Pequeñas Semillitas 0990

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Número 0990 ~ Miércoles 10 de Febrero de 2010
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)

Hola !!!
Si tienes algún deseo oculto de realizar algún sueño, empieza hoy mismo tu tarea de realizarlo. Enfoca tu mente en este deseo y afirma positivamente que se va a realizar. No alimentes dudas en tu corazón, sino repite siempre: ¡Todo lo puedo con la gracia de Dios! Mentaliza este sueño como si ya se hubiera realizado. Verás que, con el tiempo, lograrás lo que deseas. Si muchos vencen en la vida, tú también serás capaz de vencer.
Irán Ibrahím Jacob

La Palabra de Dios:

Evangelio del día

En aquel tiempo, Jesús llamó a la gente y les dijo: «Oídme todos y entended. Nada hay fuera del hombre que, entrando en él, pueda contaminarle; sino lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre. Quien tenga oídos para oír, que oiga».
Y cuando, apartándose de la gente, entró en casa, sus discípulos le preguntaban sobre la parábola. Él les dijo: «¿Así que también vosotros estáis sin inteligencia? ¿No comprendéis que todo lo que de fuera entra en el hombre no puede contaminarle, pues no entra en su corazón, sino en el vientre y va a parar al excusado?» —así declaraba puros todos los alimentos—. Y decía: «Lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre. Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen las intenciones malas: fornicaciones, robos, asesinatos, adulterios, avaricias, maldades, fraude, libertinaje, envidia, injuria, insolencia, insensatez. Todas estas perversidades salen de dentro y contaminan al hombre».
(Marcos 7, 14-23)

Comentario
Hoy Jesús nos enseña que todo lo que Dios ha hecho es bueno. Es, más bien, nuestra intención no recta la que puede contaminar lo que hacemos. Por eso, Jesucristo dice: «Nada hay fuera del hombre que, entrando en él, pueda contaminarle; sino lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre» (Mc 7,15). La experiencia de la ofensa a Dios es una realidad. Y con facilidad el cristiano descubre esa huella profunda del mal y ve un mundo esclavizado por el pecado. La misión que Jesús nos encarga es limpiar —con ayuda de su gracia— todas las contaminaciones que las malas intenciones de los hombres han introducido en este mundo.
El Señor nos pide que toda nuestra actividad humana esté bien realizada: espera que en ella pongamos intensidad, orden, ciencia, competencia, afán de perfección, no buscando otra mira sino restaurar el plan creador de Dios, que todo lo hizo bueno para provecho del hombre: «Pureza de intención. —La tendrás, si, siempre y en todo, sólo buscas agradar a Dios» (San Josemaría).
Sólo nuestra voluntad puede estropear el plan divino y hace falta vigilar para que no sea así. Muchas veces se meten la vanidad, el amor propio, los desánimos por falta de fe, la impaciencia por no conseguir los resultados esperados, etc. Por eso, nos advertía san Gregorio Magno: «No nos seduzca ninguna prosperidad halagüeña, porque es un viajero necio el que se para en el camino a contemplar los paisajes amenos y se olvida del punto al que se dirige».
Convendrá, por tanto, estar atentos en el ofrecimiento de obras, mantener la presencia de Dios y considerar frecuentemente la filiación divina, de manera que todo nuestro día —con oración y trabajo— tome su fuerza y empiece en el Señor, y que todo lo que hemos comenzado por Él llegue a su fin.
Podemos hacer grandes cosas si nos damos cuenta de que cada uno de nuestros actos humanos es corredentor cuando está unido a los actos de Cristo.
Rev. D. Norbert ESTARRIOL i Seseras (Lleida, España)

Santoral Católico
Santa Escolástica, Virgen

Hermana de San Benito, se consagró a Dios desde su más tierna edad. Mientras su hermano residió en Monte Casino, ella se hallaba en Plombariola, fundando y gobernando un monasterio.

