domingo, 24 de julio de 2011

Pequeñas Semillitas 1431

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 6 - Número 1431 ~ Domingo 24 de Julio de 2011
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)


… Y mientras caminamos, nos toca ser tierra buena  que da fruto abundante, árbol cuyas ramas acogen a las aves heridas o débiles, levadura y fermento de nuestro mundo, trabajadores esforzados y alegres en la construcción del Reino de Dios, ya aquí y ahora. Porque hemos encontrado un tesoro y hemos puesto en Él nuestro corazón.
Lucio Arauzo


La Palabra de Dios:
Evangelio del día


En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: «El Reino de los Cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo que, al encontrarlo un hombre, vuelve a esconderlo y, por la alegría que le da, va, vende todo lo que tiene y compra el campo aquel.
»También es semejante el Reino de los Cielos a un mercader que anda buscando perlas finas, y que, al encontrar una perla de gran valor, va, vende todo lo que tiene y la compra.
»También es semejante el Reino de los Cielos a una red que se echa en el mar y recoge peces de todas clases; y cuando está llena, la sacan a la orilla, se sientan, y recogen en cestos los buenos y tiran los malos. Así sucederá al fin del mundo: saldrán los ángeles, separarán a los malos de entre los justos y los echarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el rechinar de dientes.
»¿Habéis entendido todo esto?». Dícenle: «Sí». Y Él les dijo: «Así, todo escriba que se ha hecho discípulo del Reino de los Cielos es semejante al dueño de una casa que saca de sus arcas lo nuevo y lo viejo».
(Mateo 13, 44-52)

Comentario
Hoy, el Evangelio nos quiere ayudar a mirar hacia dentro, a encontrar algo escondido: «El Reino de los Cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo» (Mt 13,44). Cuando hablamos de tesoro nos referimos a algo de valor excepcional, de la máxima apreciación, no a cosas o situaciones que, aunque amadas, no dejan de ser fugaces y chatarra barata, como son las satisfacciones y placeres temporales: aquello con lo que tanta gente se extenúa buscando en el exterior, y con lo que se desencanta una vez encontrado y experimentado.
El tesoro que propone Jesús está enterrado en lo más profundo de nuestra alma, en el núcleo mismo de nuestro ser. Es el Reino de Dios. Consiste en encontrarnos amorosamente, de manera misteriosa, con la Fuente de la vida, de la belleza, de la verdad y del bien, y en permanecer unidos a la misma Fuente hasta que, cumplido el tiempo de nuestra peregrinación, y libres de toda bisutería inútil, el Reino del cielo que hemos buscado en nuestro corazón y que hemos cultivado en la fe y en el amor, se abra como una flor y aparezca el brillo del tesoro escondido.
Algunos, como san Pablo o el mismo buen ladrón, se han topado súbitamente con el Reino de Dios o de manera impensada, porque los caminos del Señor son infinitos, pero normalmente, para llegar a descubrir el tesoro, hay que buscarlo intencionadamente: «También es semejante el Reino de los Cielos a un mercader que anda buscando perlas finas» (Mt 13,45). Quizá este tesoro sólo es encontrado por aquellos que no se dan por satisfechos fácilmente, por los que no se contentan con poca cosa, por los idealistas, por los aventureros.
En el orden temporal, de los inquietos e inconformistas decimos que son personas ambiciosas, y en el mundo del espíritu, son los santos. Ellos están dispuestos a venderlo todo con tal de comprar el campo, como lo dice san Juan de la Cruz: «Para llegar a poseerlo todo, no quieras poseer algo en nada».
Rev. D. Enric PRAT i Jordana (Sort, Lleida, España)


Santoral y Efemérides


  En el SANTORAL CATÓLICO, hoy conmemoramos a:





