PEQUEÑAS
SEMILLITAS
Año
12 - Número 3373 ~ Jueves 29 de Junio de 2017
Desde
la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
Hoy,
29 de junio, junto con la solemnidad de San Pedro y San Pablo, celebramos el Día del Papa, el Vicario de Cristo.
En
esta Jornada del Papa estamos invitados, de manera especial, a meditar en el
ministerio del Sucesor de Pedro, el Papa, a orar por él y a contribuir con
nuestras limosnas y donativos a su misión evangelizadora y de caridad.
El Papa, obispo de Roma y sucesor de
san Pedro, "es el principio y fundamento perpetuo y visible de unidad,
tanto de los obispos como de la muchedumbre de los fieles. El Pontífice Romano,
en efecto, tiene en la Iglesia, en virtud de su función de Vicario de Cristo y
Pastor de toda la Iglesia, la potestad plena, suprema y universal, que puede
ejercer siempre con entera libertad". (CIC 881-882).
¡Buenos días!
El león y el labrador
La
prudencia es una virtud cardinal que ayuda en la vida práctica a decidirte por
tu verdadero bien y a elegir los medios rectos para conseguirlo. Ella, como
experto auriga que maneja las riendas de un carruaje, conduce a las otras
virtudes señalándoles la regla y la medida adecuadas. Eres prudente cuando
aplicas sin error los principios morales a cada caso particular.
Entró un león en el corral de un labrador, y éste,
queriendo apresarlo, cerró la puerta. El león, al ver que no podía salir,
empezó a devorar primero a los carneros, y luego a los bueyes. Entonces el
labrador, temiendo por su propia vida, abrió la puerta. Se fue el león, y la
esposa del labrador, al oírlo quejarse le dijo: Tienes lo que buscaste, pues
¿por qué has tratado de encerrar a una fiera que más bien debías de mantener
alejada? (Esopo)
“El
hombre prudente medita sus pasos” (Biblia). Otros refranes que iluminan esta
virtud: “El que busca el peligro en él perecerá”; “Tanto va el cántaro a la
fuente que al fin se rompe”. “Dime con quién andas y te diré quién eres”. “La
ocasión hace al ladrón”. “El que a buen árbol se arrima, buena sombra lo
cobija”. “Más vale prevenir que curar”. Que la prudencia ilumine siempre tus
decisiones.
* Enviado por el P. Natalio
La Palabra de Dios:
Evangelio de hoy
Texto del Evangelio:
En
aquel tiempo, llegado Jesús a la región de Cesarea de Filipo, hizo esta
pregunta a sus discípulos: «¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del
hombre?». Ellos dijeron: «Unos, que Juan el Bautista; otros, que Elías, otros,
que Jeremías o uno de los profetas». Díceles Él: «Y vosotros ¿quién decís que
soy yo?». Simón Pedro contestó: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo».
Replicando Jesús le dijo: «Bienaventurado eres Simón, hijo de Jonás, porque no
te ha revelado esto la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los
cielos. Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré
mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. A ti te daré
las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en
los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos». (Mt 16,13-19)
Comentario:
Hoy
celebramos la solemnidad de San Pedro y San Pablo, los cuales fueron
fundamentos de la Iglesia primitiva y, por tanto, de nuestra fe cristiana.
Apóstoles del Señor, testigos de la primera hora, vivieron aquellos momentos
iniciales de expansión de la Iglesia y sellaron con su sangre la fidelidad a
Jesús. Ojalá que nosotros, cristianos del siglo XXI, sepamos ser testigos
creíbles del amor de Dios en medio de los hombres tal como lo fueron los dos
Apóstoles y como lo han sido tantos y tantos de nuestros conciudadanos.
En
una de las primeras intervenciones del Papa Francisco, dirigiéndose a los
cardenales, les dijo que hemos de «caminar, edificar y confesar». Es decir,
hemos de avanzar en nuestro camino de la vida, edificando a la Iglesia y
confesando al Señor. El Papa advirtió: «Podemos caminar tanto como queramos,
podemos edificar muchas cosas, pero si no confesamos a Jesucristo, alguna cosa
no funciona. Acabaremos siendo una ONG asistencial, pero no la Iglesia, esposa
del Señor».
Hemos
escuchado en el Evangelio de la misa un hecho central para la vida de Pedro y
de la Iglesia. Jesús pide a aquel pescador de Galilea un acto de fe en su condición
divina y Pedro no duda en afirmar: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo»
(Mt 16,16). Inmediatamente, Jesús instituye el Primado, diciendo a Pedro que
será la roca firme sobre la cual se edificará la Iglesia a lo largo de los
tiempos (cf. Mt 16,18) y dándole el poder de las llaves, la potestad suprema.
Aunque
Pedro y sus sucesores están asistidos por la fuerza del Espíritu Santo,
necesitan igualmente de nuestra oración, porque la misión que tienen es de gran
trascendencia para la vida de la Iglesia: han de ser fundamento seguro para
todos los cristianos a lo largo de los tiempos; por tanto, cada día nosotros
hemos de rezar también por el Santo Padre, por su persona y por sus
intenciones.
