lunes, 31 de agosto de 2020

Pequeñas Semillitas 4432

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 15 - Número 4432 ~ Lunes 31 de Agosto de 2020
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina) 
Alabado sea Jesucristo…
Cuentan que un día, Agustín paseaba por la orilla de una playa reflexionando sobre el Misterio de la Santísima Trinidad. Su mente era incapaz de comprenderlo. En eso vio a un niño que estaba, con una pequeña conchita, sacando el agua del mar y echándola en un pocito en la arena.
¿Qué haces niño? – preguntó Agustín.
¿No lo ves?, estoy sacando toda el agua del mar para vaciarla en este pocito – dijo el niño.
Pero… ¿no te das cuenta que eso es imposible? – replicó Agustín.
Agustín – le dijo el niño – es mucho más fácil que yo logre hacer esto, que tú comprendas el Misterio de la Santísima Trinidad.
En efecto, el Niño Jesús se le había aparecido.
 
¡Buenos días!
Si pudiéramos cambiar...
Con frecuencia Dios, por sus profetas, invitó a Israel a revisar su estilo de vida para hacer los necesarios reajustes que exigía la alianza solemnemente pactada. La Palabra de Dios sigue invitándonos a cambiar para bien, y nos motiva con sabiduría a dar pasos de crecimiento espiritual. Ábrete a su mensaje y aprovecha su fuerza renovadora.
 
Si pudiéramos cambiar la mentira por la verdad. El recibir por el dar. El odio por el perdón. La duda por la fe. La envidia por la aceptación. La intolerancia por la paciencia. La dureza por la flexibilidad. El miedo por el coraje. El abandonar por el perseverar. Las palabras de más por la prudencia. La soberbia por la humildad. La burla por la piedad. El conformarse por el progresar. El ocio por el trabajo. Los sueños por su realización. La ambición desmedida por el honor. Si pudiéramos cambiar esto, sentiríamos más cerca que nunca la presencia de Dios en nuestro corazón.
 
“Si yo cambiara mi manera de pensar hacia otros, me sentiría sereno. Si yo cambiara mi manera de actuar ante los demás, los haría felices. Si yo aceptara a todos como son, sufriría menos. Si yo me aceptara tal cual soy, quitándome mis defectos... ¡Cuánto mejoraría mi hogar y mi entorno! Si yo cambiara... ¡Cambiaría el mundo!”. Anímate a dar pasos positivos.
* Enviado por el P. Natalio
 
La Palabra de Dios
Lecturas del día
Primera Lectura: 1 Cor 2,1-5
 
Salmo: Sal 119 (118):97-102
 
Santo Evangelio: Lc 4,16-30
En aquel tiempo, Jesús se fue a Nazaret, donde se había criado y, según su costumbre, entró en la sinagoga el día de sábado, y se levantó para hacer la lectura. Le entregaron el volumen del profeta Isaías y desenrollando el volumen, halló el pasaje donde estaba escrito: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor».
Enrollando el volumen lo devolvió al ministro, y se sentó. En la sinagoga todos los ojos estaban fijos en Él. Comenzó, pues, a decirles: «Hoy se cumple esta escritura que acabáis de oír». Y todos daban testimonio de Él y estaban admirados de las palabras llenas de gracia que salían de su boca. Y decían: «¿No es éste el hijo de José?». Él les dijo: «Seguramente me vais a decir el refrán: ‘Médico, cúrate a ti mismo’. Todo lo que hemos oído que ha sucedido en Cafarnaúm, hazlo también aquí en tu patria». Y añadió: «En verdad os digo que ningún profeta es bien recibido en su patria. Os digo de verdad: muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando se cerró el cielo por tres años y seis meses, y hubo gran hambre en todo el país; y a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda de Sarepta de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, y ninguno de ellos fue purificado sino Naamán, el sirio».
Oyendo estas cosas, todos los de la sinagoga se llenaron de ira; y, levantándose, le arrojaron fuera de la ciudad, y le llevaron a una altura escarpada del monte sobre el cual estaba edificada su ciudad, para despeñarle. Pero Él, pasando por medio de ellos, se marchó.
 
