sábado, 9 de febrero de 2013

Pequeñas Semillitas 1948


PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 8 - Número 1948 ~ Sábado 9 de Febrero de 2013
- AÑO DE LA FE -
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
   

Alabado sea Jesucristo…
Bendice alma mía al Señor y todo mi ser a su santo nombre. Con todo mi corazón, con toda mi mente, con todo mi ser. No olvides sus beneficios, tan innumerables, tan incontables, tan graciosos, tan inesperados, tan recordados… Tú sientes ternura por mí, tú sabes que soy barro e infundes tu espíritu para que viva de tu amor. Tu misericordia dura por siempre, desde la salida del sol hasta su ocaso, desde el principio hasta el fin, y pasa de generación en generación. Hoy, Señor, te bendigo con todo mi ser, con toda la fuerza, tan débil, de mi amor. Aún me quedas tú, con tu amor.
Libro de los Salmos


La Palabra de Dios:
Evangelio de hoy


En aquel tiempo, los Apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y lo que habían enseñado. Él, entonces, les dice: «Venid también vosotros aparte, a un lugar solitario, para descansar un poco». Pues los que iban y venían eran muchos, y no les quedaba tiempo ni para comer. Y se fueron en la barca, aparte, a un lugar solitario. Pero les vieron marcharse y muchos cayeron en cuenta; y fueron allá corriendo, a pie, de todas las ciudades y llegaron antes que ellos. Y al desembarcar, vio mucha gente, sintió compasión de ellos, pues estaban como ovejas que no tienen pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas.
(Mc 6,30-34)

Comentario
Hoy, el Evangelio nos plantea una situación, una necesidad y una paradoja que son muy actuales.
Una situación. Los Apóstoles están “estresados”: «Los que iban y venían eran muchos, y no les quedaba tiempo ni para comer» (Mc 6,30). Frecuentemente nosotros nos vemos abocados al mismo trasiego. El trabajo exige buena parte de nuestras energías; la familia, donde cada miembro quiere palpar nuestro amor; las otras actividades en las que nos hemos comprometido, que nos hacen bien y, a la vez, benefician a terceros... ¿Querer es poder? Quizá sea más razonable reconocer que no podemos todo lo que quisiéramos.
Una necesidad. El cuerpo, la cabeza y el corazón reclaman un derecho: descanso. En estos versículos tenemos un manual, frecuentemente ignorado, sobre el descanso. Ahí destaca la comunicación. Los Apóstoles «le contaron todo lo que habían hecho» (Mc 6,30). Comunicación con Dios, siguiendo el hilo de lo más profundo de nuestro corazón. Y —¡qué sorpresa!— encontramos a Dios que nos espera. Y espera encontrarnos con nuestros cansancios.
Jesús les dice: «Venid también vosotros aparte, a un lugar solitario, para descansar un poco» (Mc 6,31). ¡En el plan de Dios hay un lugar para el descanso! Es más, nuestra existencia, con todo su peso, debe descansar en Dios. Lo descubrió el inquieto Agustín: «Nos has creado para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que no descanse en ti». El reposo de Dios es creativo; no “anestésico”: toparse con su amor centra nuestro corazón y nuestros pensamientos.
Una paradoja. La escena del Evangelio acaba “mal”: los discípulos no pueden reposar. El plan de Jesús fracasa: son abordados por la gente. No han podido “desconectar”. Nosotros, con frecuencia, no podemos liberarnos de nuestras obligaciones (hijos, cónyuge, trabajo...): ¡sería como traicionarnos! Se impone encontrar a Dios en estas realidades. Si hay comunicación con Dios, si nuestro corazón descansa en Él, relativizaremos tensiones inútiles... y la realidad —desnuda de quimeras— mostrará mejor la impronta de Dios. En Él, allí, hemos de reposar.
Rev. D. David COMPTE i Verdaguer (Manlleu, Barcelona, España)


Santoral Católico:
San Miguel Febres-Cordero Muñoz
Religioso Lasallista


Cuando el hermano Miguel Febres Cordero era niño, todos lo llamaban “Panchito” y hasta le tenían lástima por su delicada salud y sus pies deformes que le impedían caminar bien. Pero el 21 de octubre de 1984, día de su canonización en la Plaza de San Pedro, en Roma, se convirtió en el gran santo de la historia de Ecuador: seguidor, hasta en la santidad, de Juan Bautista de La Salle, el fundador de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, Congregación a la que pertenecía Panchito.