Mons. Jaume PUJOL i Balcells Arzobispo de Tarragona y
Primado de Cataluña (Tarragona, España)
Santoral Católico:
San Pedro y San Pablo
Apóstoles y Mártires
Cada
29 de junio, en la solemnidad de San Pedro y San Pablo, apóstoles, recordamos a
estos grandes testigos de Jesucristo y, a la vez, hacemos una solemne confesión
de fe en la Iglesia una, santa, católica y apostólica. San Pedro y San Pablo
son apóstoles, testigos de Jesús que dieron un gran testimonio. Se dice que son
las dos columnas del edificio de la fe cristiana. Dieron su vida por Jesús y
gracias a ellos el cristianismo se extendió por todo el mundo. El sentido de tener una fiesta es recordar lo
que estos dos grandes santos hicieron, aprender de su ejemplo y pedirles en
este día especialmente su intercesión por nosotros.
San Pedro,
Príncipe de los Apóstoles, es Simón, a quien Jesús cambió el nombre por el de
«Cefas» o Pedro. Era de Betsaida, aldea marinera situada a la ribera del mar de
Galilea, donde ejercía el oficio de pescador junto con su padre y su hermano
Andrés, también apóstol. Fue éste quien lo llevó a Jesús, el cual les dijo:
«Venid conmigo, y os haré pescadores de hombres». Estaba casado y tenía un
carácter noble, franco y vehemente, como puso de manifiesto en repetidas
ocasiones. Estando por Cesarea de Filipo, a preguntas de Jesús, Pedro le
respondió: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo», y el Maestro le prometió
entonces el Primado: «Sobre esta piedra edificaré mi Iglesia». Pedro, en la
noche más negra de la historia, negó por tres veces a Jesús; pero enseguida
lloró su pecado, volvió al grupo y corrió la mañana de la Resurrección al
sepulcro de Cristo, quien, cuando se les apareció más tarde en Galilea, le
otorgó el Primado: «Apacienta mis ovejas». Después de Pentecostés, ejerció su
apostolado en Jerusalén, Antioquía de Siria y luego en Roma como primer obispo
de la misma. Allí fue crucificado, cabeza abajo como los esclavos, durante la
persecución de Nerón, el año 64.- Oración:
Señor, Dios nuestro, tú que entregaste a
la Iglesia las primicias de tu obra de salvación, mediante el ministerio
apostólico de san Pedro y san Pablo, concédenos, por su intercesión y sus
méritos, los auxilios necesarios para nuestra salvación. Por Jesucristo,
nuestro Señor. Amén.
San Pablo,
Apóstol de los gentiles, nació en Tarso (Turquía) y estudió en la escuela de
Gamaliel en Jerusalén. Ferviente fariseo, presenció y aprobó el martirio de san
Esteban y, llevado de su celo por la ley mosaica, persiguió a los cristianos.
Convertido a Cristo en el camino de Damasco, hecho que celebramos el 25 de
enero, se retiró al desierto y más tarde visitó a los Apóstoles y se incorporó
a la comunidad cristiana. Con algunos compañeros recorrió, en tres largos
viajes, amplias regiones de Asia Menor y Europa Oriental fundando numerosas
comunidades cristianas. Su acción fue esencial para la extensión de la Iglesia
a todas las gentes, más allá del pueblo judío. Sus cartas a las iglesias
locales son alimento sustancial del que se nutre la Iglesia en todos los
tiempos. Acusado de traicionar la Tradición de sus mayores, los judíos lo entregaron
a la autoridad romana para acabar con él, pero Pablo, ciudadano romano, apeló
al César, y fue trasladado a Roma. Allí permaneció dos años evangelizando con
libertad, hasta que el año 67, durante la persecución de Nerón, fue decapitado
en la Vía Ostiense.- Oración: Señor, tú que nos llenas de santa alegría en
la celebración de la fiesta de san Pedro y san Pablo, haz que tu Iglesia se
mantenga siempre fiel a las enseñanzas de aquellos que fueron fundamento de
nuestra fe cristiana. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
© Directorio Franciscano
Palabras del Papa Francisco
El
primer paso que Dios realiza en nosotros, es un amor que se anticipa,
incondicional. Dios siempre ama el primero. Dios no nos ama porque en nosotros
hay motivos para ser amados. Dios nos ama porque Él mismo es amor, y el amor
por su propia naturaleza tiende a difundirse, a darse. Nosotros, ante los ojos
de Dios, somos siempre pequeños manantiales hechos para dejar brotar agua
buena. Lo dijo Jesús a la samaritana: “El
agua que yo te daré, se hará en ti una corriente de agua, de la que fluye la
vida eterna”. (Jn. 4,14). Nutridos por el Cuerpo de Cristo, nos
convertimos, cada vez más íntimamente y específicamente, en el Cuerpo místico
de Cristo.
Tema del día:
Semillas
Todo
se reduce a sembrar.
Guerra
o paz.
Libertad
o cadenas.
Comunión
o soledad.