Tenía la costumbre de visitar a San Benito una vez al año y como no estaba permitido que entrar al monasterio, él salía a su encuentro para llevarla a una casa de confianza, donde los hermanos pasaban la velada orando, cantando himnos de alabanza a Dios y discutiendo asuntos espirituales. Sobre la última visita, San Gregorio hace una notable descripción, en la cual, la santa presintiendo que no volvería ver más a su hermano, le rogó que no partiera esa noche sino al día siguiente, pero San Benito se sintió incapaz de romper las reglas de su monasterio.

Entonces, Santa Escolástica apeló a Dios con una ferviente oración para que interviniera en su ayuda, y acto seguido, estalló una fuerte tormenta que impidió que su hermano regresara al monasterio. Los dos santos pasaron la noche hablando de las cosas santas y de asuntos espirituales. Tres días después, la santa murió, y su hermano que se encontraba absorto en la oración tuvo la visión del alma de su hermana ascendiendo al cielo en forma de paloma.

Pensamiento

"La respuesta suave, calma la ira, así como el aceite, calma las olas.
Esta respuesta suave, casi en voz baja, lenta y buena,
es una de las empresas más difíciles de este mundo"
Noel Clarasó

Tema del día:

La edad que tengo

Frecuentemente me preguntan que cuántos años tengo... ¡Qué importa éso!

Tengo la edad que quiero y siento. La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso. Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso, o lo desconocido. Tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la convicción de mis deseos.

¡Qué importa cuántos años tengo! No quiero pensar en ello. Unos dicen que ya soy viejo y otros que estoy en el apogeo.

Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice, sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte.

Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso, para hacer lo que quiero, para reconocer yerros viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos. Ahora no tienen por qué decir: Eres muy joven... no lo lograrás.

Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, pero con el interés de seguir creciendo. Tengo los años en que los sueños se empiezan a acariciar con los dedos, y las ilusiones se convierten en esperanza.

Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada, ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada. Y otras un remanso de paz, como el atardecer en la playa.

¿Qué cuántos años tengo? No necesito con un número marcar, pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos, las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones rotas... Valen mucho más que eso.

¡Qué importa si cumplo veinte, cuarenta, o sesenta! Lo que importa es la edad que siento.

Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos. Para seguir sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis anhelos.

¿Qué cuantos años tengo? ¡Eso a quién le importa!

Tengo los años necesarios para perder el miedo y hacer lo que quiero y siento.

José Saramago
Premio Nobel Litaratura 1998

Ausencia temporaria

Informo a los lectores de "Pequeñas Semillitas" que a partir del día viernes 12 de este mes de febrero, tomaré un breve período de descanso de aproximadamente doce días, por lo que este boletín no se publicará en ese lapso.
También agradezco sinceramente los muchos mensajes que están llegando desde diversas ciudades y países donde hay lectores de la página, augurándome un buen descanso.

Meditación breve

Hay dos maneras de empezar. Podemos empezar otra vez y repetir potencialmente los mismos errores, o podemos empezar en forma diferente. Mucha gente empieza de nuevo, pero los que viven una vida espiritual han aprendido a empezar de una nueva manera. Obviamente, esto debe ocurrir, porque empezar de nuevo con un método viejo e infructuoso produce según su clase.
Al obtener el conocimiento de sí mismo, hay que hacer preguntas profundas. ¿Hay algunas experiencias improductivas y limitativas en tu vida que pueden ser clasificadas como ciclos? Por ejemplo, ¿continúan estorbándote las relaciones humanas perjudiciales? ¿Caminas sin rumbo de empleo en empleo? ¿Parece que nunca encuentras tu dirección, o lugar perfecto?
¿Puedes identificar algunos ciclos limitativos en tu vida? ¿Qué hecho inquietante está presente hoy que ha estado presente en el pasado?

Pedidos de oración

Pedimos oración por la salud de Mariano C. que tiene 23 años y vive en Buenos Aires, Argentina, a quien se le ha detectado un tumor y está con quimioterapia para luego poder operar y extirparlo. Que Jesús Misericordioso lo ayude a recuperar su plena salud.