Comentario:
Hoy, «se cumple esta escritura que acabáis de oír» (Lc 4,21). Con estas palabras, Jesús comenta en la sinagoga de Nazaret un texto del profeta Isaías: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido» (Lc 4,18). Estas palabras tienen un sentido que sobrepasa el concreto momento histórico en que fueron pronunciadas. El Espíritu Santo habita en plenitud en Jesucristo, y es Él quien lo envía a los creyentes.
Pero, además, todas las palabras del Evangelio tienen una actualidad eterna. Son eternas porque han sido pronunciadas por el Eterno, y son actuales porque Dios hace que se cumplan en todos los tiempos. Cuando escuchamos la Palabra de Dios, hemos de recibirla no como un discurso humano, sino como una Palabra que tiene un poder transformador en nosotros. Dios no habla a nuestros oídos, sino a nuestro corazón. Todo lo que dice está profundamente lleno de sentido y de amor. La Palabra de Dios es una fuente inextinguible de vida: «Es más lo que dejamos que lo que captamos, tal como ocurre con los sedientos que beben en una fuente» (San Efrén). Sus palabras salen del corazón de Dios. Y, de ese corazón, del seno de la Trinidad, vino Jesús —la Palabra del Padre— a los hombres.
Por eso, cada día, cuando escuchamos el Evangelio, hemos de poder decir como María: «Hágase en mí según tu palabra» (Lc 1,38); a lo que Dios nos responderá: «Hoy se cumple esta escritura que acabáis de oír». Ahora bien, para que la Palabra sea eficaz en nosotros hay que desprenderse de todo prejuicio. Los contemporáneos de Jesús no le comprendieron, porque lo miraban sólo con ojos humanos: «¿No es este el hijo de José?» (Lc 4,22). Veían la humanidad de Cristo, pero no advirtieron su divinidad. Siempre que escuchemos la Palabra de Dios, más allá del estilo literario, de la belleza de las expresiones o de la singularidad de la situación, hemos de saber que es Dios quien nos habla.
* Rev. D. David AMADO i Fernández (Barcelona, España)
 
Santoral Católico:
San Ramón Nonato
Cardenal
Nació en Portell, provincia de Lérida en España, el año 1200. Se le llama «Nonato» porque lo extrajeron del seno de su madre que acababa de morir. En 1224 ingresó en la Orden de la Merced (Mercedarios), siendo uno de los primeros compañeros de san Pedro Nolasco que la había fundado para la redención de cautivos y la formación religiosa y moral de los esclavos de los territorios ocupados por los árabes. Después de trabajar un tiempo en España, marchó a Argelia, donde se quedó como rehén y padeció mucho, a la vez que confortaba a sus compañeros de prisión. Vuelto a Cataluña y ya famoso, el papa Gregorio IX, en 1239, lo creó cardenal y lo llamó a Roma como consejero suyo. Emprendió el viaje, pero pronto unas fiebres violentas que le causaron la muerte el 31 de agosto de 1240 en Cardona (Barcelona).
Para más información hacer clic acá.
* Directorio Franciscano – Aciprensa – Catholic.net
 
Pensamiento del día
“No pienses, por tanto, que el pan y el vino eucarísticos son elementos simples y comunes: son nada menos que el cuerpo y la sangre de Cristo, de acuerdo con la afirmación categórica del Señor; y aunque los sentidos te sugieran lo contrario, la fe te certifica y asegura la verdadera realidad. Así, al pasar su cuerpo y su sangre a nuestros miembros, nos convertimos en portadores de Cristo. Y como dice el bienaventurado Pedro, nos hacemos partícipes de la naturaleza divina.”
(San Cirilo de Jerusalén)
 
Tema del día:
Los colores litúrgicos
La diversidad de colores en las vestiduras sagradas pretende expresar con más eficacia, aun exteriormente, tanto el carácter propio de los misterios de la fe que se celebran, como el sentido progresivo de la vida cristiana en el transcurso del año litúrgico. Así los cristianos oran con sentimientos diversos evocados también por los colores de las vestiduras litúrgicas.
 
🌞 Blanco
Se usa en tiempo pascual, tiempo de Navidad, fiestas del Señor, de la Virgen, de los ángeles, y de los santos no mártires. Es el color del gozo pascual, de la luz y de la vida. Expresa alegría y pureza.
 
🌞 Rojo
Se usa el domingo de Ramos, el Viernes Santo, Pentecostés, fiesta de los apóstoles y santos mártires. Significa el don del Espíritu Santo que nos hace capaces de testimoniar la propia fe aún hasta derramar la sangre en el martirio. Es el color de la sangre y del fuego.
 
