PEQUEÑAS
SEMILLITAS
Año 10 - Número 2756
~ Viernes 7 de Agosto de 2015
Desde la ciudad de
Córdoba (Argentina)
Alabado
sea Jesucristo…
Los humanos, que tan ingratos somos con
el hermoso planeta azul que nos regalaste, Señor Jesús, hoy venimos a ti a pedirte
de tu infinita bondad, que perdones tantos desatinos y nos des una nueva
oportunidad de cuidarlo y disfrutarlo, para nosotros y para nuestra
descendencia.
Sabiendo utilizar cada uno de los dones
que nos regalaste, cuidando los bosques, el agua, el aire, los animalitos que
son nuestros hermanos menores. Preservando el planeta de toda forma de
contaminación. Conservando y promoviendo los recursos naturales y alimentos
para toda la humanidad.
¡Buenos días!
¡Cuida por dónde caminas!
En san
Pío de Pietrelcina, junto con sus virtudes heroicas, nos deslumbran los
maravillosos carismas de profecía, clarividencia espiritual, visiones, aromas
místicos, bilocaciones y curaciones milagrosas, que lo convirtieron en una
celebridad internacional.
Un hombre fue a San Giovanni Rotondo para
conocer al Padre Pío, pero era tal la cantidad de gente que había que tuvo que
volverse sin ni siquiera poder verlo. Mientras se alejaba del convento sintió
el maravilloso perfume que emanaba de los estigmas del padre y se sintió
reconfortado. Unos meses después, mientras caminaba por una zona montañosa,
sintió nuevamente el mismo perfume. Se paró y quedó extasiado por unos momentos
inhalando el exquisito olor. Cuando volvió en sí, se dio cuenta que estaba al
borde de un precipicio y que si no hubiera sido por el perfume del Padre
hubiera seguido caminando... Decidió ir de inmediato a San Giovanni Rotondo a
agradecer al Padre Pío. Cuando llegó al convento, el Padre Pío, el cual jamás
lo había visto, le gritó sonriendo: —¡Hijo mío! ¡Cuida por dónde caminas!
En la
Biblia la palabra “camino” se usa en sentido simbólico: “estilo de vida o norma
de conducta”. Por lo tanto, “cuida por dónde caminas”, significaría ”está
alerta para no tomar el camino del mal”. El salmo 119 dice: “Señor, he
examinado mi camino, para enderezar mis pies a tus preceptos”, y además,
“Ensánchame el corazón para correr por el camino de tus mandatos”. Que mires e
imites a Jesús cuya vida es “camino” de salvación.
Enviado por el P. Natalio
La Palabra de
Dios:
Evangelio de hoy
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus
discípulos: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su
cruz y sígame. Porque quien quiera salvar su vida, la perderá, pero quien
pierda su vida por mí, la encontrará. Pues, ¿de qué le servirá al hombre ganar
el mundo entero, si arruina su vida? O, ¿qué puede dar el hombre a cambio de su
vida? Porque el Hijo del hombre ha de venir en la gloria de su Padre, con sus
ángeles, y entonces pagará a cada uno según su conducta. Yo os aseguro: entre
los aquí presentes hay algunos que no gustarán la muerte hasta que vean al Hijo
del hombre venir en su Reino». (Mt 16,24-28)
Comentario
Hoy, el Evangelio nos sitúa claramente
frente al mundo. Es radical en su planteamiento, no admite medias tintas: «Si
alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame»
(Mt 16,24). En numerosas ocasiones, frente al sufrimiento generado por nosotros
mismos o por otros, oímos: «Debemos soportar la cruz que Dios nos manda... Dios
lo quiere así...», y vamos acumulando sacrificios como cupones pegados en una
cartilla, que presentaremos en la auditoria celestial el día que nos toque
rendir cuentas.
El sufrimiento no tiene valor en sí
mismo. Cristo no era un estoico: tenía sed, hambre, cansancio, no le gustaba
que le abandonaran, se dejaba ayudar... Donde pudo alivió el dolor, físico y
moral. ¿Qué pasa entonces?
