PEQUEÑAS
SEMILLITAS
Año
11 - Número 3190 ~ Sábado 19 de Noviembre de 2016
Desde
la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
Señor,
dueño del tiempo y de la historia, como Tú yo quiero ser fuego que purifica,
luz que ilumina en medio de las tinieblas, palabra que consuela en medio del
sufrimiento. Tú eres un Dios glorioso, lleno de vida y de esperanzas. Viniste
al mundo para donarte y realizar un sacrificio perfecto de amor universal. Nos
has salvado con tu sangre y preferiste la muerte en la cruz antes que renunciar
al amor. Cargaste una pesada cruz en donde fueron depositados los insultos,
golpes y humillaciones, una cruz que se transformó en victoria y que me
transformó en un cristiano lleno de vida, capacitándome para enfrentar toda
situación de dolor y angustia. Tu cruz es el triunfo del amor sobre el mal, del
gozo sobre el dolor, de la verdad sobre la injusticia. Te doy gracias por esta
acción poderosa y salvadora en mi vida. Confío en este gran misterio de amor y
por eso no dejo de creer en Ti y en todo lo bueno que me ofreces. Con tu gracia
y tu bendición, sé que también puedo llevar con alegría el peso de mi cruz,
porque siento que tu amor me sostiene y me conduce por caminos de esperanzas. En
tu cruz consigo las fuerzas para renovar mi corazón y vivir con actitud
optimista creyendo que todo lo puedo en Ti. Amén.
¡Buenos días!
Mensaje de Jesús para ti
La
actitud de confianza en Dios es frecuente en la Biblia: recorre casi todas sus
páginas; las personas que desfilan por ellas son confrontadas con esta señal
del varón justo, para quien Dios es único bien y poderoso refugio. La confianza
es un aspecto de la misma fe, pero tiene un matiz cordial. Jesús te habla con
suavidad y dulzura.
“¿Por
qué te confundes y te agitas ante los problemas de la vida? Déjame el cuidado
de todas tus cosas y todo te irá mejor. Cuando te abandones en mí, todo se
resolverá con tranquilidad según mis designios. No desesperes; no me dirijas
una oración agitada, como si quisieras exigirme el cumplimiento de tus deseos.
Déjame ser Dios y actuar con libertad. Abandónate confiadamente en mí. Reposa
en mí y deja en mis manos tu futuro. Dime frecuentemente: “Jesús, yo confío en
ti”. Déjate llevar en mis brazos divinos, no tengas miedo. Yo te amo. Si crees
que las cosas empeoran o se complican a pesar de tu oración, sigue confiando.
Cierra los ojos del alma y confía. Continúa diciéndome a toda hora: “Jesús, yo
confío en ti”. Y verás grandes milagros. Te lo prometo por mi amor.” Jesús.
La
confianza, que es abandonarse en el Señor, te dejará sereno y tranquilo en
medio de las tempestades de la vida, porque te has fiado nada menos que de Dios
que es poderoso, bondadoso y fiel. El salmista afirma: “Dichoso el hombre que
ha puesto su confianza en el Señor, pues no quedará defraudado”. Anímate a intentarlo.
* Enviado por el P. Natalio
La Palabra de Dios:
Evangelio de hoy
Texto del Evangelio:
En
aquel tiempo, acercándose a Jesús algunos de los saduceos, esos que sostienen
que no hay resurrección, le preguntaron: «Maestro, Moisés nos dejó escrito que
si muere el hermano de alguno, que estaba casado y no tenía hijos, que su
hermano tome a la mujer para dar descendencia a su hermano. Eran siete
hermanos; habiendo tomado mujer el primero, murió sin hijos; y la tomó el
segundo, luego el tercero; del mismo modo los siete murieron también sin dejar
hijos. Finalmente, también murió la mujer. Ésta, pues, ¿de cuál de ellos será
mujer en la resurrección? Porque los siete la tuvieron por mujer».