En 1863 el presidente ecuatoriano García Moreno, preocupado por el enorme analfabetismo de su país, después de muchas insistencias, obtiene que diez Hermanos de las Escuelas Cristianas vayan de Francia a Ecuador a fundar las escuelas populares. Las primeras tres escuelas nacen en Quito, Guayaquil y Cuenca. Los comienzos son duros, los Hermanos viven y enseñan en edificios miserables. Pero los alumnos se multiplican; entre los de Cuenca está Panchito, que se distingue inmediatamente por su inteligencia y por su deseo de aprender. La enseñanza le encanta, permanece en la escuela fuera de horario y con frecuencia les da una mano a los Hermanos. Quisiera entrar a formar parte de su obra, pero los familiares se oponen: demasiado pobre la vida de los Hermanos para quien, como él, pertenece a la alta sociedad. ¿Por qué, si tiene vocación religiosa, no sigue la carrera eclesiástica?

Miguel Febres Cordero obedece y entra al seminario. Sale a los tres meses con graves enfermedades debidas a la dificultad para ambientarse. Finalmente los padres ceden, y en la fiesta de la Anunciación de 1868 Miguel puede vestir el hábito de los lasallistas, convirtiéndose en el Hermano Miguel.

Terminado el noviciado, pasa a Quito, entre otras cosas para evitar las presiones del padre que sigue insistiendo para llevárselo a casa. Son años de trabajo intenso, preludio de una vida que no conocerá descanso, ni mucho menos tiempo libre. Tiempo completo para la enseñanza, con horarios agotadores, el trabajo catequístico y la ayuda a los cohermanos enfermos. Sin embargo, el flaco Panchito logra sacar algunas horas para estudiar idiomas (no solo latín, sino también francés, italiano, inglés y alemán) y para escribir libros para las escuelas.

En tres años publica un centenar de textos escolares que tratan de religión y literatura, gramática y matemáticas. Aunque en varios casos se trata solo de ediciones corregidas, el trabajo es increíble, si se tiene en cuenta que Miguel fundamentalmente es un autodidacta. Como profesor es muy bueno, y logra hacerse querer. Cuando en 1890 se abre el grande Instituto La Salle del Cebollar, que tiene un semi-internado, es a él a quien se le confían los semi-internos.

En 1907 lo llaman a Europa a preparar los textos escolares para los Hermanos de las Escuelas Cristianas que parten para América Latina. Primero va a Bélgica y luego, por su delicada salud, en busca de un clima más suave, pasa a España (a Premiá de Mar, cerca de Barcelona). Siguen siendo años de mucha actividad hasta la muerte por pulmonía. Antes de morir, les dice a los hermanos que rodean su lecho de muerte, entristecidos: “Otros trabajarán mejor que yo”. Era el 9 de febrero de 1910.

Fuente: Catholic.net


¡Buenos días!

Inesperado pedido…

San Jerónimo vivió durante 25 años en la gruta del nacimiento de Jesús, mientras se dedicaba a la traducción de la Biblia al latín, por encargo del Papa san Dámaso. Un día hizo esta oración al Divino Niño de Belén:

—Querido Niño, ¿cómo podré compensarte, ya que para hacerme feliz, has bajado a esta pobre gruta y has padecido tanto por mí?
—Alaba a Dios, –oyó que decía –, y glorifícalo con las palabras: “Gloria a Dios en las alturas”.
—Pero yo, querido Niño, quiero darte alguna cosa; quiero darte todo mi dinero.
—Dalo a los pobres y será como si me lo hubieras dado a mí.
—Sí, lo haré; pero, yo quiero darte alguna cosa también a ti; si no moriré de dolor.
—Entonces dame tus pecados; los quiero para mí; para borrarlos.
—¡Oh querido Niño, dijo el Santo llorando; toma todo lo que es mío y dame todo lo que es tuyo!

