PEQUEÑAS
SEMILLITAS
Año
13 - Número 3584 ~ Lunes 5 de Febrero de 2018
Desde
la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
No
dejes de creer que las palabras y las poesías sí pueden cambiar el mundo. Pase
lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos
seres llenos de pasión. La vida es desierto y oasis. Nos derriba, nos lastima,
nos enseña, nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia.
Aunque
el viento sople en contra, la poderosa obra continúa: tú puedes aportar una
estrofa.
No
dejes de soñar, porque en sueños es libre el hombre…
Walt Whitman
¡Buenos días!
La ostra herida
“La
lección más importante que puede aprender el hombre en su vida no es que en el
mundo hay dolor, sino que depende de nosotros sacar provecho de él, pues se nos
ha permitido transformarlo en gozo” (R. Tagore). “La maravillosa riqueza de la
experiencia humana perdería parte de su alegría gratificante, si no existieran
limitaciones que superar. La cima de la colina no sería ni la mitad de
maravillosa, si no hubiera oscuros valles que atravesar” (H. Keller).
Una ostra que no ha sido herida no puede producir
perlas. Las perlas son producto del dolor, el resultado de la entrada de una sustancia
extraña e indeseable al interior de la ostra, como un parásito o un grano de
arena. En la parte interna de la ostra se encuentra una sustancia lustrosa
llamada nácar. Cuando un grano de arena penetra en la ostra, las células de
nácar comienzan a trabajar y cubren el grano de arena con capas y más capas de
nácar para proteger el cuerpo indefenso de la ostra. Como resultado, se va
formando una hermosa perla…
Hay
un refrán que dice: “Con las piedras que me arrojen, construiré mi casa”.
Cuando la vida te entregue un agrio limón ¿por qué no lo exprimes y te tomas
una agradable limonada? La capacidad de transformar un menos en más, es propia
del hombre que no se deja frenar por los obstáculos, sino que se apoya en ellos
mismos para proyectarse mucho más adelante. Que medites esta posibilidad y la
hagas una realidad en tu vida.
* Enviado por el P. Natalio
La Palabra de Dios:
Evangelio de hoy
Texto del Evangelio:
En
aquel tiempo, cuando Jesús y sus discípulos hubieron terminado la travesía,
llegaron a tierra en Genesaret y atracaron. Apenas desembarcaron, le
reconocieron en seguida, recorrieron toda aquella región y comenzaron a traer a
los enfermos en camillas adonde oían que Él estaba. Y dondequiera que entraba,
en pueblos, ciudades o aldeas, colocaban a los enfermos en las plazas y le
pedían que les dejara tocar la orla de su manto; y cuantos la tocaron quedaban
salvados. (Mc
6,53-56)
Comentario:
Hoy,
en el Evangelio del día, vemos el magnífico "poder del contacto" con
la persona de Nuestro Señor: «Colocaban a los enfermos en las plazas y le
pedían que tocaran siquiera la orla de su manto; y cuantos la tocaron quedaban
salvados» (Mc 6,56). El más mínimo contacto físico puede obrar milagros para
aquellos que se acercan a Cristo con fe. Su poder de curar desborda desde su
corazón amoroso y se extiende incluso a sus vestidos. Ambos, su capacidad y su
deseo pleno de curar, son abundantes y de fácil acceso.
Este
pasaje puede ayudarnos a meditar cómo estamos recibiendo a Nuestro Señor en la
Sagrada Comunión. ¿Comulgamos con la fe de que este contacto con Cristo puede
obrar milagros en nuestras vidas? Más que un simple tocar «la orla de su
manto», nosotros recibimos realmente el Cuerpo de Cristo en nuestros cuerpos.
Más que una simple curación de nuestras enfermedades físicas, la Comunión sana
nuestras almas y les garantiza la participación en la propia vida de Dios. San
Ignacio de Antioquía, así, consideraba a la Eucaristía como «la medicina de la
inmortalidad y el antídoto para prevenirnos de la muerte, de modo que produce
lo que eternamente nosotros debemos vivir en Jesucristo».
El
aprovechamiento de esta "medicina de inmortalidad" consiste en ser
curados de todo aquello que nos separa de Dios y de los demás. Ser curados por
Cristo en la Eucaristía, por tanto, implica superar nuestro ensimismamiento.
Tal como enseña Benedicto XVI, «Nutrirse de Cristo es el camino para no
permanecer ajenos o indiferentes ante la suerte de los hermanos (…). Una
espiritualidad eucarística, entonces, es un auténtico antídoto ante el
individualismo y el egoísmo que a menudo caracterizan la vida cotidiana, lleva
al redescubrimiento de la gratuidad, de la centralidad de las relaciones, a partir
de la familia, con particular atención en aliviar las heridas de aquellas
desintegradas».