🌞 Verde
Se usa en el tiempo ordinario (período que va desde el Bautismo del Señor hasta Cuaresma y desde Pentecostés hasta Adviento). Expresa la juventud de la Iglesia, el resurgir de una vida nueva. Se usa en los oficios y Misas del «ciclo anual».
 
🌞 Morado
Indica la esperanza, el ansia de encontrar a Jesús, el espíritu de penitencia; por eso se usa en Adviento, Cuaresma y liturgia de difuntos. Es signo de penitencia y austeridad.
 
Colores menos usados
 
🌞 Dorado o Plateado
Subraya la importancia de las grandes fiestas. En los días más solemnes pueden emplearse ornamentos más nobles, aunque no sean del color del día.
 
🌞 Rosa
Subraya el gozo por la cercanía del Salvador el Tercer Domingo de Adviento, e indica una pausa en el rigor penitencial el Cuarto Domingo de Cuaresma. Es símbolo de alegría, pero de una alegría efímera.
 
🌞 Azul o Celeste
Indica las fiestas marianas, sobre la Inmaculada Concepción.
 
🌞 Negro
Expresión de duelo.
 
Todos estos colores deben estar marcados también en nuestro corazón:
 
Debemos vivir con el vestido blanco de la pureza, de la inocencia. Reconquistar la pureza con nuestra vida santa.
Debemos vivir con el vestido rojo del amor apasionado a Cristo, hasta el punto de estar dispuestos a dar nuestra vida por Cristo, como los mártires.
Debemos vivir el color verde de la esperanza teologal, en estos momentos duros de nuestro mundo, tendiendo siempre la mirada hacia la eternidad.
Debemos vivir el vestido morado o violeta, pues la penitencia, la humildad y la modestia deben ser alimento y actitudes de nuestra vida cristiana.
Debemos vivir el vestido rosa, solo de vez en cuando, pues toda alegría humana es efímera y pasajera.
Debemos vivir con el vestido azul celeste mirando continuamente el cielo, aunque tengamos los pies en la tierra.
(Fuente: Catholic.net)
 
Meditaciones de “Pequeñas Semillitas”
El siglo XX está lleno de apariciones marianas: desde la más conocida en Fátima, a las menos publicitadas de Kibeho (Ruanda) y la de Akita (Japón). ¿Por qué la Virgen María está tan presente en medio de nosotros desde el siglo XX?
El padre René Laurentin -nacido el 19 de octubre de 1917, seis días después de la última aparición de la Virgen María en Fátima- ha viajado por el mundo entero para investigar estos hechos sobrenaturales. Él afirma que estas numerosas apariciones son un llamado urgente a nuestro mundo que corre hacia la autodestrucción.
"Hay situaciones muy graves en el mundo de hoy. Así que hay muchas razones para que la Virgen María se aparezca y venga a advertirnos", dijo. "El mundo ha rechazado a Dios. Se libra tranquilamente al pecado. Es como si tuviéramos que cortar las ramas del árbol sobre el que estamos posados.
Hoy estamos viviendo las consecuencias de esto. El mundo se destruye como consecuencia del pecado; no podemos salir de esto por nosotros mismos. La Madre de Dios nos llama a volver a lo esencial y nos invita a la oración y a la conversión. Nos dice que Dios existe y que debemos volver a Él.
 
Pedidos de oración
Pedimos oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas, monjas, religiosas, novicias, catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones; por el triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María;  por la conversión de todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por los cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo, el hambre y la pobreza; por los niños con cáncer y otras patologías graves; por los jóvenes, especialmente los que han caído en las drogas o cualquier tipo de adicción, por las víctimas de trata, por el drama de los refugiados del Mediterráneo; por los presos políticos y la falta de libertad en muchos países del mundo; por las víctimas de catástrofes naturales; por la unión de las familias, por lo no nacidos, por la fidelidad de los matrimonios y por más inclinación de los jóvenes hacia este sacramento; por el aumento de las vocaciones sacerdotales y religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio. En este tiempo pedimos especiales oraciones por todas las personas que en diversos países del mundo han sido afectadas por el coronavirus, rogando que el Sagrado Corazón de Jesús nos proteja ante esta terrible pandemia, y que con fe y esperanza, y siguiendo las indicaciones médicas de prevención, el riesgo de contagio vaya disminuyendo en todo el planeta.
 