“Dame tus pecados”: ¡qué inesperado fue para Jerónimo el pedido del Divino Niño! Sin embargo, nada busca tanto nuestro Salvador como liberarnos de la pesada carga de nuestras fragilidades y culpas. Un día Jesús le dijo a santa Faustina Kowalska: “Que no tema acercarse a mí el alma más débil y pecadora, aunque tuviera más pecados que granos de arena hay en la tierra. Dile a las almas pecadoras que no tengan miedo de acercarse a mí; habla de mi gran misericordia”. Alentador mensaje que nos invita a abrir el corazón a la confianza en el Señor.

Padre Natalio


La frase de hoy

“En la tierra hace falta:
personas que trabajen más
y critiquen menos,
que construyan más
y destruyan menos;
que prometan menos
y resuelvan más;
que esperen recibir menos
que den más y que digan
mejor ahora que mañana”


Tema del día:
Ecumenismo = Nuestro mandato olvidado


Al despedirse la noche antes de morir, Jesús dijo a los que estaban con él que "tenía otras ovejas que no son de este redil" y que quienes estaban con él en ese momento no eran sus únicos seguidores.  Muy importante, también dijo que anhelaba la unidad con aquellos otros con tanta urgencia y profundidad como la anhelaba con aquellos que estaban en la habitación con él.

Entre otras cosas, esto significa que no importa cuál es nuestra denominación cristiana en particular, no somos los únicos seguidores de Cristo, y no tenemos más derecho a su amor que aquellos millones de personas que no son de nuestro mismo grupo. Además, el ser un discípulo de Jesús significa que nosotros, como Él, también debemos  tener esa necesidad y debemos orar por la unidad con aquellos que están separados de nosotros.  De hecho, las divisiones entre nosotros como cristianos; el hecho de que estemos divididos en más de un centenar de denominaciones, y el hecho de que, dentro de estas denominaciones, estamos aún más amargamente divididos por ideologías y que vivimos con desconfianza entre nosotros, constituye tal vez el más grande de todos los escándalos que el cristianismo ha dado y sigue dando al mundo.

En la mayoría de los casos, a pesar de la buena voluntad y de un considerable y genuino esfuerzo en los últimos años, todavía no estamos orando unos por otros y llegando a los demás con todo el corazón. La relación entre las denominaciones cristianas hoy en día, y a menudo dentro de esas mismas denominaciones, se caracteriza más por re-atrincheramiento que por apertura, por la desconfianza que por la confianza, por la falta de respeto que por el respeto, por la demonización que por la empatía, y por la falta de caridad que por la cortesía y la amabilidad. Lamentablemente, también, más que por la apertura ecuménica, nuestras iglesias se caracterizan por un exceso de autosuficiencia y engreimiento desde el que se afirma: “Poseemos la verdad. ¡No tenemos necesidad de ti!”

Sin embargo, como cristianos, ¿quiénes son nuestros verdaderos hermanos y hermanas? ¿Son solo aquellos que están dentro de nuestra propia denominación particular? ¡Tal vez si, o tal vez no! En varias ocasiones, durante su ministerio, mientras Jesús estaba hablando a un grupo de personas, alguien se le acercó y le dijo que su madre y su familia, que estaban fuera del círculo de este grupo en particular, querían hablar con él. La respuesta de Jesús fue de gran alcance: en cada caso, respondió con una pregunta: "¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos y hermanas?" Y responde a su propia pregunta diciendo: "Los que escuchan y cumplen la palabra de Dios, son para mí, madre y, hermano y hermana"

En una sociedad donde la relación de sangre lo era todo, esta  es una afirmación imponente. La sangre puede ser más espesa que el agua, sin embargo, Jesús afirma, la fe es más espesa que la sangre. La fe es la base real para la familia. Supera la biología. Por otra parte, sin forzar la lógica, también en esto está implícito que la fe también triunfa sobre las distintas denominaciones. ¿Quién es tu verdadero hermano o hermana como cristiano? ¿Tu compañero Católico Romano? ¿Tu compañero Presbiteriano? ¿Tu compañero luterano? ¿Tu compañero Bautista? ¿Tu compañero Evangélico? ¿Tu compañero Metodista? ¿Tu compañero Anglicano o Episcopal? Claramente, para Jesús, es la persona que más profundamente escucha la palabra de Dios y la cumple, independientemente de la denominación. El discipulado cristiano se define más por el corazón que por una tarjeta de membresía a una iglesia en particular.