Desde México, nos escribe Rosa Elena L. A. para pedir oraciones por la inseguridad que se vive en su tierra. Que la Virgen de Guadalupe interceda ante Jesús para que se pueda vivir con más seguridad en todas nuestras ciudades tan convulsionadas en estos tiempos.


Pedimos oración por Armando, que vive en el pueblo Los Dolores, Cartagena, Murcia, y padece de una afección en el cerebelo por la cual está perdiendo la visión aceleradamente, sumado a trastornos del equilibrio derivados del mismo problema. Este viernes se realizará una Resonancia Magnética como paso previo para decidir el tratamiento. Invocamos a la Virgen de Lourdes para que lo proteja e interceda por él para que su situación médica pueda resolverse con bien.


Pedimos oración por Herson Dagoberto P. que vive en El Salvador, tiene 24 años y debe ser operado de hernia inguinal mañana. Que el Señor lo acompañe para que todo salga bien y se recupere pronto.


Nuestra lectora y amiga Raquel L. de Santa Fe, Argentina, nos pide oraciones por su hijo Javier, que está radicado en USA, donde trabaja y estudia, y el día 16 de este mes tiene que realizar un importante trámite judicial. Que el Buen Juesús lo acopañe y permita que todo se resuelva favorablemente.


Pedimos oración por el eterno descanso del alma de María del Carmen S., de Rafaela, Argentina, que partió al encuentro del Señor el pasado 8 de febrero. Paz para ella y consuelo para sus familiares y amigos.


Pedimos oración por el niño Iván Ezequiel B. de 8 años de edad, que tiene un tumor en la garganta y será operado en un Hospital de Buenos Aires, Argentina. Que Jesús esté con él y guíe las manos de los cirujanos para que puedan curarlo.


Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.

Ven Espíritu Santo...!

Padre Omnipotente, ten piedad de nosotros.
Jesús Hijo Eterno del Padre, sálvanos.
Jesús Redentor del mundo, sálvanos.
Espíritu del Padre y del Hijo y amor
infinito de uno y otro, santifícanos.
Trinidad Santísima, escúchanos.
Espíritu Santo que procedes
del Padre y del Hijo, ven a nosotros.
Espíritu Santo que sos igual
al Padre y al Hijo, ven a nosotros.
Promesa de Dios Padre,
ven a nuestras almas.
Don de Dios Altísimo,
ven a nuestras almas.
Rayo de Luz celestial, ven.
Autor de todo Bien, ven.
Fuego abrasador. Caridad ardiente.
Fuego Espiritual.
Espíritu de Fe, Esperanza y Caridad,
Espíritu de Sabiduría y Entendimiento,
Espíritu de Consejo y Fortaleza,
Espíritu de Ciencia y Piedad,
Espíritu de Temor del Señor,
Espíritu de Paciencia,
Espíritu de Bondad y Misericordia,
Espíritu de Fidelidad y de Verdad,
Espíritu de Santidad y de Justicia,
Espíritu de Gracia y Oración,
Espíritu de Paz y de Dulzura,
Espíritu de Modestia y de Inocencia,
Espíritu Consolador y Santificador,
Espíritu que gobiernas la Iglesia,
Espíritu que llenas el universo,
Espíritu de adopción de los hijos de Dios,
Espíritu Santo, inspíranos horror al pecado,
Espíritu Santo, ven a renovar la faz de la tierra,
Espíritu Santo, derrama tus luces en nuestras inteligencias,
Espíritu Santo, graba tu ley en nuestros corazones,
Espíritu Santo, abrásanos en el fuego de tu amor,
Espíritu Santo, ábrenos el tesoro de tu gracia,
Espíritu Santo, enséñanos a orar como se debe,
Espíritu Santo, ilumínanos com tus inspiraciones,
Espíritu Santo, condúcenos por el camino de la salvación,
Espíritu Santo, concédenos la única ciencia necesaria,
Espíritu Santo, inspíranos a la práctica del bien,
Espíritu Santo, danos el mérito de las virtudes,
Espíritu Santo, haz que perseveremos en la justicia,
Espíritu Santo, que vos mismo seas nuestra recompensa.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Así sea.

P. Florentín Brusa cmf

Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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