martes, 7 de febrero de 2023

Pequeñas Semillitas 5220

PEQUEÑAS SEMILLITAS
 
Año 18 - Número 5220 ~ Martes 7 de Febrero de 2023
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
¡Alabado sea Jesucristo!
Amado Jesús, te agradezco por la bendición de la vida que me has dado. Hoy desearía que me des la capacidad de ser libre de recuerdos, vicios y temores, que me están haciendo daño y que no puedo quitar de mi vida. Solicito tu ayuda poderosa, quiero que actúes con todo el poder que hay en Ti y me hagas libre de esas situaciones. Que pueda vivir para Ti, amarte y abrirme a nuevas experiencias de amor que me regalas a diario. Ayúdame a vivir comprometido con el bien y hacer lo que Tú quieres que  haga. Te suplico que hoy pueda dar testimonio de libertad y de fortaleza, y confiar plenamente en tu amor misericordioso. Amén.
(Píldoras de fe)
 
La Palabra de Dios
Lecturas del día
Primera Lectura: Gén 1,20—2,4a
 
Salmo: Sal 8,4-5.6-7.8-9
 
Santo Evangelio: Mc 7,1-13
En aquel tiempo, se reunieron junto a Jesús los fariseos, así como algunos escribas venidos de Jerusalén. Y vieron que algunos de sus discípulos comían con manos impuras, es decir no lavadas, -es que los fariseos y todos los judíos no comen sin haberse lavado las manos hasta el codo, aferrados a la tradición de los antiguos, y al volver de la plaza, si no se bañan, no comen; y hay otras muchas cosas que observan por tradición, como la purificación de copas, jarros y bandejas-.
Por ello, los fariseos y los escribas le preguntan: «¿Por qué tus discípulos no viven conforme a la tradición de los antepasados, sino que comen con manos impuras?». Él les dijo: «Bien profetizó Isaías de vosotros, hipócritas, según está escrito: ‘Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. En vano me rinden culto, ya que enseñan doctrinas que son preceptos de hombres’. Dejando el precepto de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres». Les decía también: «¡Qué bien violáis el mandamiento de Dios, para conservar vuestra tradición! Porque Moisés dijo: ‘Honra a tu padre y a tu madre y: el que maldiga a su padre o a su madre, sea castigado con la muerte’. Pero vosotros decís: ‘Si uno dice a su padre o a su madre: Lo que de mí podrías recibir como ayuda lo declaro "Korbán" -es decir: ofrenda-’, ya no le dejáis hacer nada por su padre y por su madre, anulando así la Palabra de Dios por vuestra tradición que os habéis transmitido; y hacéis muchas cosas semejantes a éstas».
 
Comentario:
Hoy contemplamos cómo algunas tradiciones tardías de los maestros de la Ley habían manipulado el sentido puro del cuarto mandamiento de la Ley de Dios. Aquellos escribas enseñaban que los hijos que ofrecían dinero y bienes para el Templo hacían lo mejor. Según esta enseñanza, sucedía que los padres ya no podían pedir ni disponer de estos bienes. Los hijos formados en esta conciencia errónea creían haber cumplido así el cuarto mandamiento, incluso haberlo cumplido de la mejor manera. Pero, de hecho, se trataba de un engaño.
«¡Qué bien violáis el mandamiento de Dios, para conservar vuestra tradición!» (Mc 7,9): Jesucristo es el intérprete auténtico de la Ley; por eso explica el justo sentido del cuarto mandamiento, deshaciendo el lamentable error del fanatismo judío.
«Moisés dijo: ‘Honra a tu padre y a tu madre’» (Mc 7,10): el cuarto mandamiento recuerda a los hijos las responsabilidades que tienen con los padres. Tanto como puedan, les han de prestar ayuda material y moral durante los años de la vejez y durante las épocas de enfermedad, soledad o angustia. Jesús recuerda este deber de gratitud.
El respeto hacia los padres (piedad filial) está hecho de la gratitud que les debemos por el don de la vida y por los trabajos que han realizado con esfuerzo en sus hijos, para que éstos pudieran crecer en edad, sabiduría y gracia. «Honra a tu padre con todo el corazón, y no te olvides de los dolores de tu madre. Recuerda que por ellos has nacido. ¿Qué les darás a cambio de lo que han hecho por ti?» (Sir 7,27-28).
El Señor glorifica al padre en sus hijos, y en ellos confirma el derecho de la madre. Quien honra al padre expía los pecados; quien glorifica a la madre es como quien reúne un tesoro (cf. Sir 3,2-6). Todos estos y otros consejos son una luz clara para nuestra vida en relación con nuestros padres. Pidamos al Señor la gracia para que no nos falte nunca el verdadero amor que debemos a los padres y sepamos, con el ejemplo, transmitir al prójimo esta dulce “obligación”.
* Rev. D. Iñaki BALLBÉ i Turu (Terrassa, Barcelona, España)
 