Jesús
les dijo: «Los hijos de este mundo toman mujer o marido; pero los que alcancen
a ser dignos de tener parte en aquel mundo y en la resurrección de entre los
muertos, ni ellos tomarán mujer ni ellas marido, ni pueden ya morir, porque son
como ángeles, y son hijos de Dios, siendo hijos de la resurrección. Y que los
muertos resucitan lo ha indicado también Moisés en lo de la zarza, cuando llama
al Señor el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob. No es un Dios
de muertos, sino de vivos, porque para Él todos viven».
Algunos
de los escribas le dijeron: «Maestro, has hablado bien». Pues ya no se atrevían
a preguntarle nada. (Lc 20,27-40)
Comentario:
Hoy,
la Palabra de Dios nos habla del tema capital de la resurrección de los
muertos. Curiosamente, como los saduceos, también nosotros no nos cansamos de
formular preguntas inútiles y fuera de lugar. Queremos solucionar las cosas del
más allá con los criterios de aquí abajo, cuando en el mundo que está por venir
todo será diferente: «Los que alcancen a ser dignos de tener parte en aquel
mundo y en la resurrección de entre los muertos, ni ellos tomarán mujer ni
ellas marido» (Lc 20,35). Partiendo de criterios equivocados llegamos a
conclusiones erróneas.
Si
nos amáramos más y mejor, no se nos antojaría extraño que en el cielo no haya
el exclusivismo del amor que vivimos en la tierra, totalmente comprensible a
causa de nuestra limitación, que nos dificulta el poder salir de nuestros
círculos más próximos. Pero en el cielo nos amaremos todos y con un corazón
puro, sin envidias ni recelos, y no solamente al esposo o a la esposa, a los
hijos o a los de nuestra sangre, sino a todo el mundo, sin excepciones ni
discriminaciones de lengua, nación, raza o cultura, ya que el «amor verdadero
alcanza una gran fuerza» (San Paulino de Nola).
Nos
hace un gran bien escuchar estas palabras de la Escritura que salen de los
labios de Jesús. Nos hace bien, porque nos podría ocurrir que, agitados por
tantas cosas que no nos dejan ni tiempo para pensar e influidos por una cultura
ambiental que parece negar la vida eterna, llegáramos a estar tocados por la
duda respecto a la resurrección de los muertos. Sí, nos hace un gran bien que
el Señor mismo sea el que nos diga que hay un futuro más allá de la destrucción
de nuestro cuerpo y de este mundo que pasa: «Y que los muertos resucitan lo ha
indicado también Moisés en lo de la zarza, cuando llama al Señor el Dios de
Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob. No es un Dios de muertos, sino de
vivos, porque para Él todos viven» (Lc 20,37-38).
* Rev. D. Ramon CORTS i Blay (Barcelona, España)
Santoral Católico:
San Odón
Abad
San
Odón se hizo muy conocido y querido por todos por ser el superior del más
célebre monasterio de su tiempo, el de Cluny, y porque tuvo bajo su dirección más
de mil monjes en diversos conventos. Debido a fuertes dolores de cabeza que el
santo padeció cuando era joven, tanto él como su padre le prometieron a Dios
Celestial mejoría para la dolencia, a lo que el Padre accedió de inmediato a
sanarlo de todo mal que lo aquejaba. Un día leyó las Reglas que San Benito hizo
para sus monasterios y se dio cuenta de que él estaba muy lejos de la santidad,
y entonces pidió ser admitido como monje en un convento benedictino. El año 910
fue fundado el famoso Monasterio benedictino de Cluny (en Francia) y el
fundador lo llevó como ayudante. Después de la muerte del fundador quedó Odón
como Superior del inmenso monasterio. Al principio San Odón se dedicaba más al
estudio que a la oración, pero en una visión, contempló que su alma era como un
vaso muy hermoso pero lleno de serpientes. Con esto comprendió que si no se
dedicaba totalmente a la oración y a la meditación no sería agradable a Dios, y
desde entonces su vida fue un orar continuo y fervoroso y un meditar constante
en temas religiosos. Odón insistía muchísimo en que se rezaran con gran fervor
los salmos y en que se observara un gran silencio en el monasterio. Y fue
formando monjes tan fervorosos que con ellos logró fundar otros 15 monasterios
más. Murió el 19 de noviembre del año 942. Contribuyó inmensamente al
resurgimiento del espíritu religioso.
