domingo, 31 de enero de 2010

Pequeñas Semillitas 0980

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0980 ~ Domingo 31 de Enero de 2010
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)


Hola !!!
El mensaje de Jesús, de vida, amor, verdad, alegría, libertad, paz, no está destinado a una raza o una nación. Es universalista. Rompe fronteras. Nos abre a todos su proyecto de liberación para las personas empobrecidas, excluidas, perdedoras...Y nos anima a anunciar buenas noticias, creerlas, practicarlas, hacerlas realidad, vivirlas, regalarlas...
El evangelio no es ajeno a ninguna situación del ser humano. En todas las situaciones es, tiene que ser, buena noticia. De nosotros depende que lo sea.


La Palabra de Dios:
Evangelio del día


En aquel tiempo, Jesús comenzó a decir en la sinagoga: «Esta Escritura, que acabáis de oír, se ha cumplido hoy». Y todos daban testimonio de Él y estaban admirados de las palabras llenas de gracia que salían de su boca. Y decían: «¿No es éste el hijo de José?». Él les dijo: «Seguramente me vais a decir el refrán: ‘Médico, cúrate a ti mismo’. Todo lo que hemos oído que ha sucedido en Cafarnaúm, hazlo también aquí en tu patria». Y añadió: «En verdad os digo que ningún profeta es bien recibido en su patria. Os digo de verdad: Muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando se cerró el cielo por tres años y seis meses, y hubo gran hambre en todo el país; y a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda de Sarepta de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, y ninguno de ellos fue purificado sino Naamán, el sirio».
Oyendo estas cosas, todos los de la sinagoga se llenaron de ira; y, levantándose, le arrojaron fuera de la ciudad, y le llevaron a una altura escarpada del monte sobre el cual estaba edificada su ciudad, para despeñarle. Pero Él, pasando por medio de ellos, se marchó.
(Lucas 4, 21-30)

Comentario
Hoy, en este domingo cuarto del tiempo ordinario, la liturgia continúa presentándonos a Jesús hablando en la sinagoga de Nazaret. Empalma con el Evangelio del domingo pasado, en el que Jesús leía en la sinagoga la profecía de Isaías: «El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos (...)» (Lc 4,18-19). Jesús, al acabar la lectura, afirma sin tapujos que esta profecía se cumple en Él.
El Evangelio comenta que los de Nazaret se extrañaban de que de sus labios salieran aquellas palabras de gracia. El hecho de que Jesús fuese bien conocido por los nazarenos, ya que había sido su vecino durante la infancia y juventud, no facilitaba su predisposición para aceptar que era un profeta. Recordemos la frase de Natanael: «¿De Nazaret puede salir algo bueno?» (Jn 1,46). Jesús les reprocha su incredulidad, recordando aquello: «Ningún profeta es bien recibido en su patria» (Lc 4,24). Y les pone el ejemplo de Elías y de Eliseo, que hicieron milagros para los forasteros, pero no para los conciudadanos.
Por lo demás, la reacción de los nazarenos fue violenta. Querían despeñarlo. ¡Cuántas veces pensamos que Dios tiene que realizar sus acciones salvadoras acoplándose a nuestros grandilocuentes criterios! Nos ofende que se valga de lo que nosotros consideramos poca cosa. Quisiéramos un Dios espectacular. Pero esto es propio del tentador, desde el pináculo: «Si eres Hijo de Dios, tírate de aquí abajo» (Lc 4,9). Jesucristo se ha revelado como un Dios humilde: el Hijo del hombre «no ha venido a ser servido, sino a servir» (Mc 10,45). Imitémosle. No es necesario, para salvar a las almas, ser grande como san Javier. La humilde Teresa del Niño Jesús es su compañera, como patrona de las misiones.
P. Pere SUÑER i Puig SJ (Barcelona, España)


Santoral Católico
San Juan Bosco, Fundador de los Salesianos


A los dieciséis años, ingresó en el seminario de Chieri y era tan pobre, que debía mendigar para reunir el dinero y los vestidos indispensables. Después de haber recibido el diaconado, Juan Bosco pasó al seminario mayor de Turín y ahí empezó, con la aprobación de sus superiores, a reunir todos los domingos a un grupo de chiquillos abandonados de la ciudad en una especie de escuela y lugar de recreo al que llamó "Oratorio Festivo".

El primer puesto que ocupó Don Bosco fue el de capellán auxiliar en una casa de refugio para muchachas, que había fundado la marquesa di Barola.

