miércoles, 14 de agosto de 2019

Pequeñas Semillitas 4083

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 14 - Número 4083 ~ Miércoles 14 de Agosto de 2019
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina) 
Alabado sea Jesucristo…
Madre María, gracias por entregarte sin reservas a la voluntad de Dios y así traernos al amor.
Pongo en tus manos nuestras miserias, nuestros dolores, nuestras angustias, para que fortalecidos por tu hijo Jesucristo y cubiertos por tu abrazo maternal, podamos salir al mundo a sanar los corazones de aquellos que no reconocen a tu hijo y no se han encontrado con su amor y su misericordia. Amén

¡Buenos días!
¿Qué ves?
“Vanidad de vanidades y todo vanidad”. Este tema bíblico sobre la vanidad y la inconsistencia de la belleza, del poder, de la fama, del dinero, tiene especial actualidad en nuestra civilización que propone como supremo ideal de la vida del hombre el bienestar, el placer, la acumulación sin límite de los bienes materiales. Jesús nos dice: “Sed ricos a los ojos de Dios”.

Cierto día, hace muchísimos años, un comerciante rico y avaro, acudió a un sabio sacerdote anciano en busca de orientación. Éste lo llevó ante una ventana y le dijo: —Mira a través de este vidrio y dime: ¿qué ves? —Gente -contestó el rico comerciante. —Mírate en este espejo. ¿Qué ves ahora?  —Me veo a mí mismo -le contestó al instante el avaro-. —He ahí, hermano, -le dijo entonces el santo varón- en la ventana hay un vidrio y en el espejo también. Pero ocurre que el vidrio del espejo está cubierto con un poquito de plata, y en cuanto hay un poco de plata de por medio, dejamos de ver a los demás y sólo nos vemos a nosotros mismos.

Encerrarte en ti mismo te dejará atrofiado y no te realizarás jamás. Una señal de madurez es entregarte más a los demás que a ti mismo. San Pablo insiste que seamos ricos en buenas obras, que demos con generosidad compartiendo las riquezas. “Así —dice— adquirirán para el futuro un tesoro que les permitirá alcanzar la verdadera Vida”, (1 Tm 6, 17-19).
* Enviado por el P. Natalio

La Palabra de Dios
Lecturas del día
Primera Lectura: Deut 34, 1-12

Salmo: Sal 65, 1-3a. 5. 8. 16-17

Santo Evangelio: Mt 18,15-20
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Si tu hermano llega a pecar, vete y repréndele, a solas tú con él. Si te escucha, habrás ganado a tu hermano. Si no te escucha, toma todavía contigo uno o dos, para que todo asunto quede zanjado por la palabra de dos o tres testigos. Si les desoye a ellos, díselo a la comunidad. Y si hasta a la comunidad desoye, sea para ti como el gentil y el publicano. Yo os aseguro: todo lo que atéis en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en el cielo. Os aseguro también que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, sea lo que fuere, lo conseguirán de mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos».

Comentario:
Hoy, en este breve fragmento evangélico, el Señor nos enseña tres importantes formas de proceder, que frecuentemente se ignoran.
Comprensión y advertencia al amigo o al colega. Hacerle ver, en discreta intimidad («a solas tú con él»), con claridad («repréndele»), su equivocado proceder para que enderece el camino de su vida. Acudir a la colaboración de un amigo, si la primera gestión no ha dado resultado. Si ni aun con este obrar se logra su conversión y si su pecar escandaliza, no hay que dudar en ejercer la denuncia profética y pública, que hoy puede ser una carta al director de una publicación, una manifestación, una pancarta. Esta manera de obrar deviene exigencia para el mismo que la practica, y frecuentemente es ingrata e incómoda. Por todo ello es más fácil escoger lo que llamamos equivocadamente “caridad cristiana”, que acostumbra a ser puro escapismo, comodidad, cobardía, falsa tolerancia. De hecho, «está reservada la misma pena para los que hacen el mal y para los que lo consienten» (San Bernardo).
Todo cristiano tiene el derecho a solicitar de nosotros los presbíteros el perdón de Dios y de su Iglesia. El psicólogo, en un momento determinado, puede apaciguar su estado de ánimo; el psiquiatra en acto médico puede conseguir vencer un trastorno endógeno. Ambas cosas son muy útiles, pero no suficientes en determinadas ocasiones. Sólo Dios es capaz de perdonar, borrar, olvidar, pulverizar destruyendo, el pecado personal. Y su Iglesia atar o desatar comportamientos, trascendiendo la sentencia en el Cielo. Y con ello gozar de la paz interior y empezar a ser feliz.
En las manos y palabras del presbítero está el privilegio de tomar el pan y que Jesús-Eucaristía realmente sea presencia y alimento. Cualquier discípulo del Reino puede unirse a otro, o mejor a muchos, y con fervor, Fe, coraje y Esperanza, sumergirse en el mundo y convertirlo en el verdadero cuerpo del Jesús-Místico. Y en su compañía acudir a Dios Padre que escuchará las súplicas, pues su Hijo se comprometió a ello, «porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos» (Mt 18,20).
Rev. D. Pedro-José YNARAJA i Díaz (El Montanyà, Barcelona, España)

