martes, 12 de mayo de 2009

Pequeñas Semillitas 0722

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0722 ~ Martes 12 de Mayo de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)



Hola !!!
El Padre sabe qué hay en cada uno de nosotros que debe ser cortado, purificado, eliminado...
Hace los cortes necesarios, con maestría y ternura, para dar energía y vida, para orientar, para crecer, para encauzar.
Él trabaja por mí y en mí. Él hace mi vida fecunda sólo con dejarle actuar.
Sus atenciones y cuidados siempre están dirigidos a conseguir los mejores frutos.


La Palabra de Dios : Evangelio del día


En aquel tiempo, Jesús habló así a sus discípulos: «Os dejo la paz, mi paz os doy; no os la doy como la da el mundo. No se turbe vuestro corazón ni se acobarde. Habéis oído que os he dicho: ‘Me voy y volveré a vosotros’. Si me amarais, os alegraríais de que me fuera al Padre, porque el Padre es más grande que yo. Y os lo digo ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda creáis. Ya no hablaré muchas cosas con vosotros, porque llega el Príncipe de este mundo. En mí no tiene ningún poder; pero ha de saber el mundo que amo al Padre y que obro según el Padre me ha ordenado».
(Juan 14, 27-31a)

Comentario
Hoy, Jesús nos habla indirectamente de la cruz: nos dejará la paz, pero al precio de su dolorosa salida de este mundo. Hoy leemos sus palabras dichas antes del sacrificio de la Cruz y que fueron escritas después de su Resurrección. En la Cruz, con su muerte venció a la muerte y al miedo. No nos da la paz «como la da el mundo» (cf. Jn 14,27), sino que lo hace pasando por el dolor y la humillación: así demostró su amor misericordioso al ser humano.
En la vida de los hombres es inevitable el sufrimiento, a partir del día en que el pecado entró en el mundo. Unas veces es dolor físico; otras, moral; en otras ocasiones se trata de un dolor espiritual..., y a todos nos llega la muerte. Pero Dios, en su infinito amor, nos ha dado el remedio para tener paz en medio del dolor: Él ha aceptado “marcharse” de este mundo con una “salida” sufriente y envuelta de serenidad.
¿Por qué lo hizo así? Porque, de este modo, el dolor humano —unido al de Cristo— se convierte en un sacrificio que salva del pecado. «En la Cruz de Cristo (...), el mismo sufrimiento humano ha quedado redimido» (Juan Pablo II). Jesucristo sufre con serenidad porque complace al Padre celestial con un acto de costosa obediencia, mediante el cual se ofrece voluntariamente por nuestra salvación.
Un autor desconocido del siglo II pone en boca de Cristo las siguientes palabras: «Mira los salivazos de mi rostro, que recibí por ti, para restituirte el primitivo aliento de vida que inspiré en tu rostro. Mira las bofetadas de mis mejillas, que soporté para reformar a imagen mía tu aspecto deteriorado. Mira los azotes de mi espalda, que recibí para quitarte de la espalda el peso de tus pecados. Mira mis manos, fuertemente sujetas con clavos en el árbol de la cruz, por ti, que en otro tiempo extendiste funestamente una de tus manos hacia el árbol prohibido».
Rev. D. Enric Cases i Martín (Barcelona, España)


Santoral Católico

San Pancracio, mártir adolescente


Nacido en Frigia, provincia romana del Asia Menor. Su padre era un noble pagano llamado Cleonio que falleció cuando el niño tenía siete años. Pancracio fue a vivir con su tío paterno, Dionisio, quien fue un excelente modelo. Se trasladaron a Roma cuando el niño tenía diez años.

Dionisio y Pancracio tienen un criado cristiano que los evangeliza y los pone en contacto con el Papa. Así conocen a fondo el cristianismo y se convierten. Fueron bautizados y recibieron la comunión. Enseguida se despojaron de muchas posesiones en favor de los pobres.

El emperador Diocleciano, decretó una persecución contra el Cristianismo (la última del imperio romano). Al poco tiempo Pancracio fue denunciado al emperador, quien conocía a su difunto padre. Le dijeron "El hijo de Cleonio de Frigia se ha hecho cristiano y está distribuyendo sus haciendas entre viles personas; además, blasfema horriblemente contra nuestros dioses".

Diocleciano mando llamar a Pancracio y conversó largo tiempo con el, tratando de persuadirlo a que renunciase a Jesucristo. Al no lograrlo le condenó a muerte. En el lugar del martirio Pancracio se arrodilló, levantó los ojos y las manos al cielo, dando gracias al Señor porque había llegado a ese momento. Le cortaron la cabeza. Por la noche una noble señora, llamada Octavila, hizo recoger su cuerpo, lo embalsamó, lo amortajó con un lienzo precioso e hizo que lo entierren en un sepulcro nuevo, cerca del lugar del martirio.

El Papa Vitaliano envió sus reliquias desde el cementerio de Calepodius en Roma a Inglaterra para evangelizar y para instalar en los altares. San Agustín de Canterbury dedicó la primera Iglesia de Inglaterra a San Pancracio.