Pedimos oración por el eterno descanso del alma de Rosalía C., de 81 años, de la provincia de Santa Fe, Argentina, que hace pocos días ha partido de este mundo para llegar a la presencia del Padre Celestial.
 
Pedimos oración para Julián, de 49 años de edad, residente en Canadá, con cuadro ansioso depresivo y crisis de pánico. Además tiene problemas serios en la visión y los médicos consideran que hay un fuerte componente emocional. Oramos para que acepte la posibilidad de un tratamiento psicológico y le resulte efectivo. También ponemos en nuestras plegarias a su mamá, Josefina, de 66 años de edad, que vive la comprensible preocupación por la situación de su hijo.
 
Pedimos oración para la familia Alvarez de Buenos Aires, Argentina, contagiados con COVID-19, rogando al Padre de los Cielos que se recuperen pronto.
 
Continuamos unidos en oración por medio del rezo del Santo Rosario poniendo en Manos de Nuestra Madre Bendita todas nuestras preocupaciones, alegrías y necesidades, poniendo al mundo entero en Manos de nuestra Madre y pidiéndole a Ella paz para el mundo. Al rezar por la paz, rezamos por todo, por la paz en el mundo, en los corazones, porque la violencia sea desterrada, por la paz para los niños que están en peligro de ser abortados. Paz para los jóvenes que no encuentran el camino, paz para los deprimidos. Paz para los que no han tenido la dicha de conocer al Amor. En fin rezamos por la paz, y sigamos haciéndolo.
Tú quisiste, Señor, que tu hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia. Escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos y conceda a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.
 
¡Hasta mañana! con Madre Teresa
Agosto 31
Es posible que en tu apartamento o en la casa de al lado, viva un ciego que se alegraría de que le hicieras una visita para leerle el periódico. Puede ser que haya una familia que esté necesitada de alguna cosa sin importancia a tus ojos, alguna cosa tan simple como el hecho de guardarle su hijo durante media hora. Hay muchísimas cosas que son tan pequeñas, que mucha gente no se da cuenta de ellas.
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)
 
🌸
BLOG ”PEQUEÑAS SEMILLITAS
🌸
FACEBOOK de “FELIPE DE URCA”
🌸
FACEBOOK de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
🌸
TWITTER de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
🌸
INSTAGRAM: FELIPE DE URCA
🌸
~AMDG~

domingo, 30 de agosto de 2020

Pequeñas Semillitas 4431

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 15 - Número 4431 ~ Domingo 30 de Agosto de 2020
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
El domingo pasado contemplábamos la alabanza que Jesús hizo a san Pedro por su confesión: había acertado al decir que Jesús era hijo de Dios porque había seguido la sugerencia del Padre. Pero en el pasaje inmediatamente siguiente, en el de hoy, Jesús rechaza a Pedro, le rechaza como si fuera satanás, como rechazó al diablo aquel día de las tentaciones, porque razonaba humanamente y pretendía, con buena intención, apartarle de la Cruz, de la Redención. Ver las cosas como las ve Dios, he ahí la cuestión; y en concreto conocer el sentido de la vida tal como Dios la ve y la desea: la renuncia al propio yo, la mortificación del egoísmo, como medio para hacer la voluntad de Dios.
La renuncia por el reino de los cielos, el sacrificio que trae consigo la vida, es una de las grandes paradojas del cristianismo. Que la buena vida, la vida que hace verdaderamente feliz a uno mismo y a los demás (y por eso la quiere Dios para nosotros) es la que se ve con los ojos de Dios, no precisamente la que se entiende con los ojos humanos, la que prefiere el vicio a la virtud.
(P. Jesús Martínez García)
 
¡Buenos días!
Un amigo es…
¿Qué es la amistad? Es... una puerta que se abre, una mano extendida, una sonrisa que te alienta, una mirada que te comprende, una lágrima que se une a tu dolor, una palabra que te anima y una crítica que te mejora. Es... un abrazo de perdón, un encuentro que te regocija, un favor sin recompensa, un dar sin exigir, una entrega sin calcular y un esperar... sin cansancio.
 