Antes de cargar con nuestra “cruz”, lo
primero, es seguir a Cristo. No se sufre y luego se sigue a Cristo... A Cristo
se le sigue desde el Amor, y es desde ahí desde donde se comprende el
sacrificio, la negación personal: «Quien quiera salvar su vida, la perderá,
pero quien pierda su vida por mí, la encontrará» (Mt 16,25). Es el amor y la
misericordia lo que conduce al sacrificio. Todo amor verdadero engendra
sacrificio de una u otra forma, pero no todo sacrificio engendra amor. Dios no
es sacrificio; Dios es Amor, y sólo desde esta perspectiva cobra sentido el
dolor, el cansancio y las cruces de nuestra existencia tras el modelo de hombre
que el Padre nos revela en Cristo. San Agustín sentenció: «En aquello que se
ama, o no se sufre, o el mismo sufrimiento es amado».
En el devenir de nuestra vida, no
busquemos un origen divino para los sacrificios y las penurias: «¿Por qué Dios me
manda esto?», sino que tratemos de encontrar un “uso divino” para ello: «¿Cómo
podré hacer de esto un acto de fe y de amor?». Es desde esta posición como
seguimos a Cristo y como —a buen seguro— nos hacemos merecedores de la mirada
misericordiosa del Padre. La misma mirada con la que contemplaba a su Hijo en
la Cruz.
Rev. D. Pedro IGLESIAS Martínez (Rubí, Barcelona,
España)
Santoral Católico:
San Cayetano de
Thiene
Presbítero y
Fundador
Nació en Vicenza (Italia) el año 1480.
Estudió derecho en Padua y luego marchó a Roma, donde el papa Julio II lo
empleó en la curia como protonotario. Muerto el Papa dejó la corte pontificia y
se ordenó de sacerdote en 1516. Volvió a Vicenza, se entregó a las obras de
religión y misericordia y reorganizó el Oratorio del Divino Amor. En 1520 pasó
a Venecia, donde sirvió a los pobres en un hospital. Para remediar las
carencias que observó en parte del clero, fundó en Roma la sociedad de los
Clérigos Regulares llamados Teatinos, inspirada en la vida de los Apóstoles,
para promover la formación del clero, la predicación, el confesonario, la
atención a los pobres y enfermos, especialmente los incurables, la digna
celebración del culto divino. La Orden no debía tener bienes ni pedir limosna,
confiando en la Providencia. San Cayetano pasó el último período de su vida en
Nápoles, donde desarrolló una extraordinaria labor de renovación en el clero,
en los religiosos y en el pueblo. Murió 7 de agosto de 1547.
Oración: Señor, Dios nuestro, que
concediste a san Cayetano imitar el modo de vivir de los apóstoles, concédenos,
por su intercesión y ejemplo, poner en ti nuestra confianza y buscar siempre el
reino de los cielos. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
© Directorio Franciscano
La frase de hoy
“Ama, y haz lo que quieras;
si callas, callaras con amor;
si gritas, gritaras con amor;
si corriges, corregirás con amor;
si perdonas, perdonaras con amor.
Como esté dentro de ti la raíz del amor,
ninguna otra cosa sino el bien podrá
salir”
~ San Agustín ~
Temas Médicos:
La Soledad
Aunque la soledad es parte del ser
humano, no creo que sea una buena opción para enfrentar las crisis personales o
familiar e incluso sociales.
Obviamente los sentimientos que
despierta la soledad pueden diferir según la situación que la haya generado. No
es lo mismo una persona que decide “darse un tiempo para estar solo” que aquel
que no tiene con quién compartir la vida -porque carece de familiares, amigos o
compañeros- o quien se siente solo rodeado de personas, o incluso el sentir de
quien que se queda solo por haber perdido a alguien querido.
Si Ud. está solo, ¿pensó alguna vez en
las razones que originaron dicha soledad?
Porque si esto le trae pesar, es
necesario que busque los caminos que lo conecten con el “afuera” ya que en
numerosas ocasiones uno se siente solo únicamente por no ser capaz de pedir
ayuda cuando la necesita o por la imposibilidad de mostrarse tal cual es: un
ser humano vulnerable.
En realidad, aceptar esto y no engañarse
a sí mismo es dar el primer paso para mejorar su calidad de vida. El resto es comprender que todo dolor
compartido siempre es la mitad de dolor, y que permitirle a los demás que le
brinden su ayuda lo hará cultivar una actitud más positiva y lo conducirá hacia
el bienestar.
7
pasos para salir de la soledad
• Admita que está solo.
• Busque las causas de su soledad. ¿Cómo se produjo? ¿Cuándo? ¿Por
qué? ¿Qué puede aprender de esto? ¿Qué puede hacer para cambiar? ¿Qué tipo de
ayuda necesita? Intente llevar un registro, es una forma de ver cuáles son sus
debilidades y fortalezas, identificar lo que siente y proyectarse hacia el
futuro.