Esto se convierte en un mandato no negociable dentro de nuestro discipulado cristiano: Necesitamos irradiar la necesidad de Jesús por intimidad con todas las personas de fe sincera y, con ese fin, nuestras acciones hacia los que están fuera de nuestro círculo religioso siempre deben estar marcadas por el respeto, la gracia y la caridad y la genuina señal de que ansiamos estar unidos con ellos.

Respeto genuino, amabilidad y caridad sólo pueden basarse en una humildad que cree que nuestra propia iglesia, sea cual sea nuestra denominación, no tiene toda la verdad, no estamos libres de errores,  no estamos libres de pecado, y no somos plenamente fieles al evangelio. Todos nosotros, todas las iglesias cristianas, estamos en camino hacia la plenitud, hacia una comprensión completa de la verdad, y hacia una fidelidad más radical y honesta a lo que Jesús nos pide. Ninguno de nosotros ha llegado. Todos estamos transitando todavía hacia dónde hemos sido llamados.

Por lo tanto, nuestra tarea ecuménica real, sin importar nuestra denominación, no es la de tratar de ganar adeptos o convencer a otros de que nosotros tenemos más razón que ellos. Nuestra tarea principal es la conversión interna dentro de nuestra propia denominación.

Nuestra tarea principal es tratar de ser más fieles al evangelio, como individuos y como iglesias. Si hacemos esto, eventualmente nos uniremos como una iglesia, bajo un solo Cristo porque todos profundizaremos más en el misterio de Cristo y creceremos más profundamente en nuestra propia intimidad con Jesús, (en la hermosa frase de Avery Dulles) "convergemos progresivamente", eventualmente nos reuniremos en torno a un centro y una persona, Jesucristo.

Kenneth Cragg, después de pasar años como misionero cristiano hacia el Islam, sugirió que adoptáramos todas las iglesias cristianas el dar plena expresión a la plenitud de Cristo. Es evidente que todos nosotros todavía tenemos que expandir nuestros corazones.

Ron Rolheiser (Trad. Julia Hinojosa)
Fuente: Ciudad Redonda - Imagen: Google.


Humor:
Cuidados Intensivos


Sucedió que en la Sala de Cuidados Intensivos de un muy conocido hospital cuyo nombre nos reservamos por obvias razones: los pacientes internados en una determinada cama siempre morían los domingos a las 11 a.m., sin  importar su condición médica.
Tal hecho sorprendió y alarmó al personal médico y de enfermería.  
Al punto que algunos de ellos comenzaron a sospechar de fuerzas sobrenaturales interviniendo de alguna forma.  
Pero de todas maneras, nadie pudo resolver el misterio de las muertes de los días domingo a las 11 a.m.
Así que un grupo internacional de expertos en varias disciplinas fue constituido, el que luego de múltiples investigaciones, análisis y conjeturas, tomó la decisión de montar una discreta guardia en la sala para llegar al fondo del asunto.
Por lo que el domingo siguiente, pocos minutos antes de la hora 11 a.m., doctores, personal de enfermería, investigadores especiales de fenómenos paranormales, y hasta el mismo FBI, esperaban nerviosamente y cuidadosamente ocultos para ver por ellos mismos el terrible fenómeno.   
Algunos llevaban cruces de madera, libros de oración y otros objetos sagrados para protegerse de lo que fuera necesario.
Entonces, justo, exacto, cuando el reloj marcó las 11 a.m., Manolo, el muchacho de la limpieza, entró a la sala, se acercó a la "cama maldita", desenchufó los sistemas de soporte de vida y enchufó la aspiradora...