Santoral Católico:
San Maximiliano María Kolbe
Mártir
Nació cerca de Lodz (Polonia) en 1894. Ingresó en los Franciscanos Conventuales, estudió en Roma y allí recibió la ordenación sacerdotal. Pronto, encendido en el amor a la Madre de Dios, fundó la asociación «Milicia de la Inmaculada» que propagó con entusiasmo con varias publicaciones y a cuyo servicio fundó la «Ciudad de la Inmaculada». En 1930 marchó como misionero a Japón, donde se esforzó por extender la fe cristiana bajo el patrocinio de la misma Virgen Inmaculada. Vuelto a Polonia en 1936, intensificó la publicación y difusión de revistas marianas. Desencadenada la II Guerra Mundial, fue detenido por los nazis e internado en el campo de concentración de Oswiecim o Auschwitz (Cracovia, Polonia), donde lo destinaron a un trabajo tan penoso como el de trasportar cadáveres al crematorio. Y allí murió el 14 de agosto de 1941, tras haberse ofrecido voluntariamente a sustituir a un padre de familia condenado a la muerte por hambre. Juan Pablo II lo canonizó en 1982 y decretó que se le venerase también como mártir.
Oración: Oh Dios, que al mártir san Maximiliano María Kolbe, apóstol de la Inmaculada, le llenaste de celo por las almas y de amor al prójimo; concédenos, por su intercesión, trabajar generosamente por tu gloria en el servicio de los hombres y tener el valor de asemejarnos a tu Hijo, incluso hasta en la muerte. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Para más información hacer clic acá.
© Directorio Franciscano – Aciprensa – Catholic.net

Pensamiento del día

“Tenemos que ganar el mundo entero y cada alma,
ahora y en el futuro hasta el final de los tiempos,
para la Inmaculada y, a través de ella,
para el Corazón Eucarístico de Jesús”
(San Maximiliano Kolbe)

Tema del día:
Vivir la fidelidad
Fruto de la confianza, la fidelidad es parte del compromiso, que cuando se hace por amor, nunca cuesta trabajo. 

La mutua e incondicional aceptación. Esta es la explicitación del amor, en lo que tiene de aceptación mutua e incondicional. Es la radicalización del amor, en lo que supone de conocimientos y aceptación total del otro. Un reconocimiento que no se limita y ni se detiene en las cualidades positivas, sino que integra también las limitaciones y defectos y manifestaciones a lo largo de la existencia.

Una aceptación que no se pospone a la comprobación de la evolución del amor, sino que se compromete desde hoy y para siempre la fidelidad en la esperanza. Esta, a su vez, es la forma en que se concretiza la incondicional aceptación del otro. Es la presencia perenne de la aceptación. A través de la fidelidad el amor es capaz de superar las velocidades del sentimiento. En ella, el amor se hace duradero. Por tanto, la fidelidad implica, fundamentalmente la radicalización existencial del amor; porque el amor se especifica y concretiza en una decisión fundamental de los esposos, quienes, por encima de las situaciones conflictivas y de los cambios que pueden sobrevenir, se comprometen a mantenerse unidos en el amor.

Pero la fidelidad, además, supone la promesa y esta no es sino un acto de libertad suprema que al mismo tiempo compromete. Quien no se compromete, no es libre. Por ello, el hombre que se decide y esfuerza a ser fiel, aparece como el ser libre que supera el momento exterior y que supera a sí mismo Es la promesa donde el hombre trasciende su momento presente, y acepta el riesgo de comprometerse con un futuro, al que quiere fecundar en la fidelidad del presente, pero al que no puede arrancar su imprevisibilidad. La fidelidad supone también la esperanza y la confianza en que el otro responderá, a la propia fidelidad con su fidelidad.