Fuente: Catholic.net y EWTN

  Con relación a las EFEMÉRIDES, en un día como hoy…

1783 - Nace Simón Bolivar, “el libertador", militar venezolano.
1802 - Nace Alexandre Dumas, novelista y dramaturgo francés.
1820 - Se publica en Guatemala del primer número del periódico "El Editor Constitucional".
1823 - Batalla naval de Maracaibo: victoria del almirante colombiano José Padilla, que afianzó la independencia de Venezuela.
1843 - Nace Pedro Goyena, legislador jurisconsulto, militante católico argentino.
1848 - Nace Rafael Zayas Enrique, poeta mexicano.
1873 - Muere en Buenos Aires la actriz uruguaya Trinidad Guevara.
1909 - Fundación del Instituto Nacional de Panamá.
1911 - El estadounidense Hiram Bingham descubre las ruinas de Machu Pichu, la ciudad sagrada de los incas.
1925 - Nace Ignacio Aldecoa, novelista español.
1928 - China adopta el sistema métrico decimal.
1936 - Guerra Civil española: la Junta de Defensa Nacional dispone que Franco asuma el mando del Ejército de Marruecos y del Sur de España, y Mola, el del Ejército del Norte.
1974 - Constantino Karamanlis asume el cargo de primer ministro de Grecia.
1980 - Muere Peter Sellers, actor británico.
1991 - Muere Isaac Bashevis Singer, escritor estadounidense de origen polaco, premio Nobel de Literatura 1978.
1998 - Se lanza el Windows 98 en España.
2003 - Tras asegurar que habían sido asesinados en un enfrentamiento, Estados Unidos difunde las fotos de los hijos de Saddam Hussein muertos.

Fuente: Periodismo.com


Palabras del Beato Juan Pablo II

"Cristo instituyó la Iglesia
como una comunidad de salvación,
en la que se prolonga hasta el fin de los tiempos
su mediación salvífica en virtud
del Espíritu Santo que Él envió"

 
Beato Juan Pablo II
 

Tema del día:
Buscar el Reino de Dios


El centro o tema principal de toda la predicación de Jesús es el “Reino de Dios”, que es del otro mundo, pero ya comienza aquí y está entre nosotros. Es el proyecto salvífico de Dios para con nosotros. Jesús tendrá que corregir ideas materialistas sobre  ese Reino, pues para muchos era una restauración de la monarquía de David o una revancha de estilo nacionalista. Tampoco es lo mismo que la Iglesia, aunque la Iglesia es el terreno privilegiado donde el Reino se va edificando y es “el germen y principio del Reino”. Pero éste está por encima de toda realización concreta y aun religiosa.

Hoy en el evangelio consideramos algunas características del “Reino de Dios”, que Jesús nos describe por medio de parábolas. Las dos primeras, la del tesoro y la perla, vienen a decir lo mismo: El Reino de los cielos es algo muy precioso, que suele estar escondido para la mayoría de la gente; pero que si se le encuentra y se le consigue, es de tanto valor que nos llena el alma y nos da la mayor felicidad.

En esta vida encontramos por desgracia en muchas personas lo que se llama “una crisis existencial”. Hay muchas comodidades, mucho progreso económico, mucha diversión; pero hay muchas enfermedades psicológicas y muchos suicidios. Y sucede que cuanto más avanzados o progresistas son los países, más suicidios hay. Y entre los jóvenes se da mucha droga y mucho desencanto de la vida. Esto es porque les parece que la vida no conduce a nada, que no vale la pena luchar por nada, que todo es lo mismo y llegan a pensar que no hay que buscar nada porque nada encontrarán.

Han perdido el contacto con lo vital. Pero el corazón humano tiene mayores exigencias que el solo “ir tirando”. Desde lo hondo del corazón brota la pregunta por el sentido de la vida: Debe haber algo grande por lo cual vale la pena gastarse y desgastarse. De hecho el sacrificio, el dar generosamente la vida, llena más del sentimiento de felicidad que la comodidad o la diversión. En medio de esa vida podemos encontrar el tesoro que nos llene toda nuestra vida. Muchos santos lo encontraron al escuchar, con el corazón abierto, alguna parte de la Palabra de Dios.

Para ello debemos preparar el corazón. Para encontrar el amor de Dios debemos estar dispuestos a sacrificarnos por el bien de nuestros prójimos. A veces vamos a Misa y no descubrimos el tesoro de la Eucaristía con la presencia de quien puede llenarnos el alma de amor y felicidad. Recordamos lo que nos dijo Jesucristo: “Donde está tu tesoro, allí está tu corazón”. Debemos tener una verdadera escala de valores: el Reino de Dios vale inmensamente más que el dinero, el poder y el placer. Es difícil dar con ello, pero hay que descubrirlo y pedirle gracia a Dios para comprenderlo.

En otra parábola nos dice Jesús que el Reino de Dios es como una red barredera. En este mundo están juntos los buenos y los malos. No tenemos porqué juzgar a nadie, sino trabajar para que los que están más flacos en la gracia y en la fe, puedan llenarse más de este espíritu y poder un día participar con los santos en el cielo. Al fin del mundo Dios hará la separación oportuna. Mientras tanto trabajemos todos como hermanos unidos y trabajemos en bien de los demás.

