PEQUEÑAS
SEMILLITAS
Año
13 - Número 3640 ~ Martes 24 de Abril de 2018
Desde
la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
Todo
irá bien contigo a partir de ahora. No importa cuánto se esfuercen tus
enemigos… no tendrán éxito.
Tú
has sido destinado para alejarlos y lograrás todos tus objetivos.
Para
los meses que quedan del año se disiparán todas tus agonías y llegarán la
victoria y prosperidad en abundancia.
Hoy
día Dios ha confirmado el fin de tus pesares y dolores porque Él, que reina, te
ha recordado.
Te
ha quitado las penurias y te ha dado alegría. Él nunca te decepcionará.
Esta
mañana llamé a la puerta del cielo y Dios me preguntó.... ¿qué puedo hacer por
ti?
Y
le respondí: Padre, por favor protege y bendice a la persona que esté leyendo
este mensaje.
Dios
sonrió y contestó: ¡Petición concedida!
¡Buenos días!
Camino del gozo
Con
frecuencia Dios, por sus profetas, invitó a Israel a revisar su estilo de vida
para hacer los necesarios reajustes que exigía la alianza solemnemente pactada.
La Reina de la Paz te invita hoy a cambiar para bien, y te motiva dulcemente a
dar pasos de crecimiento espiritual. Ábrete a su mensaje y aprovecha su fuerza
renovadora.
“¡Queridos hijos! Hoy deseo envolverlos con mi manto
y conducirlos a todos hacia el camino de la conversión. Queridos hijos, les
ruego, entreguen al Señor todo su pasado, todo el mal que se ha acumulado en
sus corazones. Yo deseo que cada uno de ustedes sea feliz, pero con el pecado
nadie puede serlo. Por tanto, queridos hijos, oren y en la oración, ustedes
conocerán el nuevo camino del gozo. El gozo se manifestará en sus corazones y
así podrán ser testigos gozosos de lo que yo y mi Hijo deseamos de cada uno de
ustedes. Yo los bendigo. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!”
El
sacramento de la reconciliación o confesión es una excelente respuesta al
llamado a la conversión que nos hace hoy la Virgen María. Te animo a acercarte
a este sacramento, pues tranquiliza la conciencia, te da consuelo espiritual,
ayuda a conocerse más a si mismo, y es fuente de gracia para superar la fuerza
del mal y del pecado que existe en nosotros.
* Enviado por el P. Natalio
La Palabra de Dios:
Evangelio de hoy
Texto del Evangelio:
Se
celebró por entonces en Jerusalén la fiesta de la Dedicación. Era invierno.
Jesús se paseaba por el Templo, en el pórtico de Salomón. Le rodearon los
judíos, y le decían: «¿Hasta cuándo vas a tenernos en vilo? Si tú eres el
Cristo, dínoslo abiertamente». Jesús les respondió: «Ya os lo he dicho, pero no
me creéis. Las obras que hago en nombre de mi Padre son las que dan testimonio
de mí; pero vosotros no creéis porque no sois de mis ovejas. Mis ovejas
escuchan mi voz; yo las conozco y ellas me siguen. Yo les doy vida eterna y no
perecerán jamás, y nadie las arrebatará de mi mano. El Padre, que me las ha
dado, es más grande que todos, y nadie puede arrebatar nada de la mano del
Padre. Yo y el Padre somos uno». (Jn 10,22-30)
Comentario:
Hoy
vemos a Jesús que se «paseaba por el Templo, en el pórtico de Salomón» (Jn
10,23), durante la fiesta de la Dedicación en Jerusalén. Entonces, los judíos
le piden: «Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente», y Jesús les contesta:
«Ya os lo he dicho, pero no me creéis» (Jn 10,24.25).
Sólo
la fe capacita al hombre para reconocer a Jesucristo como el Hijo de Dios. San
Juan Pablo II hablaba en el año 2000, en el encuentro con los jóvenes en Tor
Vergata, del “laboratorio de la fe”. Para la pregunta «¿Quién dicen las gentes
que soy yo?» (Lc 9,18) hay muchas respuestas... Pero, Jesús pasa después al
plano personal: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?». Para contestar
correctamente a esta pregunta es necesaria la “revelación del Padre”. Para
responder como Pedro —«Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios vivo» (Mt 16,16)—
hace falta la gracia de Dios.
Pero,
aunque Dios quiere que todo el mundo crea y se salve, sólo los hombres humildes
están capacitados para acoger este don. «Con los humildes está la sabiduría»,
se lee en el libro de los Proverbios (11,2). La verdadera sabiduría del hombre
consiste en fiarse de Dios.
Santo
Tomás de Aquino comenta este pasaje del Evangelio diciendo: «Puedo ver gracias
a la luz del sol, pero si cierro los ojos, no veo; pero esto no es por culpa
del sol, sino por culpa mía».
Jesús
les dice que si no creen, al menos crean por las obras que hace, que
manifiestan el poder de Dios: «Las obras que hago en nombre de mi Padre son las
que dan testimonio de mí» (Jn 10,25).