© Aciprensa
Pensamiento del Santo Padre Pío
"En
la medida que pasan los años
debemos
servir con mayor diligencia a Dios
en
todo aquello a lo que nos obliga
nuestra
vocación y profesión cristiana"
Historias:
Imagen y semejanza
Mi
tío Alejandro Brac vivía sobre la antigua ruta 11, entre Caraguatay y
Malabrigo. Ese camino de tierra formaba como una picada en el monte, bordeando
las vías del Ferrocarril Belgrano. Siendo estudiante, en alguno de mis regresos
al norte, aprovechaba para arrimarme hasta allá, casi siempre a caballo en
compañía de mi hermano Arnoldo, que falleciera tiempo después en un accidente
sobre esa misma ruta 11.
Llevo
unida la imagen de este tío a uno de sus famosos cuentos. Tenía arte para
contarlos, y mucha sabiduría encerrada en sus palabras. Con todo creo que este
cuento ha rodado mucho dentro de mí mismo, y que el tiempo lo fue puliendo y
golpeando como a los laques mapuches. Y en mi caso en un contexto guaraní, que
por ser el de mi infancia, siempre me ha dado astillas para mis quemazones.
Y
ahí va lo sucedido. Una vez estaba el Niño Jesús a la costa del Paraná jugando.
Como todos los niños se dedicaba a modelar figuras de animales y de pajaritos
con sus manitas embarradas. Solo que él tenía el poder de darles además de la
forma, la vida. Luego de trabajarlos bien, no los ponía a secar. Simplemente
los colocaba en la palma de la mano y los soplaba. Es decir: los rozaba con su
aliento como si les diera un beso. Y al sentirse alentados por el beso de Dios,
los animalitos se estremecían de vida; y se largaban a volar, a correr, a
saltar o a hacer aquello que la vida les regalaba por dentro.
Pero
un día el Niño Dios quiso hacer algo realmente bonito. Iba a crear el mainumb: el picaflor. La verdad es que
se esmeró al inventarlo. No quería hacerlo grande, pretendía hacerlo hermoso.
Buscó entre los ivot iporá veva, las
flores más lindas, los colores más brillantes y llamativos y se los colocó en
la palma de la mano. En un claro del monte recogió algo del ñasaind, dejado por la luna. Del cohetí mañanero, la alborada, extrajo
los colores suaves. Mezcló todo esto con un puñadito blando de retá pytá, tierra colorada del borde del
Paraná. Lo amasó despacito con sus dedos divinos hasta hacer una pasta tierna y
delicada. Y le dio la forma de un pajarito, en el que metió una chispa de aratirí: el relámpago.
Así
lo tenía en la palma de su mano derecha, como si fuera el nido desde donde
tendría que partir. Lo arrimó despacito a la boca y lo rozó apenas con sus
labios para besarlo. Tocado por el soplo divino el pajarito se estremeció
entero y abriendo las alas partió recto hacia arriba, para doblar en ángulo
cerrado sobre sí mismo y ser una flor temblorosa frente a un racimo azul de
jacarandá. Así nació el mainumb.
Pero
resulta que Añá Mba'e Poch, el
diablo, lo andaba espiando. Porque quería copiar lo que el Niño Dios hacía, para
sacar también él algo parecido. Fue haciendo lo que le veía hacer. Y así, juntó
también él un poco de los colores de las flores primorosas, le robó los tintes
a la alborada, y los mezcló con claro de luna y temblor de refucilo. Buscó la
greda colorada del Paraná y con sus dedos peludos y largos trató de darle forma
a la pasta que había conseguido. No le salió tan prolijo, porque de apurado
tenía un ojo en lo que miraba y otro en lo que hacía. Lo que siempre es feo.