La última parábola de este día nos dice que en este buscar el Reino de Dios debemos aprovechar todo lo bueno que encontramos a nuestra alrededor. Hay gente que desprecia todo lo antiguo y los hay que desprecian todas las novedades. Siempre ha habido cosas buenas provechosas y salen a la luz nuevas cosas aprovechables. Es como en la Biblia: hay que saber aprovechar el Antiguo y el Nuevo Testamento.

Por eso el buscar el bien no es cosa de necios, sino de inteligentes, que saben escoger lo bueno continuamente, y se quedan con lo mejor. Jesús les había dicho poco antes a los apóstoles: “Dichosos vuestros ojos porque ven y vuestros oídos porque oyen”. Ojalá nuestros sentidos estén atentos ante lo mejor, que es el Reino de Dios, que Jesús nos propone para darnos la paz, la libertad y la plena felicidad.

Enviado por el P. Silverio Velasco (España)


Nuevo video y artículo

Hay un nuevo video subido a esta blog.
Para verlo debes ir al final de la página. 

Hay nuevo material publicado en el blog
"Juan Pablo II inolvidable"
Puedes acceder en la dirección:


Meditación breve


Un hombre caminaba por el bosque cuando vió una zorra lisiada.
"¿Cómo hará para alimentarse?", pensó.
En ese momento, se acercó un tigre, con un animal entre los dientes. Sació su apetito, y le dejó a la zorra lo que había sobrado.
"Si Dios ayuda a la zorra, también me va a ayudar", reflexionó.
Volvió a su casa, se encerró en ella, y se quedó esperando que los Cielos le proveyeran de alimento. Nada pasó. Cuando ya se estaba quedando demasiado débil para salir a trabajar, se le apareció un ángel.
- ¿Por qué decidiste imitar a la zorra lisiada? -preguntó el ángel. ¡Levántate, toma tus herramientas, y sigue el camino del tigre!
Paulo Coelho


Nunca nos olvidemos de agradecer


Alguna vez leí que en el cielo hay dos oficinas diferentes para tratar lo relativo a las oraciones de las personas en la tierra:
Una es para receptar pedidos de diversas gracias, y allí los muchos ángeles que atienden trabajan intensamente y sin descanso por la cantidad de peticiones que llegan en todo momento.
La otra oficina es para recibir los agradecimientos por las gracias concedidas y en ella hay un par de ángeles aburridos porque prácticamente no les llega ningún mensaje de los hombres desde la tierra para dar gracias...
Desde esta sección de "Pequeñas Semillitas" pretendemos juntar una vez por semana los mensajes para la segunda oficina: agradecimientos por favores y gracias concedidas como respuesta a nuestros pedidos de oración.

Nuestro amigo Exequiel Diego Milanovsky, de la ciudad de San Lorenzo, provincia de Santa Fe, Argentina, quiere hacer público su agradecimiento a todas las personas que han orado por el eterno descanso de su hermano Cristian, fallecido trágicamente el 13 de julio pasado. Y también expresa su agradecimiento por los oraciones que han permitido la recuperación de la salud de su sobrino Gastón que ya está en su casa. Nos unimos y damos gracias a Dios.

 
"Camino"

 
 
"Lee despacio estos consejos. Medita pausadamente estas consideraciones.
Son cosas que te digo al oído, en confidencia de amigo, de hermano, de padre.
Y estas confidencias las escucha Dios. No te contaré nada nuevo.
Voy a remover en tus recuerdos, para que se alce algún pensamiento que te hiera:
y así mejores tu vida y te metas por caminos de oración y de Amor.
Y acabes por ser alma de criterio"

San Josemaría Escrivá de Balaguer

Capítulo 23.

528
Una característica muy importante del varón apostólico es amar la Misa.

529
La Misa es larga, dices, y añado yo: porque tu amor es corto.

530
¿No es raro que muchos cristianos, pausados y hasta solemnes para la vida de relación (no tienen prisa), para sus poco activas actuaciones profesionales, para la mesa y para el descanso (tampoco tienen prisa), se sientan urgidos y urjan al Sacerdote, en su afán de recortar, de apresurar el tiempo dedicado al Sacrificio Santísimo del Altar?

-Continúa mañana-
Jardinero de Dios
-el más pequeñito de todos-

.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.