Jesús
conoce a sus ovejas y sus ovejas escuchan su voz. La fe lleva al trato con
Jesús en la oración. ¿Qué es la oración, sino el trato con Jesucristo, que
sabemos que nos ama y nos lleva al Padre? El resultado y premio de esta
intimidad con Jesús en esta vida, es la vida eterna, como hemos leído en el
Evangelio.
Rev. D. Miquel MASATS i Roca (Girona, España)
Santoral Católico:
San Fidel de Sigmaringa
Sacerdote y Mártir
Nació
en Sigmaringa (Suabia, Alemania) el año 1578, en tiempos agitados por la
Reforma protestante. Fue un joven de vida intachable, que estudió filosofía y
derecho en Friburgo de Brisgovia con excelentes resultados. Ejerció luego la
abogacía con tal amor a la justicia y a los más indefensos, que le dieron el
sobrenombre de «abogado de los pobres». En 1612 recibió la ordenación
sacerdotal y poco después ingresó en los capuchinos. Fue un predicador
incansable entre los católicos y los hermanos separados en los diversos cantones
de Suiza y Suabia. Por su gran actividad misionera, la Congregación de la
Propagación de la Fe, recién creada, le encargó fortalecer la fe católica en
Suiza. Los herejes se conjuraron para acabar con su vida y lo asesinaron el 24
de abril de 1622 en Seewis (Suiza), donde lo habían invitado a predicar. Lo canonizó
Benedicto XIV en 1746.
Oración: Señor Dios, que te has dignado conceder la
palma del martirio a san Fidel de Sigmaringa cuando, abrasado en tu amor, se
entregaba a la propagación de la fe, concédenos, te rogamos, que arraigados,
como él, en el amor, lleguemos a conocer el poder de la resurrección de
Jesucristo. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
© Directorio Franciscano - Aciprensa
Pensamiento del día
La pobreza no es un fenómeno natural.
La causan los seres humanos
y puede ser superada y erradicada
gracias a la actuación de esos mismos seres humanos.
Acabar con la pobreza no es un gesto de caridad; es un
acto de justicia.
Es proteger un derecho humano fundamental,
el derecho a la dignidad y a una vida decente.
Mientras siga habiendo pobreza,
no habrá verdadera libertad.
(Nelson Mandela)
Tema del día:
¿Son mejores los que van a Misa?
—Pero
hay quienes se presentan como católicos, van a Misa..., pero luego resulta que
no son buenas personas...
Está
claro que el hecho de que una persona vaya a Misa no es un seguro a todo riesgo
para su honestidad. Siempre será una ayuda para lograrlo, pero no una garantía.
Y el hecho de que unas personas poco ejemplares vayan a Misa no resta valor a
la Misa ni a la fe católica.
—Pero
sería mejor para la fe católica que esas personas poco ejemplares no hicieran
manifestaciones de religiosidad.
Quizá
fuera un buen marketing para la Iglesia -aunque lo dudo-, pero Jesucristo dijo
que no necesitan de médico los sanos sino los enfermos. La Iglesia debe acoger
maternalmente a sus hijos, tanto si son grandes santos como si son grandes
pecadores. Los católicos no presumen -al menos, no deberían hacerlo, y creo que
pocos lo hacen- de ser una élite de la santidad o un modelo de virtud.
Simplemente, se esfuerzan por mejorar.
Y
ya que has mencionado lo de la asistencia a Misa, recuerdo que un viejo amigo
me decía que siempre le había llamado la atención encontrar tanta gente
necesitada pidiendo limosna a la puerta de las iglesias, y que, en cambio, se
vieran tan pocos mendigos o personas en paro a la puerta de los casinos, los bingos,
las salas de fiestas o los bancos, cuando probablemente por esos sitios pase
mucha más gente y de más dinero. Y tampoco se ven apenas pobres a las puertas
de los sindicatos o de los organismos políticos, pese a que en esos lugares
debieran esperarse en principio más fáciles muestras de solidaridad. Y como es
de suponer que esos hombres son quizá pobres pero no idiotas, cabe pensar que
actúan así porque ellos sí que creen que la gente que va a Misa es, en general,
más generosa que la media.
En
cualquier caso, sabemos bien que para salvarse no basta con pertenecer a la
religión verdadera, ni con ir a Misa cada domingo. Y también está claro que de
religiones muy diversas puede recibirse aliento y enseñanza para ser mejores y
alcanzar la salvación, con la ayuda de Dios.
© Alfonso Aguiló
Meditaciones de “Pequeñas Semillitas”
Cuando
ames, ama de todo corazón, y nunca tengas miedo de mostrar tu amor.
Que
tu amor sea como un libro abierto, legible para todas las almas.
Es
lo más maravilloso del mundo, por eso deja que ese amor divino fluya en ti
libremente.
El
amor no es ciego, pero ve lo mejor en el amado, y de ese modo hace que salga lo
mejor.