Igual
que aquellos que fueron curados de sus enfermedades tocando sus vestidos,
nosotros también podemos ser curados de nuestro egoísmo y de nuestro
aislamiento de los demás mediante la recepción de Nuestro Señor con fe.
Fr. John GRIECO (Chicago, Estados Unidos)
Santoral Católico:
Santa Águeda
Virgen y Mártir
Es
una de las más famosas vírgenes y mártires de la antigüedad cristiana, y su
nombre fue incluido en el canon romano de la misa. Nació en Catania o Palermo
hacia el año 230, de padres cristianos, nobles y ricos. En su juventud consagró
su virginidad al Señor. Durante la persecución de Decio, Quinciano, gobernador
de la isla de Sicilia, sometió a Águeda a los más crueles y vejatorios
tormentos porque se negó ella a las pretensiones amorosas de él, no quiso
sacrificar a los dioses y se mantuvo firme en su fe cristiana. Según cuenta la
tradición, Quinciano, despechado y furioso, ordenó que le cortaran los pechos;
sobrevivió ella milagrosamente. Por fin, condenada a la hoguera, murió virgen y
mártir en Catania el 5 de febrero del año 251.
Oración: Te rogamos, Señor, que la virgen santa
Águeda nos alcance tu perdón, pues ella fue agradable a tus ojos por la fortaleza
que mostró en su martirio y por el mérito de su castidad. Te lo pedimos por
Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
© Directorio Franciscano - Aciprensa
Pensamiento del día
"Dios no manda cosas imposibles,
sino que, al mandar lo que manda,
te invita a hacer lo que puedas
y pedir lo que no puedas
y te ayuda para que puedas"
-San Agustín-
Tema del día:
La oración mariana más antigua
La
oración más antigua conocida hasta la fecha, dirigida a la Theotokos (en
griego, Θεοτοκος significa “portadora de Dios”) se encuentra en un fragmento de
papiro que data aproximadamente del año 250.
Como
reseña la página web de Trisagion Films, en 1917 la Biblioteca John Rylands de
Manchester, Inglaterra, adquirió un gran panel de papiro egipcio. La oración se
encuentra en un fragmento de este papiro, registrado bajo el número de
referencia 470.
El
papiro está escrito en griego koiné (esto es, la llamada “lengua franca” del
Mediterráneo de entonces, en el que fueron escritos los Evangelios), y contiene
una serie de oraciones que parecen pertenecer a una liturgia copta de Navidad,
aunque el fragmento en cuestión puede ser una copia privada, para uso personal,
de la oración original en cuestión.
Esta
oración, sin embargo, todavía se canta en la Iglesia ortodoxa hasta el día de
hoy, al final de casi todas las liturgias de vísperas durante el tiempo de
Cuaresma, como también se canta (o se recita, o se reza) en las liturgias
católicas y de las Iglesias orientales, de diversos ritos (oriental, maronita,
y otros).
El
hecho de que en esta oración, tan temprana en la historia del cristianismo, se
llame a María “Theotokos” es importante por varias razones.
Quizá
la principal de ellas sea el hecho de que el término “Theotokos” no es solo un
concepto teológico defendido en el Tercer Concilio Ecuménico en el año 431
(para combatir la herejía nestoriana) sino que ya era de uso popular.
Como
san Gregorio Nacianceno declaró en el año 379, en una de sus cartas, “si
alguien no sostiene que la Santísima Virgen María es Madre de Dios (esto es, la
“Theotokos”, la “portadora de Dios”), está separado de la divinidad”.
La
oración, traducida del texto griego original, dice:
Bajo tu amparo nos acogemos, oh, Madre de Dios. No
desprecies nuestras peticiones en tiempos de angustia, sino rescátanos del
peligro; tú, la única pura; tú, la única bendita.
*Fuente: Reina del Cielo
Meditaciones
Antiguamente
había ciudades donde quien había cometido un delito, podía refugiarse para que
no le mataran. Y estas ciudades eran figuras de María Santísima, que es la
Ciudad Santa donde pueden refugiarse los que cometieron pecados y son
perseguidos, no por la justicia humana, sino por la Justicia divina.
María
ampara a los pecadores y la Iglesia la llama “Refugio de los pecadores”, pues
es María que al tener un trono tan elevado junto a Dios, puede interceder ante
la majestad divina como Abogada de los más miserables pecadores.
No
desconfiemos de nuestra salvación, aunque hayamos cometido grandes y numerosos
pecados, pues está la Virgen, y si tenemos devoción a Ella, entonces ya estamos
salvados, porque nadie que haya confiado en María, ha terminado perdiéndose en
el Infierno.