Esta esperanza hace que la promesa de fidelidad, lejos de convertir el amor estático, lo vivifique, lo llene de dinamismo y apertura. Así, el amor matrimonial será cada día una aventura y una tarea desde la que se llama al hombre y a la mujer a descubrir su propio misterio y a hacer experiencia su propia trascendencia. 
Fuente: Encuentra.com 

Nuevo vídeo

Hay un nuevo vídeo subido al blog
de "Pequeñas Semillitas" en internet:
Vida de San Maximiliano Kolbe.
Para verlo tienes que ir al final de esta página

Meditaciones de “Pequeñas Semillitas”
Un hombre calvo y demacrado se hallaba en su cama, la cara pálida, le habían trasplantado la médula ósea porque tenía leucemia. La enfermera Hanne Dina se le acercó, lo saludó y le preguntó si quería sopa y él dijo que no, que sólo quería dormir.
Al rato Hanne le llevó la medicina y él se la tomó con disgusto y volvió a hundirse en la almohada. Hanne fue a la cocina del hospital preparó para ella una taza de té, preparó una bandeja y colocó la tetera y dos tazas y se dirigió al cuarto del enfermo preguntándole:
¿Le molesta si tomo el té aquí? Quisiera ver las noticias acá mientras tomo el té.
Claro que no me molesta respondió.
Ella encendió el televisor mientras le decía: Traje una taza extra por si quiere té. Sí, sírvame media taza, por favor, respondió el enfermo.
Al día siguiente Hanne volvió con la bandeja y dos tazas y así lo hizo por una semana. A los pocos días se fue: se había restablecido lo suficiente para irse a terminar su convalecencia en su casa.
Cuatro meses más tarde Hanne estaba en un centro comercial cuando oyó una voz potente. “¡Hanne, que gusto de verla!". La enfermera lo reconoció. Era el enfermo de la taza de té. Él la abrazó y presentándole a la esposa , dijo: "Ésta es Hanne, la mujer que me salvó la vida con una taza de té...

Pedidos de oración
Pedimos oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas, monjas, religiosas, novicias, catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones; por el triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María;  por la conversión de todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por los cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo, el hambre y la pobreza; por los pacientes internados en la Casa de la Bondad en  Córdoba (Argentina); por los niños con cáncer y otras enfermedades graves; por el drama de los refugiados del Mediterráneo; por los presos políticos y la falta de libertad en muchos países del mundo; por las víctimas de catástrofes naturales; por la unión de las familias, la fidelidad de los matrimonios y por más inclinación de los jóvenes hacia este sacramento; por el aumento de las vocaciones sacerdotales y religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio.

Pedimos oración para la señora Florencia, de Córdoba, Argentina, persona mayor, con enfermedad muy avanzada y que está transitando los últimos días de su paso por la tierra. Rogamos a Jesús Misericordioso que tenga piedad de ella, no permita que sufra y cuando llegue el momento la reciba en el cielo en sus brazos.

Continuamos unidos en oración por medio del rezo del Santo Rosario poniendo en Manos de Nuestra Madre Bendita todas nuestras preocupaciones, alegrías y necesidades, poniendo al mundo entero en Manos de nuestra Madre y pidiéndole a Ella paz para el mundo. Al rezar por la paz, rezamos por todo, por la paz en el mundo, en los corazones, porque la violencia sea desterrada, por la paz para los niños que están en peligro de ser abortados. Paz para los jóvenes que no encuentran el camino, paz para los deprimidos. Paz para los que no han tenido la dicha de conocer al Amor. En fin rezamos por la paz, y sigamos haciéndolo.

Cinco minutos con Jesús
Agosto 14
La predicación de Jesús produce honda impresión en la gente que lo escucha; notan que en él hay algo extraordinario, que se da en él y solamente en él.
Jesús habla en nombre del Padre que lo ha enviado; por eso Jesús es el Profeta del Padre; lo que Jesús enseña no es su doctrina, sino la doctrina del Padre. Jesús quiere llevarnos a todos al Padre así él cumple su misión profética.
El cristiano por su bautismo participa de la misión profética de Jesús; el cristiano, por lo mismo, ha de cumplir con su misión, tomando ante todo conciencia de que él es el profeta de Jesús, enviado por Jesús al mundo para transmitirle su doctrina, su Palabra, su mensaje salvífico.
Predicar ese misterio de salvación, darlo a conocer, comunicarlo con fidelidad, ésa es la misión del cristiano como profeta; no seas tú profeta mudo, que no predica a Jesús y su mensaje; y no seas profeta infiel, que se desvía de su misión, predicándote a ti mismo en lugar de predicar a Cristo.
(Padre Alfonso Milagro)
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)

PÁGINAS DE FELIPE DE URCA:

”PEQUEÑAS SEMILLITAS”

”JUAN PABLO II INOLVIDABLE”

FACEBOOK de “FELIPE DE URCA”

FACEBOOK de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”

TWITTER de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”

INSTAGRAM: FELIPE DE URCA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.