Un amigo es el que siendo leal y sincero, te comprende El que te acepta como eres y tiene fe en ti. El que sin envidia reconoce tus valores, te estimula y elogia sin adularte. El que te ayuda con desinterés y no abusa de tu bondad. El que con sabios consejos te ayuda a construir y pulir tu personalidad. El que goza con tus alegrías. El que sin herirte te aclara lo que entendiste mal, o te saca del error. El que levanta tu ánimo cuando estás caído. El que te perdona con generosidad, olvidando tu ofensa. El que ve en ti un ser humano con alegrías, esperanzas, debilidades y luchas. "Los amigos son la manera como Dios nos cuida”.
 
“La verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido” (R. Tagore). “Para conservar un amigo tres cosas son necesarias: honrarlo cuando esté presente, valorarlo cuando esté ausente y ayudarlo cuando lo necesite” (Proverbio italiano). Dios te conceda el tesoro de uno o más amigos.
* Enviado por el P. Natalio
 
La Palabra de Dios
Lecturas del día
Primera Lectura: Jer 20,7-9
 
Salmo: Sal 63 (62):2-6, 8-9    
 
Segunda Lectura: Rom 12,1-2
 
Santo Evangelio: Mt 16,21-27
En aquel tiempo, empezó Jesús a explicar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén y padecer allí mucho por parte de los senadores, sumos sacerdotes y letrados y que tenía que ser ejecutado y resucitar al tercer día. Pedro se lo llevó aparte y se puso a increparlo: «¡No lo permita Dios, Señor! Eso no puede pasarte». Jesús se volvió y dijo a Pedro: «Quítate de mi vista, Satanás, que me haces tropezar; tú piensas como los hombres, no como Dios».
Entonces dijo a los discípulos: «El que quiera venirse conmigo que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga. Si uno quiere salvar su vida, la perderá; pero el que la pierda por mí, la encontrará. ¿De qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero, si malogra su vida? ¿O qué podrá dar para recobrarla? Porque el Hijo del Hombre vendrá entre sus ángeles, con la gloria de su Padre, y entonces pagará a cada uno según su conducta»
 
Comentario:
Hoy, contemplamos a Pedro —figura emblemática y gran testimonio y maestro de la fe— también como hombre de carne y huesos, con virtudes y debilidades, como cada uno de nosotros. Hemos de agradecer a los evangelistas que nos hayan presentado la personalidad de los primeros seguidores de Jesús con realismo. Pedro, quien hace una excelente confesión de fe —como vemos en el Evangelio del Domingo XXI— y merece un gran elogio por parte de Jesús y la promesa de la autoridad máxima dentro de la Iglesia (cf. Mt 16,16-19), recibe también del Maestro una severa amonestación, porque en el camino de la fe todavía le queda mucho por aprender: «Quítate de mi vista, Satanás, que me haces tropezar; tú piensas como los hombres, no como Dios» (Mt 16,23).
Escuchar la amonestación de Jesús a Pedro es un buen motivo para hacer un examen de conciencia acerca de nuestro ser cristiano. ¿Somos de verdad fieles a la enseñanza de Jesucristo, hasta el punto de pensar realmente como Dios, o más bien nos amoldamos a la manera de pensar y a los criterios de este mundo? A lo largo de la historia, los hijos de la Iglesia hemos caído en la tentación de pensar según el mundo, de apoyarnos en las riquezas materiales, de buscar con afán el poder político o el prestigio social; y a veces nos mueven más los intereses mundanos que el espíritu del Evangelio. Ante estos hechos, se nos vuelve a plantear la pregunta: «¿De qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero, si malogra su vida?» (Mt 16,26).
Después de haber puesto las cosas en claro, Jesús nos enseña qué quiere decir pensar como Dios: amar, con todo lo que esto comporta de renuncia por el bien del prójimo. Por esto, el seguimiento de Cristo pasa por la cruz. Es un seguimiento entrañable, porque «con la presencia de un amigo y capitán tan bueno como Cristo Jesús, que se ha puesto en la vanguardia de los sufrimientos, se puede sufrir todo: nos ayuda y anima; no falla nunca, es un verdadero amigo» (Santa Teresa de Ávila). Y…, cuando la cruz es signo del amor sincero, entonces se convierte en luminosa y en signo de salvación.
* Rev. D. Joaquim MESEGUER García (Rubí, Barcelona, España)
 
Palabras de San Juan XXIII
"La mujer ha adquirido una conciencia cada día más clara de su propia dignidad humana. Por ello no tolera que se la trate como una cosa inanimada o un mero instrumento; exige, por el contrario, que, tanto en el ámbito de la vida doméstica como en el de la vida pública, se le reconozcan los derechos y obligaciones propios de la persona humana".
 