Es titular de una Basílica romana. Aquí los que habían sido bautizados el Sábado de Gloria dejaban sus vestidos blancos en el domingo octava de la Resurrección (llamado Dominica in Albis). Era un acto conclusivo de la Pascua. Sobre la tumba de San Pancrasio renovaban el juramento de fidelidad a Jesucristo. Desde entonces ha sido un santo muy amado, protector de inocentes y de las víctimas del perjurio.


Pensamiento


"Las promesas de Dios son como las estrellas; cuanto más oscura sea la noche, más brillante es su fulgor"


Día Internacional de la Enfermera


El 12 de mayo -fecha del nacimiento de la enfermera inglesa Florence Nightingale- es el día internacional de la enfermera. Valga la ocasión para poner de relieve las razones por las cuales la sociedad siente tanto respeto y admiración por quienes ejercen esta noble profesión.

Los anales de las guerras y los conflictos bélicos más recientes están llenos de actos de valor, de generosidad y de humanidad poco conocidos en la historia. Ejemplo de ello son los casos de las inglesas Florence Nightingale y Edith Louise Cavell. Por ello, para hablar del destacado papel de las enfermeras, es imprescindible referirse a una de esas mujeres, Florence, considerada por excelencia como el símbolo de las enfermeras en el mundo.

Muy poco se sabe sin embargo, de la “Señora de la Lámpara” o “El Ángel de los Tullidos”, leyenda que surgió durante la guerra de Crimea (conflicto bélico ocurrido de 1853 a 1856 entre Rusia, Turquía y las potencias occidentales interesadas en impedir el desmembramiento del imperio otomano), cuando acompañada de una lámpara y un búho domesticado en el bolsillo, realizaba rondas interminables entre los heridos, curándolos y brindándoles ánimo. Con sus medidas sanitarias, logró reducir la mortandad de su hospital de un 60% a un 2.2%.

Florence, de origen italiano, nació en 1820; creció en el seno de una familia adinerada de Hampshire, Inglaterra, y recibió una educación clásica, aprendiendo italiano, latín, griego, historia y matemática. A los 23 años decidió estudiar para enfermera aun con la oposición de su familia, que consideraba que la enfermería no era una carrera respetable, pues se asociaba con mujeres de la clase trabajadora. No obstante, estudió en secreto y logró graduarse.

Se considera incluso que la Cruz Roja fue su obra, aunque fuera fundada por el banquero suizo Jean-Henri Dunant, quien en una conferencia expresó que si bien el aparecía como su fundador, el trabajo de Florence Nitghtingale en la guerra de Crimea le había inspirado en su creación.

“La señora de la lámpara” además de ser una adalid de la vida, fue una pionera en la lucha por los derechos de las mujeres, trabajando por lograr que estas pudieran ejercer carreras fuera del hogar, de manera que lograran crear condiciones sociales y económicas que favorecieran sus derechos.

Florence fue y sigue siendo un modelo de inspiración para las valientes mujeres que han decidido dedicar su vida al cuidado de enfermos/as.

La enfermería es una profesión tradicionalmente ejercida en el mundo por mujeres durante 24 horas y 365 días al año. La historia señala que en 1870, la primera enfermera prestó sus servicios a la Cruz Roja Internacional.

Datos estadísticos indican que más de once millones de enfermeras en el mundo, dispensan cuidados en hospitales y centros de salud rurales, escuelas, lugares de trabajo, hogares, prisiones, zonas de guerra y campos de refugiados y desplazados.

Las enfermeras están a disposición de los grupos más vulnerables como los pobres, las personas refugiadas y desplazadas. El 80% del total de la atención primaria de salud es dispensado por enfermeras.

Tan sólo en Estados Unidos, de los más de 2.25 millones de enfermeros registrados a fines del siglo XX, más del 95% son mujeres; en la Unión Europea representan más del 2% de la fuerza de trabajo.

Por todo lo dicho y mucho más, enviamos una sincera felicitación a todas las enfermeras, con el reconocimiento de que son la columna vertebral de la mayoría de los equipos de atención de salud en el mundo, prestando sus servicios no siempre en las mejores condiciones técnicas y estructurales, pero siempre dispuestas a ayudar a quienes lo necesitan. Elevemos una plegaria a Santa Agueda, patrona de las enfermeras, para que las proteja y les siga inspirando esa sensibilidad humana que es esencial para la curación del cuerpo y también del espíritu.



Meditación breve



Ya sea que habite una casa o un apartamento, un cuarto o muchos, afirmo que Dios es la única Presencia y el único Poder dentro de mi hogar.
Dios está dentro de mí, dentro de todos los que habitan en mi casa y dentro de todos los que vienen de visita. La presencia de Dios impregna mi hogar de vida, amor, gozo y paz.
Puesto que la amorosa presencia de Dios está en mi hogar, en todos los cuartos refulge un espíritu de orden y belleza. Mi hogar es un refugio de descanso y contento.
Dios es un amoroso consejero para las decisiones familiares, pues estimula el entendimiento y la cooperación.
El amor de Dios llena mi hogar; todos los que entran en él cobran conciencia de estar en un refugio de amor y paz.