Cuando lo tuvo listo a su pajarito, resulta que éste no se movía. Y claro… ¡Que
se iba a mover! Si no tenía vida adentro. Tenía que soplarlo. Pero el diablo
tiene mal aliento. En cuanto Añá Mba'e
Poch la arrimó a su hocico y lo quiso besar, el pobre bichito se aplastó
contra la mano como para atajarse. El diablo lo tiró para arriba, a fin de que
volara. Y resultó que en vez de largarse de flor en flor como el mainumb de Dios, el animalito cayó al
suelo como un cascote y se desparramó todo. Así nació el cururú vaí, el
escuerzo. A pesar de que tiene lindos colores, siempre anda aplastado y
escondiéndose, porque lleva arriba el mal aliento del diablo.
Dios
inventó el amor, con todo lo lindo que encontró, y le dio el beso de su
bendición. El diablo quiso copiarlo, y lo que le salió fue el vicio, la pasión
y el egoísmo. En muchas cosas se parecen, pero son muy distintos. Como el mainumb lo es del cururú vaí.
Fray
Mamerto Menapace
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Humor:
Leyes que se cumplen
#
Ley de la administración del tiempo:
Todo
lleva más tiempo que todo el tiempo que Ud. tiene disponible.
#
Ley de la búsqueda indirecta:
1)
El modo más rápido de encontrar una cosa, es buscar otra.
2)
Usted siempre encontrará aquello que no está buscando.
#
Ley de la telefonía:
1)
Cuando se comunica: Si usted tiene bolígrafo, no tiene papel. Si tiene papel,
no tiene bolígrafo. Si tiene ambos, nadie contesta.
2)
Cuando usted marca números de teléfono equivocados, nunca están ocupados.
3)
Todo cuerpo sumergido en una bañera, hace sonar el teléfono.
#
Ley de la gravedad:
Si
usted consigue mantener la calma mientras a su alrededor todos están perdiendo
la suya, probablemente usted no entiende la gravedad de la situación.
#
Ley de la experiencia:
Sólo
sabe la profundidad del pozo quien cae en él.
#
Reglamento del especialista:
1)
Especialista es aquella persona que sabe cada vez más sobre cada vez menos.
2)
Súper especialista es el que sabe absolutamente todo sobre absolutamente nada.
#
Ley de las colas y embotellamientos:
La
cola de al lado siempre avanza más rápido. No ayuda cambiar de carril. La ley
no se altera.
#
Ley de la cinta adhesiva:
Existen
dos tipos de cinta adhesiva: la que no pega y la que no sale.
#
Ley de atracción de las partículas:
Toda
partícula que vuela siempre encuentra un ojo abierto.
#
Leyes de la vida:
1)
Una persona saludable es aquella que no fue suficientemente examinada por los
médicos.
2)
La experiencia es una cosa maravillosa. Te permite reconocer un error cuando
vuelves a cometerlo.
3)
Si tienes tu mente demasiado abierta, se te pueden caer los sesos.
4)
La edad es un precio demasiado alto a pagar por la madurez.
5)
La inteligencia artificial no se iguala con la estupidez natural.
6)
Si tienes que elegir entre dos males, toma aquel que nunca hayas probado.
7)
Es mucho más fácil obtener perdón que permiso.
8)
Para cada acción hay un programa gubernamental igual y opuesto.
9)
La conciencia es aquello que te duele cuando todas las otras partes de tu
cuerpo se sienten muy bien.
10)
Los hombres son de la tierra. Las mujeres son de la tierra. ¡Sobrellévalo!
11)
Ningún marido ha sido asesinado a balazos mientras lavaba los platos.
12)
Una dieta balanceada es tener una galletita en cada mano.