La
Virgen está puesta por Dios para ayudar a los hombres a alcanzar la salvación,
que de otro modo no alcanzarían por méritos, sino por pura misericordia del
Señor, se salvan gracias a la misericordia de María, que es la Madre de Dios,
pero también es la madre del pecador, y trata por todos los medios de reconciliar
a ambos hermanos: Dios y el pecador, para que haya paz entre ellos, y pueden
habitar juntos para siempre en el Cielo.
Sitio Sma. Virgen
Pedidos de oración
Pedimos
oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa
Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas,
catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la
unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro
Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones; por el
triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María; por la conversión de todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por los
cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros
lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente
por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo,
el hambre y la pobreza; por los niños con cáncer y otras enfermedades graves; por
el drama de los refugiados del Mediterráneo; por los presos políticos y la
falta de libertad en muchos países del mundo; por las víctimas de catástrofes
naturales; por la unión de las familias, la fidelidad de los matrimonios y por
más inclinación de los jóvenes hacia este sacramento; por el aumento de las
vocaciones sacerdotales y religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio.
Pedimos
oración para Guido e Isabel,
hermanos, que en Tucumán, Argentina, han sufrido un accidente del que
resultaron con múltiples fracturas. Que la Santísima Virgen de Lourdes
interceda por ellos ante Jesús para lograr su pronta recuperación. También
pedimos por las intenciones personales y familiares de Celmira, hermana de los antes mencionados.
Pedimos
oración para Emilio, de Buenos
Aires, Argentina, hombre mayor cuya salud se va deteriorando día a día en
múltiples aspectos, por lo que requiere cuidados especiales. Y también para María Rosa, su esposa, que debe hacer
frente sola a dicha situación, llevando además consigo sus propios problemas de
salud. Señor Jesús: te rogamos que atiendas generoso las necesidades físicas y
espirituales de estos esposos permitiendo que su calidad de vida se mantenga a
pesar de las dificultades... dales fuerzas a ambos para llevar su cruz.
Pedimos
oración para estas personas de Colombia: Carlota
O. de C., que se encuentra atravesando un cuadro viral muy fuerte,
acompañado de un dolor abdominal en el costado derecho que le hace sufrir
muchísimo y los médicos no han dado todavía con la causa a pesar de intensos
exámenes clínicos; por la salud de Aídé
G., con problemas oncológicos, al igual que María Edilma T.; por la salud de Cecilia, afectada de EPOC y por la de su esposo Álvaro, cuyo problema es cáncer de
vejiga; así mismo por la recuperación de Lilia
G., intervenida recientemente por segunda vez de sus rodillas. Que el Señor
pose sus Santas Manos Sanadoras sobre todas estas personas, siempre con la
intercesión de nuestra Madre, la Señora de la Esperanza.
Continuamos
unidos en oración por medio del rezo del Santo Rosario poniendo en Manos de
Nuestra Madre Bendita todas nuestras preocupaciones, alegrías y necesidades,
poniendo al mundo entero en Manos de nuestra Madre y pidiéndole a Ella paz para
el mundo. Al rezar por la paz, rezamos
por todo, por la paz en el mundo, en los corazones, porque la violencia sea
desterrada, por la paz para los niños que están en peligro de ser
abortados. Paz para los jóvenes que no
encuentran el camino, paz para los deprimidos. Paz para los que no han tenido
la dicha de conocer al Amor. En fin rezamos por la paz, y sigamos haciéndolo.
Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras
debilidades,
para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y
la paciencia;
escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros
hermanos enfermos
y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la
aflicción o la enfermedad,
la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu
hijo ha llamado dichosos,
y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la
redención del mundo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén
Los cinco minutos del Espíritu Santo
Febrero 5
"Ven
Espíritu Santo, porque a veces no entiendo qué sentido tienen las cosas que me
pasan, y otras veces no sé para qué estoy viviendo. Ilumina cada momento con tu
presencia, para que pueda descubrir qué me quieres enseñar, para que sepa
valorar cada momento y pueda vivir con ganas.
Espíritu
Santo, llena de claridad todo lo que hoy me toque vivir, cada una de mis
experiencias, para que pueda reconocer la importancia de cada cosa y me
entregue de corazón en cada instante.
No
dejes que haya momentos vacíos, oscuros, sin sentido. No dejes que mi vida se
me vaya escapando sin vivirla a fondo. Hazte presente en cada momento de esta
jornada, para que sienta que vale la pena estar en este mundo.
Ven
Espíritu Santo. Amén."
* Mons. Víctor Manuel Fernández
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el
más pequeñito de todos)
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