Nunca
escojas o selecciones a quienes vas a amar. Simplemente mantén abierto tu
corazón y que el amor fluya a todas las almas por igual. Hacer eso es amar con
Mi amor divino. El amor nunca debe abrirse y cerrarse como un grifo. El amor
nunca es posesivo, jamás exclusivo. Cuanto más deseas compartirlo, más crece.
Aférrate
a él y lo perderás. Suéltalo, y volverá a ti multiplicado y se convertirá en un
gozo y en una bendición para todos aquellos que lo comparten.
Eileen Caddy
Pedidos de oración
Pedimos
oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa
Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas,
catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la
unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro
Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones; por el
triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María; por la conversión de todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por los
cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros
lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente
por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo,
el hambre y la pobreza; por los pacientes internados en la Casa de la Bondad
en Córdoba (Argentina); por los niños
con cáncer y otras enfermedades graves; por el drama de los refugiados del
Mediterráneo; por los presos políticos y la falta de libertad en muchos países
del mundo; por las víctimas de catástrofes naturales; por la unión de las
familias, la fidelidad de los matrimonios y por más inclinación de los jóvenes
hacia este sacramento; por el aumento de las vocaciones sacerdotales y
religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio.
Pedimos oración por el eterno
descanso del alma de Maximiliano, de
Buenos Aires, Argentina, que a los 39 años de edad ha sido llamado a la
presencia del Padre celestial.
Pedimos oración para que el Señor ayude a Rosana F. H., joven nutricionista que vive en Córdoba, Argentina, a conseguir trabajo en su profesión.
Pedimos oración para que el Señor ayude a Rosana F. H., joven nutricionista que vive en Córdoba, Argentina, a conseguir trabajo en su profesión.
Pedimos
oración para Hugo G., de Córdoba,
Argentina, de 67 años de edad, internado en terapia intensiva por pancreatitis
y en muy grave condición, por lo que rogamos a Jesús, Buen Pastor, que lo
rescate de la situación de enfermedad y le conceda la inmensa gracia de
recuperar su salud.
Pedimos
oración para Carla, de 23 años, de
la provincia de Córdoba, Argentina, para que por la gracia del Espíritu Santo
quede liberada de influencias y fuerzas malignas que la asechan.
Pedimos oración para María Luisa R. de S., de Gto., México,
que tiene hemorragia gástrica y está muy grave, confiándola a la misericordia
infinita de Dios. También por la salud y el bienestar de Grace y René R. A.
Continuamos
unidos en oración por medio del rezo del Santo Rosario poniendo en Manos de
Nuestra Madre Bendita todas nuestras preocupaciones, alegrías y necesidades,
poniendo al mundo entero en Manos de nuestra Madre y pidiéndole a Ella paz para
el mundo. Al rezar por la paz, rezamos por todo, por la paz en el mundo, en los
corazones, porque la violencia sea desterrada, por la paz para los niños que
están en peligro de ser abortados. Paz para los jóvenes que no encuentran el camino,
paz para los deprimidos. Paz para los que no han tenido la dicha de conocer al
Amor. En fin rezamos por la paz, y sigamos haciéndolo.
Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras
debilidades,
para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y
la paciencia;
escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros
hermanos enfermos
y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la
aflicción o la enfermedad,
la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu
hijo ha llamado dichosos,
y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la
redención del mundo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén
Cinco minutos del Espíritu Santo
Abril 24
Quisiéramos
vivir con más profundidad, ser personas más espirituales, realmente
transformados por el Espíritu Santo. Pero no vemos grandes cambios en nuestra
vida.
Si
nos miramos a nosotros mismos con sinceridad podremos descubrir que en nuestro
interior no está la profundidad que deseamos. Allí también hay límites e
incoherencias. Posiblemente encontremos mucho egoísmo allí adentro, y lo que
llamamos "amor al prójimo" quizás sea sólo una necesidad de
satisfacciones afectivas, quizás sea sólo una forma de egoísmo, de estar
encerrados en nuestras propias necesidades y de buscar a los demás sólo para que
nos hagan sentir bien. Por eso parece que ese amor se acaba cuando los demás
contradicen nuestros proyectos, cuando no nos dan la razón, no nos elogian, o
no dicen lo que nos interesa escuchar. Entonces, la incoherencia y el vacío
también están dentro de nosotros mismos.
Por
eso, cuando buscamos la soledad y nos encontramos con nosotros mismos a veces
sólo estamos escarbando en el vacío. Porque nuestra interioridad sólo tiene
vida y hermosura si allí está presente el Espíritu Santo, y si nos dejamos
cambiar por él.
Sin
esa luz del Espíritu Santo, terminamos confundiendo a Dios con nuestros
pensamientos, con nuestra confusión mental, con nuestros sentimientos tan
cambiantes. Y Dios es mucho más que todo eso, mucho más.
Si
queremos ser verdaderamente profundos, busquemos al Espíritu Santo.
* Mons. Víctor Manuel Fernández
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el
más pequeñito de todos)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.