13)
La mediana edad llega cuando la amplitud de criterio y la estrechez de la
cintura cambian de lugar.
14)
Las oportunidades siempre se ven más grandes cuando se van que cuando vienen.
15)
Cachivache es algo que guardamos durante años y que botamos tres semanas antes
de necesitarlo.
Benditos son los que pueden reírse de sí mismos ya
que nunca dejarán de divertirse.
Pedidos de oración
Pedimos
oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes,
diáconos, seminaristas, catequistas y todos los que componemos el cuerpo
místico de Cristo; por la unión de los cristianos para que seamos uno, así como
Dios Padre y nuestro Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por
las misiones; por el triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado
Corazón de María; por la conversión de
todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por
los cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros
lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente
por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo,
el hambre y la pobreza; por los niños con cáncer y otras enfermedades graves; por
el drama de los refugiados del Mediterráneo; por los presos políticos y la
falta de libertad en muchos países del mundo; por la unión de las familias, la
fidelidad de los matrimonios y por más inclinación de los jóvenes hacia este
sacramento; por el aumento de las vocaciones sacerdotales y religiosas; y por
las Benditas Almas del Purgatorio.
Pedimos
oración para Diego G., de la ciudad
de Rosario, Santa Fe, Argentina, quien padece encefalitis y una neumonía.
Inducido en coma farmacológico y con respirador, necesita nuestras plegarias
pidiendo a Jesucristo Rey del Universo que lo sostenga entre Sus Manos y le
conceda la gracia de poder sanarse.
Pedimos oración por las siguientes personas: Maria Elena, de Argentina, que sufrió un ACV y está delicada; Violeta F., 69 años, Miami, USA, con cirrosis hepática; Gian Carlo, 33 años, Canadá, por soluciones a sus problemas económicos y de temperamento; Franco, de Argentina, por trabajo estable y seguro; y Tom, de Panamá, con Parkinson. Que el Señor atienda las necesidades de todas estas personas con su infinita misericordia.
Pedimos oración por las siguientes personas: Maria Elena, de Argentina, que sufrió un ACV y está delicada; Violeta F., 69 años, Miami, USA, con cirrosis hepática; Gian Carlo, 33 años, Canadá, por soluciones a sus problemas económicos y de temperamento; Franco, de Argentina, por trabajo estable y seguro; y Tom, de Panamá, con Parkinson. Que el Señor atienda las necesidades de todas estas personas con su infinita misericordia.
Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara
nuestras debilidades,
para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y
la paciencia;
escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros
hermanos enfermos
y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la
aflicción o la enfermedad,
la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu
hijo ha llamado dichosos,
y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la
redención del mundo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén
Los cinco minutos de Dios
Noviembre 19
Conocida
es la oración atribuida a Francisco de Asís; puede servirnos para nuestra
reflexión de hoy.
Señor,
haz de mí un instrumento de tu paz… ¡Qué trágico sería convertirse en
instrumento destructor de la paz!
Donde
haya odio, ponga yo amor… Horrible, si donde hay amor, siembro el odio.
Donde
haya ofensa, ponga yo perdón… Que después del perdón, no ponga yo nueva ofensa.
Donde
haya discordia, ponga yo la unión… Nunca
permitas que sea yo el elemento de discordia entre los hermanos.
Donde
haya error, ponga yo tu verdad; donde haya duda, ponga yo mi fe… Y no siembre
el escepticismo y la confusión.
Finalmente,
donde haya tristeza, siembre la semilla de la alegría y del optimismo, de la confianza
en la bondad de Dios.
“Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con
Dios por la muerte de su Hijo, mucho más ahora que estamos reconciliados,
seremos salvados por su vida. Y esto no es todo: nosotros nos gloriamos en
Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo, por quien desde ahora hemos
recibido la reconciliación” (Rom 5,10-11).
* P. Alfonso Milagro
Jardinero de Dios
-el
más pequeñito de todos-
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