Predicación del Evangelio:
No es camino de rosas
Aquel Pedro que fue inspirado por el mismo Jesús para su profesión de fe “Tú eres el hijo de Dios” hoy es puesto sobre las cuerdas: tú no piensas como Dios, piensas como los hombres.
 
La fe es gracia y es regalo. Es un privilegio que Dios nos concede. Desde esa luz, que es la fe, podemos alumbrar todo lo que acontece en torno a nosotros e, incluso, nuestras mismas personas.
 
Como a Pedro, al mundo de hoy, no le seduce demasiado el sufrimiento. Preferimos una fe de bizcocho a una fe probada; una fe de gloria a una fe de calvario; una fe de sentimientos a una fe de conversión, una fe con camino llano más que aquella otra expresada en camino angosto o empedrado duro.
 
Pensar como Dios exige optar por lo que el mundo nos oculta. Pensar como los hombres puede llevarnos a perdernos en unos túneles sin salida, a caer en unos pozos sin fondo.
 
El camino que Jesús nos propone, no es el de los atajos que el discurso materialista nos vende machaconamente. No es aquel del escaparate del triunfo, sino aquel otro que se fragua en el escenario del servicio. No es el de la apariencia, sino el trabajar sin desmayo allá donde nadie oposita.
 
Para que brille el sol es necesario que el cielo esté limpio de nubes. Jesús, en el evangelio de este domingo, nos advierte que para que destelle Dios con toda su magnitud en nosotros, no hemos de ser obstáculo. El sufrimiento y la cruz, o dicho de otra manera, las contrariedades, oposición, zancadillas, sinsabores, incomprensiones, etc., lejos de rehusarlas hemos de aprender a valorarlas y encajarlas desde ese apostar por Jesús de Nazaret en un contexto social donde, a veces, se oyen más las voces de los enemigos de Dios que la labor transformadora de aquellos que creemos en El.
 
¿A quién le apetece un camino con espinas? Jesús nos lo adelanta. Y los primeros testigos del evangelio (apóstoles y mártires) lo vivieron en propia carne: ser de Cristo implica estar abierto a lo que pueda venir. Incluso dar la vida por Él.
 
Frente al único pensamiento que algunos pretenden imponernos (que puede distar mucho del pensamiento que Dios tiene sobre el mundo) no cabe sino ser fuertes para abrazar la cruz cuando sea necesario.
(Padre Javier Leoz)
 
Poesía
¿De qué quiere usted la imagen?
 
¿De qué quiere Usted la imagen?
Preguntó el imaginero:
Tenemos santos de pino,
hay imágenes de yeso,
mire este Cristo yacente,
madera de puro cedro,
depende de quién la encarga,
una familia o un templo,
o si el único objetivo
es ponerla en un museo.
 
Déjeme, pues, que le explique,
lo que de verdad deseo.
Yo necesito una imagen
de Jesús El Galileo,
que refleje su fracaso
intentando un mundo nuevo,
que conmueva las conciencias
y cambie los pensamientos.
Yo no la quiero encerrada
en iglesias y conventos.
 
Ni en casa de una familia
para presidir sus rezos.
No es para llevarla en andas
cargada por costaleros.
Yo quiero una imagen viva
de un Jesús Hombre sufriendo,
que ilumine a quien la mire
el corazón y el cerebro.
 
Que den ganas de bajarlo
de su cruz y del tormento,
y quien contemple esa imagen
no quede mirando un muerto,
ni que con ojos de artista
solo contemple un objeto,
ante el que exclame admirado
¡Qué torturado más bello!
 
Perdóneme si le digo,
responde el imaginero,
que aquí no hallará seguro
la imagen del Nazareno.
Vaya a buscarla en las calles
entre las gentes sin techo,
en hospicios y hospitales
donde haya gente muriendo
en los centros de acogida
en que abandonan a viejos,
en el pueblo marginado,
entre los niños hambrientos,
en mujeres maltratadas,
en personas sin empleo.
 