Tiempo después, acabó una escuela nocturna, y como el oratorio estaba lleno, abrió otros dos centros en otros tantos barrios de Turín. Por la misma época, empezó a dar alojamiento a los niños abandonados. Al poco tiempo, había ya cuarenta chicos, la mayoría aprendices, que vivían con Don Bosco y su madre en el barrio de Valdocco. Cayó pronto en la cuenta que todo el bien que hacía por sus chicos, se perdía con las malas influencias del exterior, y decidió construir sus propios talleres de aprendizaje. Los dos primeros fueron inaugurados en 1853. En 1856, había ya 150 internos, cuatro talleres, una imprenta, cuatro clases de latín y diez sacerdotes. Los externos eran 500. En diciembre de 1859, Don Bosco y sus 22 compañeros decidieron finalmente organizar la congregación, cuyas reglas habían sido aprobadas por Pío IX. Pero la aprobación definitiva no llegó sino hasta 15 años después. La orden creció rápidamente: en 1863 habían 39 salesianos, a la muerte del fundador eran ya 768. El siguiente paso de Don Bosco fue la fundación de una congregación femenina. La congregación quedó inaugurada en 1872, con la toma del hábito de 27 jóvenes a las que el santo llamó Hijas de Nuestra Señora, Auxilio de los Cristianos.

Don Bosco realizó uno de sus sueños al enviar sus primeros misioneros a la Patagonia. Poco a poco los salesianos se extendieron por toda América del Sur. Tenían 36 casas en el Nuevo Mundo y 38 en Europa.

Las instituciones salesianas en la actualidad comprenden escuelas primaria y segunda enseñanza, seminarios, escuelas para adultos, escuelas técnicas y de agricultura, talleres de imprenta y librería, hospitales, etc. sin omitir las misiones y el trabajo pastoral.

Don Bosco murió el 31 de enero de 1888. Su canonización tuvo lugar en 1934.


Palabras de Juan Pablo II


"Son muchas en nuestro tiempo las necesidades que interpelan a la sensibilidad cristiana. Es la hora de una nueva imaginación de la caridad, que se despliegue no sólo en la eficacia de las ayudas prestadas, sino también en la capacidad de hacernos cercanos y solidarios con el que sufre"


Tema del día:
Predicar con Jesús


Hoy comienza el evangelio con la frase con la que terminaba el domingo anterior. Jesús ha ido a la sinagoga de Nazaret y comenta unas palabras que ha leído del profeta Isaías. El profeta hablaba de las maravillas que Dios haría en los tiempos mesiánicos con los enfermos, predicándose la bondad de Dios a los pobres. Jesús comenta: “Hoy se están realizando estas maravillas”. Seguramente que hablaría bastante de esto último: sobre la bondad de Dios que se derrama sobre todos, pero muy especialmente con los pobres y oprimidos. El era un instrumento de Dios.

El Evangelio de hoy es para contarnos la reacción de la gente a las palabras de Jesús. Parece que al principio hay una buena reacción de la mayoría admirados por las palabras de Jesús, llenas de gracia. Pero poco a poco viene la extrañeza, la envidia de algunos que no soportan que uno de los suyos les venga a dar lecciones, sobre todo cuando Jesús llegase a las conclusiones: de que todos debemos ser imitadores de la bondad de Dios, y especialmente en un sentido universalista. A la envidia siguió el odio y al odio las acciones violentas. La gente, como suele suceder muchas veces, como sucedería el Viernes Santo, sigue a los principales del pueblo en la violencia.

Dicen algunos que quizá san Lucas resume diversas visitas de Jesús a Nazaret. En una le admirarían entusiasmados, pero en otra dominarían los envidiosos hasta llegar a querer matar a Jesús. Otros dicen que no hubo un cambio tan grande de sentimientos, sino que, cuando dice el evangelista que “se admiraron” era en sentido peyorativo: es decir que se extrañaron, con cierto estupor, de que un paisano suyo, sin instrucción, hijo de José, que había sido un hombre sencillo, ahora no sólo interpretase a Isaías, sino que se tomase la libertad de cambiar en algo el mensaje. Esto es porque Jesús no leyó todo lo que el profeta decía, que añadía: “proclamar el desquite de nuestro Dios”. Estas últimas palabras acentuaban un sentimiento nacionalista e incitaban a los violentos a vengarse de los enemigos y de los extranjeros. Jesús conscientemente no habló de este sentimiento, sino que acentuó más la misericordia de Dios.

Como Jesús se vio atacado, se defendió acentuando la misericordia de Dios con algunos extranjeros, como aparecía en el Antiguo Testamento. Así recordó la misericordia de Dios con una mujer libanesa y un general sirio. Este recuerdo hoy mismo en Israel sería como una bomba. Es lo que pasó con aquellos nazaretanos que, como la mayoría de los galileos, eran muy nacionalistas y fanáticos de su Dios, como si sólo fuese bueno para ellos y fuese extraño y hostil para los extranjeros. Al anunciar este año de gracia de parte de Dios para todos, los nazaretanos creían que Jesús fuese un traidor.