Santoral Católico:
San Tobías
Tobías significa: "Dios es bueno". Su historia se encuentra en el libro de la Biblia que lleva su nombre. Uno de los libros más agradables de la Sagrada Escritura es el de Tobías. Si abrimos nuestra Biblia, allá donde el índice nos dice que está el Libro de Tobías y nos dedicamos a leerlo, pasaremos ratos verdaderamente agradables en esta lectura. Tobías es reconocido por ser fiel observante de la ley del verdadero Dios desde la juventud, a pesar de la idolatría en cayeron sus padres. Se casó con Ana y tuvo un hijo también llamado Tobías. 
Para más información hacer clic acá.
© ACI Prensa – Catholic.net
 
Pensamiento del día
“Si puedo evitar que un corazón sufra, no viviré en vano. Si puedo aliviar el dolor de una vida o sanar una herida, no viviré en vano”
(Emily Dickinson - 1830-1886) 
 
Tema del día:
El maravilloso poder del agua bendita
Un amigo sacerdote me aseguró que innumerables católicos, aun de los más instruidos, no saben para lo que sirve el agua bendita. ¡Es una lástima! ¡Por eso no se benefician con este precioso instrumento instituido por la Iglesia para ayudarlos en prácticamente todas las circunstancias y dificultades de la vida!
 
Hay varias formas de usarla. La más común es santiguarse con ella. Otra es aspergirla (salpicarla) sobre sí mismo, sobre otras personas, lugares u objetos. Cualquier laico o laica puede hacer esto. Naturalmente, si lo hace un sacerdote tiene más valor.
 
¿Para qué sirve?
 
Su efecto más importante es alejar al demonio, que “ronda como león rugiente” , buscando toda especie de mal, como nos advierte San Pedro (I Pe 5,8). Los espíritus malignos, cuyas misteriosas y siniestras operaciones afectan incluso las actividades físicas del hombre, quieren ante todo inducirnos al pecado grave, que conduce al infierno. Para ello emplean todos los recursos.
 
A veces, por ejemplo, nos provocan un sinnúmero de molestias físicas o psicológicas. Otras veces provocan pequeños incidentes en nuestra vida diaria, causar enredos que parecen tener causas meramente naturales.
 
Por ejemplo, al momento de cumplir un deber, la persona siente un inexplicable malestar, un inesperado desánimo, un raro dolor de cabeza...
 
En ciertas oportunidades, sin motivo alguno, el marido se irrita repentinamente con la esposa, o viceversa, de eso surge una discusión y se rompe la paz del hogar. O si no, el padre o la madre se dejan llevar por un movimiento de impaciencia y reprenden duramente al hijo, en vez de amonestarlo con dulzura. El hijo se rebela, sale de casa. ¡Se creó un problema! Todo eso puede evitarse ahuyentando al demonio con una simple señal de la cruz hecha con agua bendita. Cuando sienta usted una irritación extraña, haga la prueba y ponga atención al efecto saludable que produce. Enseguida volverá la serenidad.
 
Además, el agua bendita es un sacramental que nos alcanza el perdón de los pecados veniales, puede librarnos de accidentes (tránsito, asaltos, caídas), y ayuda hasta a curar enfermedades. (Se llaman “sacramentales” los signos sagrados instituidos por la Iglesia cuyo fin es preparar a los hombres para recibir el fruto de los sacramentos y santificar las diversas circunstancias de la vida).
 
El agua bendita, como todo sacramental, nos invita en las diversas circunstancias del día a invocar el socorro del Divino Espíritu Santo, para el bien de nuestra alma y de nuestro cuerpo.
 
Otro beneficio muy interesante y poco conocido: se la puede usar eficazmente en provecho de personas que se encuentran distantes de nosotros. Y aún más, cada vez que la utilizamos para hacer la señal de la cruz por la intención de las almas del purgatorio, ellas son aliviadas en sus sufrimientos.
 
¿De dónde viene ese poder maravilloso?
 