Pedidos de oración


La lectora Albis Ochoa nos pide oraciones por Guatemala, para que Nuestro Señor Jesucristo erradique la violencia, el alcoholismo y la prostitución y los bendiga con prosperidad y paz. Nos unimos en oración.



La lectora Ana Miguelina Bretón Checo nos pide oraciones por la familia Rosario Bretón, que vive en República Dominicana, para que el Señor derrame paz y amor en ellos, y en especial por la jovencita Idalmis para que el Buen Jesús la guíe por el buen camino y cuide su salud física y espiritual.



La lectora Cristina Oyarce, de Chile, nos pide oraciones por Fabián, un chico vecino con problemas de salud a nivel de sus pulmones, y también por su hijo Cristian para que Dios Misericordioso le abra las puertas para conseguir las becas que necesita, y por su hogar para que las finanzas sean bendecidas desde el cielo en estos tiempos difíciles.



Pedimos oración por el señor Mario B. R. que vive en Belén, Colombia, rogando al Señor que atienda con generosidad las necesidades físicas, materiales y espirituales de su familia.



Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.


El rincón de los lectores


Este es un espacio destinado a los lectores de Pequeñas Semillitas. Aquí podrán reflejar sus comentarios y opiniones, tanto acerca de los temas tratados en esta página como también sobre cualquier asunto de interés general. Para que tu mensaje se publique debes dirigirlo por mail a pequesemillitas@gmail.com con el título "El rincón de los lectores" y deberá ser muy breve y no contener conceptos agraviantes para nada ni para nadie.
Los mensajes serán moderados por el propietario de esta página y se publicarán a medida que el tiempo y el espacio en la misma lo permitan, y no se admitirán réplicas o respuestas públicas a mensajes anteriores de otros lectores.


# José Luis Domínguez Pascual - 12-Mayo-2009 - Málaga, España
dompas55@hotmail.com

Mi querido Hermano, en la Santísima Trinidad y Sagrada Familia de Narazert:
No sé como agradecerte, la publicación en Pequeñas Semillitas, de ése hermosísimo Pedido de Oración.
Andamos juntos el camino de la Evangelización y tú, mi maestro, fuiste el empujón necesario para tomar la decisión, una vez Jubilado por Accidente, de ofrecer a Dios Nuestro Señor, mis humildes servicios de Apostolado.
Ya van casi 18 meses en ello y no me arrepentiré jamás. Pues gracias a ello, me he encontrado a personas como tú en el camino.
En nombre propio, María de Fátima, mi Esposa, Rodrigo y Azucena. Seas colmado de Bendiciones, junto a todos los tuyos y Melissa.
Paz y Bien.
José Luis Domínguez Pascual de tu Blog Hermano http://semillasdedios.blogspot.com/
Málaga (España) a 12-05-09, víspera de Nuestra Señora de Fátima.


# Nota del autor:

Nada que agradecer José Luis... Tú y tu trabajo generoso y fecundo merecen ésto y mucho más.
Dios te colme de bendiciones junto a tu querida familia.
Felipe.


Mayo mes de María


Día 12

Si nos ponemos en la piel de María, algo que sorprende es la rapidez con que dice que sí a lo que Dios le pide, la generosidad ante su vocación. ¿Sabes por qué actúa así? Porque es consciente de algo muy importante que muchos no sabemos, o si lo sabemos enseguida lo olvidamos: su vida no es suya. García Morente, filósofo no creyente, se convirtió al darse cuenta de esto. Él lo explica con estas palabras que, aunque no son fáciles, si las lees con atención verás qué interesante:

"Mi vida, los hechos de mi vida, se habían realizado sin mí, sin mi intervención (se refiere al trabajo que tenía, las amenazas que recibió, tuvo que emigrar dejando a su familia....) Yo los había presenciado pero en ningún momento provocado. Me pregunto, entonces: ¿Quién pues, o qué era la causa de esa vida, que siendo mía, no era mía? Lo curioso era que todos esos acontecimientos pertenecían a mi vida, pero no habían sido provocados por mí; es decir, no eran míos. Entonces, por un lado, mi vida me pertenece, pero, por otro lado, no me pertenece, no es mía, puesto que su contenido viene en cada caso producido y causado por algo ajeno a mi voluntad". Sólo encontraba una solución para entender la vida: algo o alguien distinto de mí hace mi vida y me la entrega.

Madre mía, enséñame esta lección: Mi vida es mía y no es mía. Alguien distinto de mí hace mi vida y me la entrega. Yo con libertad la vivo como quiero, pero hay Otro que me la entrega con un para qué, con un fin, con una misión. Por eso mi vida es mía y es de Dios: somos copropietarios. Mi vida es para Dios, y por Él, para los demás, porque libremente quiero hacer el bien.

Ahora puedes seguir hablando a María con tus palabras, comentándole algo de lo que has leído. Después termina con una oración final.

Texto escrito por José Pedro Manglano Castellary (Sacerdote)
Tomado del Web Católico de Javier
http://webcatolicodejavier.org/


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.