Pero la imagen de Cristo
no la busque en los museos,
no la busque en las estatuas,
en los altares y templos.
ni siga en las procesiones
los pasos del Nazareno.
No la busque de madera,
de bronce de piedra o yeso,
¡Mejor busque entre los pobres
su imagen de carne y hueso!
(Gabriela Mistral)
 
Nuevo vídeo y artículo
 
Hay un nuevo vídeo subido al blog
de "Pequeñas Semillitas" en internet.
Para verlo tienes que ir al final de esta página
 
Hay nuevo material publicado en el blog
"Juan Pablo II inolvidable"
Puedes acceder en la dirección:
 
Ofrecimiento para sacerdotes y religiosas
  
Formulo el siguiente ofrecimiento únicamente para sacerdotes o religiosas que reciben diariamente "Pequeñas Semillitas" por e-mail: Si desean recibir los comentarios del Evangelio del domingo siguiente con dos o tres días de anticipación, para tener tiempo de preparar sus meditaciones, homilías o demás trabajos pastorales sobre la Palabra de Dios, pueden pedírmelo a feluzul@gmail.com  
Sólo deben indicar claramente su nombre, su correo electrónico, ciudad de residencia y a qué comunidad religiosa pertenecen.
  
Agradecimientos
Imaginemos que en el cielo hay dos oficinas diferentes para tratar lo relativo a las oraciones de las personas en la tierra:
Una es para receptar pedidos de diversas gracias, y allí los muchos ángeles que atienden trabajan intensamente y sin descanso por la cantidad de peticiones que llegan en todo momento.
La otra oficina es para recibir los agradecimientos por las gracias concedidas y en ella hay un par de ángeles aburridos porque prácticamente no les llega ningún mensaje de los hombres desde la tierra para dar gracias...
Desde esta sección de "Pequeñas Semillitas" pretendemos juntar una vez por semana (los domingos) todos los mensajes para la segunda oficina: agradecimientos por favores y gracias concedidas como respuesta a nuestros pedidos de oración.
 
 Desde España, Ana Pilar F. R. agradece a Dios y a todas las personas que rezaron por ella en ocasión de los estudios médicos que le realizaron la semana pasada, los cuales han arrojado resultados favorables.
 
Desde Colombia nos llega la siguiente nota de agradecimiento: “Damos gracias a nuestro Dios Trino por que ha posado Sus Santas Manos Sanadoras y Misericordiosas sobre las personas por las que hemos pedido oración. La señora Flor Ángela S., madre del Padre Edgar S., ha iniciado exitosamente un tratamiento para mitigar su cáncer de pulmón. Asimismo, María Edilma T., afectada por un cáncer diseminado en su cuerpo, ha manifestado relativo alivio por los tratamientos a los que se ha sometido con fe, esperanza y muchísima fortaleza. Carlos C. O. ha sentido alivio gracias al tratamiento que está llevando a cabo para la hiperplasia benigna de próstata, con mucha mejoría a partir del nuevo medicamento. Gracias a todos los que oraron y por sobre todo al Señor de los Milagros, siempre con la intercesión de nuestra Madre la Virgen María.
 
Desde Argentina, nos llega el agradecimiento inmenso a Dios y también a quienes han rezado por la salud del Gendarme Martín F., de 45 años de edad, contagiado grave del COVID 19 en el cumplimiento de su tarea de ayuda a la comunidad. Por gracia divina ha salido de la situación crítica en que estuvo muchos días y mejora paulatinamente.
 
¡Hasta mañana! con Madre Teresa
Agosto 30
Por entonces, no teníamos azúcar en Calcuta. No sé cómo, aquel pequeñuelo se enteró de que la Madre Teresa no tenía azúcar para los niños. Fue a casa y dijo a sus padres: “No tomaré azúcar durante tres días, daré mi azúcar a la Madre Teresa”. Aquel pequeñuelo amaba con un amor grande. Amó hasta sentir daño. Así debemos amar nosotros.
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)
 
🌸
BLOG ”PEQUEÑAS SEMILLITAS
🌸
FACEBOOK de “FELIPE DE URCA”
🌸
FACEBOOK de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
🌸
TWITTER de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
🌸
INSTAGRAM: FELIPE DE URCA
🌸
~AMDG~