• Acepte que debe pensar en las cosas que pueden aliviarlo: hablar
con amigos o familiares, concurrir a un grupo de autoayuda, leer literatura que
se relacione con el momento que está viviendo pueden ser algunas opciones.
• Organice algún plan para salir del aislamiento: visite amigos,
concurra a reuniones sociales, anótese en un gimnasio, tome clases de baile,
etc
• Comience a llevarlo a cabo en forma sistemática y regular.
• Manténgase en contacto con su entorno y no baje la guardia.
• Si la soledad o el aislamiento lo perturban, pida ayuda a un
profesional, porque puede ser un síntoma de depresión u otros problemas
psicológicos.
Fuente: Material de Internet
Nuevo artículo
Hay nuevo material publicado en el blog
"Juan
Pablo II inolvidable"
Puedes acceder en la dirección:
Pedidos de oración
Pedimos oración por la Santa Iglesia
Católica; por el Papa Francisco, por
el Papa Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas,
catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la
unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro
Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones; por el
triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María; por la conversión de todos los pueblos; por
la Paz en el mundo; por los cristianos
perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros lugares; por
nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente por las
enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo, el
hambre y la pobreza; por los niños con cáncer y otras enfermedades graves; por el drama de los inmigrantes del Mediterráneo;
por los presos políticos y la falta de libertad en muchos países del mundo; por
la unión de las familias, la fidelidad de los matrimonios y por más inclinación
de los jóvenes hacia este sacramento; por el aumento de las vocaciones
sacerdotales y religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio.
Pedimos oración por José “Pepe” P., que vive en la provincia de Entre Ríos, Argentina,
y está padeciendo problemas de salud luego de una cirugía de aparato urinario y
complicaciones varias. Pepe es un amigo de “Pequeñas Semillitas” al que la vida
ha golpeado mucho en los últimos tiempos y por eso nos unimos en oraciones para
pedirle a la Virgen de Lourdes que lo ayude y a Jesús, el Buen Pastor, que lo
sane y le permita volver pronto a pastorear en Su rebaño.
Pedimos oración por dos bebitos mellizos
nacidos prematuros en Córdoba, Argentina, y que están internados en
Neonatología: Bautista (1,300 Kg) y Valentín (1,200 Kg). Que el Divino Niño
Jesús los acompañe en su crecimiento y María los arrulle en sus brazos para que
pronto alcancen el peso y la maduración necesarios para ir a su casa con su
familia.
Pedimos oración por la urgente necesidad de vivienda de Inés Socorro M. R., por Julia Ch., peruana, enferma de cirrosis avanzada y por el P. Marcos con accidente cerebro vascular.
Pedimos oración por la urgente necesidad de vivienda de Inés Socorro M. R., por Julia Ch., peruana, enferma de cirrosis avanzada y por el P. Marcos con accidente cerebro vascular.
Seguimos rezando por la salud del Padre José Cuesta, sacerdote salesiano
de la ciudad de Córdoba, Argentina.
Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara
nuestras debilidades,
para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la
paciencia;
escucha ahora las plegarias que te dirigimos por
nuestros hermanos enfermos
y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la
aflicción o la enfermedad,
la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu
hijo ha llamado dichosos,
y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la
redención del mundo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén
Unidos a María
Dice
el libro de la Sabiduría: “Se deja ver fácilmente de los que la aman, y hallar
de los que la buscan”. Y así es María, que se deja ver de aquellos que la aman,
pues si la Virgen es buena y amorosa hasta con los pecadores e ingratos,
¡cuánto más amorosa será para con los que la aman, invocan y buscan! No, no
podemos hacernos una idea de lo mucho que nos ama la Virgen. Incluso María se
dejará ver visiblemente por nosotros si la amamos. ¡Cuántos santos la han visto
y han conversado con Ella! ¿Por qué no también nosotros? Por lo menos la
veremos en el momento de nuestra muerte, pues Ella ha prometido que asistirá a
sus devotos en este momento crucial de la vida. En estos tiempos en que el mal
muestra más su rostro, también María muestra más su rostro a los hombres para
consolarlos y alentarlos, para infundirles ánimo y hacerles perder el miedo. Y
aunque no veamos visiblemente a María, sabemos que Ella está constantemente a
nuestro lado con su cuerpo glorioso y no nos abandona NUNCA. ¡Qué felicidad!
¡Viva María!
Jardinero de Dios
-el más
pequeñito de todos-
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.