Sembramos,
aun sin saberlo,
en
miradas, silencios,
opiniones,
gestos…
Plantamos,
a base de golpes o caricias,
semillas
que enraízan en otras tierras,
y
se riegan con el paso de los días,
con
memoria y nuevos encuentros.
Lo
sembrado germina, crece, se hace árbol,
y
sus frutos alimentan las ansias de otras gentes,
el
hambre de otras bocas,
el
latir de otros corazones.
Cada
fruto es distinto.
Está
el que aquieta y el que fustiga.
Está
el que sacia, o el que vacía,
el
que sosiega y el que desquicia.
Pero
todo empezó
con
la pequeñez de la semilla
que
un día sembramos,
aun
sin saberlo.
José María R. Olaizola SJ
Mes del Sagrado Corazón de Jesús
Día 29: El Santísimo Sacramento
Una
dulce palabra sale del sagrario: "Venid a mí todos los que estáis cansados
y agobiados, que yo os aliviaré". ¿Quién habla así? El Corazón de Dios. ¿A
quién habla? A la pobre criatura débil y enferma. ¿Para qué te llama? Para ser
tu fuerza, tu consuelo. Jesús se ha hecho víctima en la Misa. Desea que tú lo
recibas en la comunión. Quiere también ser visitado por ti, quiere hablar sólo
con tu corazón.
¿Cómo
practicas este deseo del Sagrado Corazón? ¿Vas cuando puedes a la iglesia a
adorarlo, a ofrecerte a Él, a tomar fuerza, a hacer la comunión espiritual? ¿Le
pides perdón por tus culpas pasadas, por los pecados de tu familia, de tus
parientes? ¿Lo reparas por tantas almas ingratas, por tantos pecadores
moribundos?
Del Web Católico de Javier
Pedidos de oración
Pedimos
oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes,
diáconos, seminaristas, catequistas y todos los que componemos el cuerpo
místico de Cristo; por la unión de los cristianos para que seamos uno, así como
Dios Padre y nuestro Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por
las misiones; por el triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado
Corazón de María; por la conversión de
todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por
los cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros
lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente
por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo,
el hambre y la pobreza; por los niños con cáncer y otras enfermedades graves; por
el drama de los refugiados del Mediterráneo; por los presos políticos y la
falta de libertad en muchos países del mundo; por las víctimas de catástrofes
naturales; por la unión de las familias, la fidelidad de los matrimonios y por
más inclinación de los jóvenes hacia este sacramento; por el aumento de las
vocaciones sacerdotales y religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio.
Pedimos
oración para el Padre Gregorio Zitzman,
que fue el primer párroco de la Comunidad de Santa María Goretti, en Buenos
Aires, Argentina. Hoy se celebran los sesenta años de su ordenación sacerdotal,
por lo que le damos inmensas gracias a Dios por todo el amor que este misionero
ha ido sembrando a su paso. Se iba a celebrar la Misa de Acción de Gracias, en
la Catedral de San Justo, ya que él pertenece a esa Diócesis en estos momentos,
pero fue internado con un problema pulmonar serio. Rogamos al Médico Divino y a
su Santísima Madre por su pronta recuperación.
Pedimos oración por las
siguientes personas de México: María
Teresa D., que tiene tres tumores cancerígenos; Pilar M., para que se recupere rápidamente sin necesidad de más
cirugías; y por la salud de los integrantes de la familia Rodríguez Tagle. Que la Virgen de Guadalupe interceda en favor de
todos ellos. Amén.
Continuamos
unidos en oración por medio del rezo del Santo Rosario poniendo en Manos de
Nuestra Madre Bendita todas nuestras preocupaciones, alegrías y necesidades,
poniendo al mundo entero en Manos de nuestra Madre y pidiéndole a Ella paz para
el mundo, al rezar por la paz; rezamos por todo, por la paz en el mundo, en los
corazones, porque la violencia sea desterrada, por la paz para los niños que
están en peligro de ser abortados. Paz
para los jóvenes que no encuentran el camino, paz para los deprimidos. Paz para
los que no han tenido la dicha de conocer al Amor. En fin rezamos por la paz, y
sigamos haciéndolo.
Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras
debilidades,
para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y
la paciencia;
escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros
hermanos enfermos
y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la
aflicción o la enfermedad,
la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu
hijo ha llamado dichosos,
y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la
redención del mundo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén
Los cinco minutos de María
Junio 29
La
Virgen tomó por guía en el camino de la santidad a Dios, que estaba con ella;
practicó lo que más tarde diría Jesús: “Sean perfectos como el Padre celestial”
Observaba
María lo que decía y hacía Jesús, lo meditaba en su Corazón y lo ponía en
práctica.
También
tú debes tener por guía a Jesús y a María; así alcanzarás la santidad. Imita a
María, pues imitarla a ella es imitar a Jesús.
Santa
María entra de lleno en el plan de la salvación, como predestinada a dar un
cuerpo humano al Redentor y a formarlo en nuestro corazón.
Virgen clemente, llévanos por la senda de la
santidad.
* P. Alfonso Milagro
Jardinero de Dios
-el
más pequeñito de todos-
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.