Viene del hecho de ser un sacramental instituido por la Santa Iglesia Católica. El sacerdote bendice el agua como ministro de Dios, en nombre de la Iglesia y como su representante, seguro que nuestro Divino Salvador siempre la atenderá con benevolencia.
 
Es importante recordar que para que sea agua bendita debe ser bendecida por el sacerdote según el ceremonial prescrito por la Iglesia, en el “Ritual de Bendiciones” y en el propio “Misal Romano”.
 
¡Así que no se olvide!: Es muy conveniente llevar siempre consigo agua bendita para usar en cualquier circunstancia. Por ejemplo, santiguarse con ella al salir o entrar en la iglesia, en casa o en el lugar de trabajo; al iniciar una oración, un trámite, un viaje. Para alejar del hogar la influencia maléfica de los demonios, es muy aconsejable aspergir en la casa algunas gotas de vez en cuando. Esto puede hacerlo cualquier persona de la familia. Claro está que pedirle a un sacerdote que bendiga la casa es mucho mejor.
 
¡Por lo tanto, el agua bendita es siempre benéfica y eficaz!
 
”Pequeñas Semillitas” por email
Si lo deseas puedes recibir todos los días "Pequeñas Semillitas" por correo electrónico. Las suscripciones son totalmente gratuitas y solo tienes que solicitarlas dirigiéndote por e-mail a feluzul@gmail.com   
Recuerden, queridos lectores, que, desde el día mismo de nuestro Bautismo, todos somos discípulos y misioneros, y en tal condición tenemos que ayudar a llevar la Palabra y las divinas enseñanzas de Jesús a tantas personas como nos sea posible.
También pueden difundir “Pequeñas Semillitas” a través de las redes sociales en las que estamos presentes, como Facebook, Twitter, etc.
 
Meditaciones de “Pequeñas Semillitas”
El verdadero católico pone su confianza en Dios.
El verdadero católico conoce a Dios.
El verdadero católico se deja conocer por Dios.
El verdadero católico se alimenta del Evangelio.
El verdadero católico se alimenta de las Sagradas Escrituras.
El verdadero católico vive de los Sacramentos.
El verdadero católico ora.
El verdadero católico reza el Rosario.
El verdadero católico adora al Señor Jesucristo presente verdaderamente en la Sagrada Eucaristía.
El verdadero católico es caritativo.
El verdadero católico es prudente.
El verdadero católico dice la verdad.
El verdadero católico instruye a su hermano cuando éste se equivoca o se desvía.
El verdadero católico lee el Catecismo de la Iglesia Católica continuamente.
El verdadero católico busca dirección espiritual.
 
Recordando al Padre Natalio
Amigo de sí mismo
Por un sabio plan divino las personas somos distintas, tenemos diversas capacidades, diferentes inclinaciones y gustos. Es una realidad y tienes que aceptarla buenamente, sin dejarte alcanzar ni por la envidia del bien ajeno, ni por el orgullo de lo que te ha tocado. Es señal de madurez la aceptación serena de ti mismo con tus capacidades y carencias.
 
Padre mío, fuente de mi vida. Dame la gracia de hacerme amigo de mí mismo. Si alguna vez sentí vergüenza de ser como soy, te pido perdón a ti, autor de mi vida y mi ser. Perdona mi insensatez y mi ingratitud. Desde ahora quiero sentirme contento de ser como soy, feliz de ser como soy. Te alabo, te admiro y te agradezco por estas manos, este rostro, esta figura general. Bendito seas por haberme hecho tal como me hiciste. En tus manos me entrego, feliz de ser como soy.
 
Recuerda que los demás te necesitan tal como el Señor ha querido que fueras. No conviene que te pongas una máscara o representes una comedia. Puedes decirte a ti mismo: “voy a llevarles algo especial, pues nunca se encontraron ni se encontrarán con alguien como yo; soy una persona única salida de las manos de Dios”. Dios te valora, hazlo tú también.
(P. Natalio)
 
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)
 
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INSTAGRAM: FELIPE DE URCA
 

2 comentarios:

  1. En ocasiones, siento que escucho con el alma respuestas a preocupaciones que tengo, situaciones de la vida sobre las que debo actuar. Las identifico y me tranquilizan.
    José Luis Sevillano -España

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  2. Gracias doc Felipe por tu docencia en la fe. Que Maria te cuide. Maria isabel. Parroquia Espíritu Santo

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