provincia romana del Nórico (en la actual Austria), donde organizó la restauración de las poblaciones valiéndose de sus dotes y su prestigio; predicó, reformó costumbres, fundó monasterios. Murió el año 482.
© Directorio Franciscano    

La frase de hoy

“¡Tu puedes! ¡Sigue! ¡Continua! ¡No te rindas!
Una palabra de aliento puede marcar
la diferencia entre rendirse o continuar.
Dios quiere que sus hijos no se rindan,
que sean fuertes y que confíen
en que todo en la vida tiene un plan perfecto.
No te rindas, continúa. Dios tiene un plan para ti”

Temas del día:
Se cumple una profecía del Padre Pío
El padre Mariano de la Santa Cruz, junto con San Pío de Pietrelcina, 
en una imagen de 1959.

Esta semana los Hermanos Menores Capuchinos confirmaron el calendario de exposición de los restos de San Pío de Pietrelcina (1887-1968) en Roma. La urna que se venera en el convento de San Giovanni Rotondo, donde el Padre Pío pasó su último medio siglo de vida, convertido en centro de peregrinación mundial, se instalará entre el 3 y el 11 de febrero en distintos enclaves de la ciudad.

Los días 3 y 4, en la Basílica de San Lorenzo al Verano, junto a las reliquias de otro santo capuchino, San Leopoldo Mandic (1866-1942). Ambos serán trasladados el día 5 a la Basílica de San Pedro, donde al día siguiente el Papa recibirá a los Grupos de Oración del Padre Pío (su gran apostolado, que empezó a organizar en los años cuarenta) y a los fieles de la diócesis de Manfredonia, donde se encuentra San Giovanni Rotondo.

También en San Pedro, el 9 de febrero el Papa oficiará misa ante todos los capuchinos del mundo, y al día siguiente, Miércoles de Ceniza, enviará por todo el mundo a los Misioneros de la Misericordia, una de sus iniciativas para el Año Jubilar. El Padre Pío consagró prácticamente toda su vida a confesar, así que será un testigo privilegiado del compromiso de los sacerdotes que voluntariamente se han incorporado a ese proyecto.

Que ese día estén allí los restos del Padre Pío fue un expreso deseo de Francisco, transmitido por el presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, Rino Fisichella, al arzobispo de Manfredonia-Vieste-San Giovanni Rotondo, Michele Castoro: “La presencia de los restos de San Pío será un signo precioso para todos los misioneros y los sacerdotes, los cuales encontrarán fuerza y sostén para la propia misión en su ejemplo admirable de confesor incansable, acogedor y paciente, auténtico testimonio de la Misericordia del Padre”, decía la carta.

Al día siguiente del Miércoles de Ceniza, el cuerpo incorrupto del santo de los estigmas será trasladado a su pueblo natal, Pietrelcina (Benevento, Campania), donde quedará hasta el 14, cuando regresará a San Giovanni Rotondo. En esa localidad recibió por primera vez las llagas de la Pasión el 20 de septiembre de 1918; le desaparecieron exactamente medio siglo después, tres días antes de su muerte, un 23 de septiembre.

Ese 11 de febrero, festividad de Nuestra Señora de Lourdes, se cumplirá una profecía que confirmó el mismo Padre Pío el primer domingo de agosto de 1968, mes y medio antes de morir.

Según contó Raffaele Iaria el pasado 29 diciembre en el diario Avvenire, propiedad de la conferencia episcopal italiana, aquel día el Padre Pío le dijo al padre Mariano de la Santa Cruz de Magliano que volvería a su patria chica "bastantes años después de la muerte".

"Padre, aún le deseamos cien años... El Señor sabrá, y le llamará al Paraíso", respondió el padre Mariano, quien era, junto con el padre Pellegrino Funicelli, uno de sus asistentes cuando el santo ya apenas podía moverse por sí mismo: "Tras su muerte, habrá señales, prodigios, milagros, la Iglesia os elevará a los altares. Entonces tomarán su cuerpo y le darán un gran paseo hasta Pietrelcina. ¿He dicho bien?". Según cuenta el fraile, el Padre Pío bajó la cabeza dos veces y dijo: "Así será".

El santo abandonó Pietrelcina el 17 de febrero de 1916 para no volver jamás... hasta justo un siglo después, esos cien años que confirmó ante el padre Mariano.
Fuente: Religión en Libertad

Ofrecimiento para sacerdotes y religiosas

Formulo el siguiente ofrecimiento únicamente para sacerdotes o religiosas que reciben diariamente "Pequeñas Semillitas" por e-mail: Si desean recibir el power point y los comentarios del Evangelio del domingo siguiente con dos o tres días de anticipación, para tener tiempo de preparar sus meditaciones, homilías o demás trabajos pastorales sobre la Palabra de Dios, pueden pedírmelo a feluzul@gmail.com 
Sólo deben indicar claramente su nombre, su correo electrónico, ciudad de residencia y a qué comunidad religiosa pertenecen.

Los cinco minutos de Dios
Enero 8
No es tan fácil confesarse a sí mismo que uno "no quiere" hacer las cosas; es mucho más fácil buscar una excusa que nos exima de los compromisos de nuestros deberes.
La excusa más fácil es decir "no puedo", y con esa excusa ya quedamos tranquilos; pero en nuestro interior sabemos muy bien que no es cierto que no podemos; y así tratamos de serenarnos, diciéndonos a nosotros mismos que "no sabemos cómo hacer"; y como esta segunda excusa tampoco llega a serenar nuestra conciencia, recién entonces apuntamos a la realización, con un tímido "creo que no puedo".
Quedan finalmente los tres últimos tramos antes de llegar a la realización de la obra, que son: "puedo, quiero, hago".
Créeme, si hicieras todo cuanto puedes, tú mismo quedarías asombrado de lo que puedes; pero ahora te dejo mi pregunta: y, si puedes mucho más de lo que estás haciendo ¿no estarás obligado a hacerlo?
Si Cristo cuenta contigo, ¿puedes defraudarlo? No olvides que lo único santo que hay es la voluntad de Dios. Cuando Pablo es derribado del caballo por el Espíritu de Dios, responde: “¿Qué debo hacer, Señor?” (Hch 22,10). Acércate hoy mismo al Sagrario, pregúntale y escucha lo que Él te responde.
* P. Alfonso Milagro

Jardinero de Dios
-el más pequeñito de todos-

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.