Esta frase: “¿No es éste hijo de José?”, es como una excusa para no seguir las palabras de Jesús. Nosotros también ponemos excusas a Dios, cuando nos habla por medio del papa y de algún buen predicador. Ponemos excusas pensando que es una persona como nosotros. Las buscamos con tal de no seguir la bondad del Señor.

También hoy se nos propone a Jesucristo como modelo a seguir. Dios quiere hablar a través de nosotros. Nos escoge para que seamos profetas, dando testimonio de la bondad de Dios con nuestras obras y a veces con nuestras palabras. Pero nos da miedo, nos dan ganas de dimitir para no complicarnos la vida. Esto le pasó al profeta Jeremías. Hoy leemos en la 1ª lectura cómo Dios le manda ir a predicar y le tiene que dar ánimo, como si tuviera que ir a una batalla. En realidad para predicar el Reino de Dios en este mundo, donde domina la comodidad, se necesita ser valientes.

También Jesús tuvo que ser valiente. No busca halagar a nadie, sino que descubre las actitudes falsas, como tantas veces lo haría con los fariseos. Aquellos nazaretanos creían conocer a Jesús y cerraron su corazón a la palabra de Dios. Nosotros a veces cerramos nuestro corazón, porque nos dejamos llevar por prejuicios. Dios no tiene acepción de personas, sino que acepta al que hace el bien, sea de donde sea.


Meditación breve


Estamos en tiempos decisivos para la humanidad, y por eso tenemos que dar nuestro sí a Dios, para que ordene toda nuestra vida según su querer y providencia, para que seamos dóciles instrumentos en sus manos, con los que Él pueda intervenir en la historia y salvar almas.
No pensemos en el futuro, sino vivamos con confianza el momento presente. Si pensamos en el futuro, pensemos en el Cielo que nos espera, en el lugar que Jesús nos está preparando junto al Padre, y que lo alcanzaremos si somos fieles a la voluntad de Dios en la tierra. Porque el sufrimiento de la tierra nos prepara un lugar glorioso en el Paraíso.
Ha llegado el momento en que todo cristiano debe ser un héroe y un santo, porque los tiempos son muy malos y la batalla entre Dios y el demonio está alcanzando el punto más crítico. Por eso no dejemos por nada la oración, especialmente el Santo Rosario, y lancémonos al combate confiando plenamente en Dios y en María y tomados de sus manos, porque solo el que persevere hasta el fin, se salvará. Los demás serán pasto para el infierno.


Nunca nos olvidemos de agradecer


Alguna vez leí que en el cielo hay dos oficinas diferentes para tratar lo relativo a las oraciones de las personas en la tierra:
Una es para receptar pedidos de diversas gracias, y allí los muchos ángeles que atienden trabajan intensamente y sin descanso por la cantidad de peticiones que llegan en todo momento.
La otra oficina es para recibir los agradecimientos por las gracias concedidas y en ella hay un par de ángeles aburridos porque prácticamente no les llega ningún mensaje de los hombres desde la tierra para dar gracias...
Desde esta sección de "Pequeñas Semillitas" pretendemos juntar una vez por semana los mensajes para la segunda oficina: agradecimientos por favores y gracias concedidas como respuesta a nuestros pedidos de oración.


Nuestra amiga Elsa, de la provincia de Buenos Aires, Argentina, agradece a Dios y a todos quienes rezaron por su hija María de los Ángeles, cuyos análisis han salido bien. Damos gracias al cielo.


Raquel L. L. de Santa Fe, Argentina, expresa su agradecimiento al Señor porque ha participado de un retiro espiritual muy lleno de furtos y porque su hija Melisa (que no es una niña) ha tomado la Primera Comunión. Nos unimos en su acción de gracias.


Desde México, Mercedes G. agradece a la Santísima Virgen, a su Hijo Jesús, y a todos los que rezaron por ella, pues su operación de vejiga de hace diez días salió muy bien.


Nuevos videos y artículos


Hay nuevos videos subidos a este blog.
Te recuerdo que para verlos tienes que ir a la parte final de la página.


Hay nuevo material publicado en el blog "Juan Pablo II inolvidable"
Puedes acceder en la dirección:
http://juanpabloinolvidable.blogspot.com/


Ven Espíritu Santo...!


Asístenos Señor con el don de la fortaleza del Espíritu Santo, que purifique benignamente nuestros corazones, y los preserve de toda maldad. Por nuestro Señor Jesucristo. Así sea
P. Florentín Brusa cmf


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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