Meditación breve


Así como los niños están perdidos si quieren hacer su propia voluntad, puesto que no tienen experiencia del mundo y de la vida y necesitan un padre y una madre que los guíe, que piensen por ellos, que los cuiden y los guíen por el camino del bien; así también nosotros, que queremos ser infantes en la vida espiritual, debemos renunciar a nuestra propia voluntad para seguir la voluntad de Dios, que sabe guiarnos por el camino de la vida espiritual, tan desconocido para nosotros ,y en el que hay tantos peligros y tantas emboscadas del Maligno, que espera a la vera del camino para desviarnos de él.
Por eso tenemos que fiarnos de Dios, de la Virgen, de nuestro Ángel Custodio, y seguir sus consejos, seguir su voluntad, la voluntad de Dios, porque si queremos hacer lo que se nos da la gana, muy pronto estaremos enredados en pecados y en problemas de todo tipo, con peligro de perdernos para siempre en el Infierno.
Tenemos que aprender a ser niños dóciles, porque hay muchos peligros en la vida, y nadie puede andar por un país desconocido sin un guía experto, y más si en dicho país hay fieras dispuestas a despedazar o peligros de valles y quebradas abruptos. Y así es la vida del hombre sobre la tierra, que más que enemigos y peligros materiales, tiene enemigos y peligros espirituales, que no sorteará si no es dócil a Dios.
www.santisimavirgen.com.ar


Pedidos de oración

Pedimos oración por la Paz del Mundo; por la Santa Iglesia Católica; por el Papa, los sacerdotes, diáconos, seminaristas, catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones, por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente por las enfermedades, el hambre y la pobreza; por los presos políticos y la falta de libertad en muchos países del mundo, por la unión de las familias y la fidelidad de los matrimonios; por el aumento de las vocaciones sacerdotales y religiosas, y por las Benditas Almas del Purgatorio.

Pedimos oración por Paula, de Chile, una joven madre que ha sido intervenida quirúrgicamente siendo su estado muy delicado. Oramos por ella.

Pedimos oración por Yannaris A., de Las Tunas, Cuba, a la cual se le ha detectado un problema en el hígado pero todavía sin definir, para que por intercesión de la Virgen de la Caridad del Cobre ante su hijo Jesús le devuelvan la salud.

Pedimos oración, también desde Las Tunas, Cuba, por todos los jóvenes que están alejados de sus hogares por una u otra razón, para que el Señor les proteja y libre de todo peligro, a los que ya creen en Él que no permita que nunca se aparten de su camino y a los que no le conoce aún que encuentren a alguien que les lleve hasta Él.

Pedimos oración por el pronto restablecimiento de María, que vive en la ciudad de Campana, provincia de Buenos Aires, Argentina, quien el día 7 de este mes fue atropellada por un automóvil y sufrió serias lesiones en una rodilla que deberá ser operada. También pedimos por su hermana Nieves que la acompaña y atiende para que el Señor la fortalezca en su cuidado y el trabajo que debe continuar.

Pedimos oración por las siguientes personas de la provincia de Buenos Aires, Argentina: por Teresa, que padece una severa cardiopatía; por Gabriela y por Patricia, con problemas psicológicos; por el P. Pablo, un sacerdote quien deberá operarse pronto de síndrome túnel carpiano; y por Liliana Victoria C., que hace cuatro años está postrada en cama por secuelas de poliomielitis que contrajo de niña rogando al Buen Jesús que la ayude a superar su estrés, su ansiedad que la hecho aumentar de peso, sus dolores osteoarticulares y la angustia que le genera todo esto más el alejamiento de su familia

Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades,
para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia;
escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos
y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad,
la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu hijo ha llamado dichosos,
y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén

Nota de Redacción:
Para dar curso a los Pedidos de Oración es imprescindible dar los siguientes datos: nombres completos de la persona (habitualmente no publicamos apellidos), ciudad y país donde vive, y explicar el motivo de la solicitud de oración. Por favor: en los pedidos ser breves y concretos y enviarlos a pequesemillitas@gmail.com y deben poner en el asunto “Pedido de oración”, ya que los correos que llegan sin asunto (o con el asunto en blanco) son eliminados sin abrirlos. No se reciben pedidos de oración a través de Facebook ni por otro medio que no sea el correo antes señalado.
Los Pedidos de Oración se publican de lunes a sábados. Los domingos se publican los agradecimientos por las gracias concedidas.


“Intimidad Divina”

Los sacramentos

La Iglesia, “Sacramento universal de salvación” (LG 48), por medio de la cual llegan a Dios los hombres, ha sido constituida por Cristo depositaria de los sacramentos mediante los cuales los fieles son hechos partícipes de la vida de Cristo mismo. Los sacramentos son al mismo tiempo obra de Cristo que es su autor y obra de la Iglesia que es su depositaria y administradora. Hay en ellos una doble causa: invisible una, que es la acción de Cristo, el cual “está presente con su virtud en los sacramentos, de modo que cuando alguien bautiza, es Cristo quien bautiza” (SC 7); y la otra visible, que es la acción externa con que la Iglesia, mediante el sacerdote, administra el sacramento cumpliendo el rito. La acción de Cristo es el elemento esencial, sin el cual los sacramentos no podrían producir ni comunicar la gracia… Mas también es indispensable la acción de la Iglesia, ya que Jesús ha querido condicionar a los sacramentos su intervención en la vida del hombre, de modo que su administración le dé certeza al hombre de la acción invisible de Cristo. Esto demuestra la profunda e inseparable unión que hay entre Jesús y su Iglesia: él quiere servirse de la acción externa de ella para la santificación de los hombres, pero se reserva el poder de dar la vida y hacer eficaz esa acción.

Al llamar al hombre a la salvación, ha querido Dios, con bondad y comprensión inefables, respetar su estructura. El hombre no es puro espíritu; necesita de signos visibles y tangibles que signifiquen las realidades divinas inasequibles a los sentidos. En este aspecto Cristo es un verdadero sacramento de Dios, signo maravilloso e infinito de su amor a los hombres; la Iglesia es sacramento de Cristo, al cual hace presente y operante todavía en el mundo; y los sacramentos son el último anillo de esa sacramentalidad que caracteriza al misterio de las relaciones del hombre con Dios. A esta luz han de ser considerados los sacramentos, como formando parte integrante del plan universal de salvación, en su papel de elementos vivos y vivificadores, vehículos de la acción de Dios y signos eficaces de la gracia, que se comunica a los hombres por virtud de Cristo, mediante el ministerio de la Iglesia.

Según la providencia ordinaria, por disposición de Dios, el misterio de la redención llega al hombre y se realiza para él a través de los sacramentos, los cuales reciben su eficacia del misterio pascual de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo (SC 61), cuyos méritos infinitos aplican a todo cristiano. Cuando el fiel recibe un sacramento, no sólo es liberado del pecado y santificado por la gracia, sino que lo es en Cristo, como inmerso en su misterio, renovado en su vida, unido “a Cristo paciente y glorioso… de un modo arcano, pero real” (LG 7). Los sacramentos no pueden ser considerados como prácticas de piedad; son actos vitales que ponen a los creyentes en relación vital con Cristo: muertos con él y con él vivificados (2 Tim 2, 11).

¡Oh dulcísimo buen Jesús! ¡Oh Padre de las luces, de quien procede toda dádiva buena y todo don perfecto! Mira con ojos de misericordia a los que humildes te confesamos, a nosotros que verdaderamente sabemos que nada podemos hacer sin ti. Tú, que te diste en precio de nuestro rescate, haz que aunque menos dignos de tanto precio, nos rindamos a tu gracia íntegramente, perfectamente y en todo; y así, conformados a la imagen de tu pasión, recobremos también aquella que perdimos pecando, la imagen de tu Divinidad, con la ayuda de nuestro Señor. Amén. (San Buenaventura, La vid mística).

P. Gabriel de Sta. M. Magdalena O.C.D.
Jardinero de Dios
-el más pequeñito de todos-
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