viernes, 11 de junio de 2021

Pequeñas Semillitas 4697

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 16 - Número 4697 ~ Viernes 11 de Junio de 2021.
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
En el día en que celebramos la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, recordemos también a santa Margarita María Alacoque, la religiosa que recibió la visita y las gracias del Sagrado Corazón de Jesús en Paray le Monial, en 1673.
En su infancia, Margarita fue curada, gracias a la intercesión de la Virgen María, de la grave enfermedad que padecía desde hacía cuatro años. En agradecimiento, el día de su confirmación ella agrega el nombre de “María” al de “Margarita”. «Yo me dirigía a Ella con tal confianza que, bajo su protección, me parecía que no podía temer nada. Y me consagré a Ella para ser por siempre su esclava. Yo le hablaba como una niña, con simplicidad, como a mi Madre querida, por quien yo sentía un dulce amor. Si entré a la orden de la Visitación fue porque me sentía atraída por el nombre amoroso de Maria y porque sentía que ahí se encontraba lo que buscaba.»
Una vez ya siendo religiosa, se enferma y otra vez la Virgen María la cura diciéndole: «Anímate, mi querida hija, con la salud que te doy de parte de mi Hijo divino, pues tienes todavía un camino largo y penoso a recorrer, siempre con la cruz, atravesada de clavos y espinas, y desgarrada de latigazos, pero no temas, yo no te abandonaré, te prometo mi protección.»
 
¡Buenos días María!
Dios, al que quiere salvar, le da a María. Pero si con nuestra obstinación en el pecado y en el mal despreciamos a la Virgen, entonces pereceremos eternamente, pues María es lo más sagrado que posee Dios, y si nos la da en un acto de confianza y bondad, también es cierto que debemos aceptar y agradecer mucho ese don y cuidarlo y proceder de acuerdo al regalo obtenido. Porque ya Jesús nos dice en su Evangelio que a quien mucho se le dio, mucho también se le pedirá. ¿Entonces tenemos que asustarnos porque Dios nos ha dado a María, pues nos pedirá mucho? No, no debemos asustarnos, sino agradecerle eternamente este don que nos ha hecho, pero debemos tener buena voluntad y hacer fructificar ese don, obrando de acuerdo a los Diez Mandamientos y a las enseñanzas de Jesús en el Evangelio. Dios ha dado a María al mundo, con sus apariciones y mensajes; pero si el mundo la desprecia, será destruido.
 
La Palabra de Dios
Lecturas del día
Primera Lectura: Oseas 11,1.3-4.8c-9
 
Salmo: Isaías 12,2-3.4bcd.5-6
 
Segunda Lectura: Efesios 3,8-12.14-19
 
SANTO EVANGELIO: Jn 19,31-37
En aquel tiempo, los judíos, como era el día de la Preparación, para que no quedasen los cuerpos en la cruz el sábado —porque aquel sábado era muy solemne— rogaron a Pilato que les quebraran las piernas y los retiraran. Fueron, pues, los soldados y quebraron las piernas del primero y del otro crucificado con Él.
Pero al llegar a Jesús, como lo vieron ya muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza y al instante salió sangre y agua. El que lo vio lo atestigua y su testimonio es válido, y él sabe que dice la verdad, para que también vosotros creáis. Y todo esto sucedió para que se cumpliera la Escritura: ‘No se le quebrará hueso alguno’. Y también otra Escritura dice: ‘Mirarán al que traspasaron’.
 
Comentario:
Hoy se nos ofrece ante los ojos corporales —mejor todavía, ante los “ojos interiores”, iluminados por la fe— la figura de Cristo que, acabado de morir en la Cruz, tuvo el costado abierto por una lanzada infligida por el centurión. «Al instante salió sangre y agua» (Jn 19,34). ¡Espectáculo angustioso y, a la vez elocuentísimo! No hay ni el más mínimo espacio para sostener la tesis de alguno que afirma una muerte aparente: Jesús está ciertamente muerto al 100%. Es más, aquella misteriosa “agua”, que no saldría de un cuerpo sano, normal, nos indica según la medicina moderna que Cristo debió morir a causa de un infarto o, como decían nuestros antepasados, con el corazón reventado. Sólo en este caso se verifica la separación del suero de los glóbulos rojos. Esto explicaría aquel anómalo “sangre y agua”.
Cristo, por tanto, ha muerto verdaderamente, y ha muerto sea a causa de nuestros pecados, sea por su más vivo y principal deseo: poder cancelar nuestros pecados. «Con mi muerte he vencido la muerte y he exaltado al hombre a la sublimidad del cielo» (Melitón de Sardis). Dios, que ha mantenido la promesa de resucitar a su Hijo, mantendrá también la segunda promesa: nos resucitará también a nosotros y nos elevará a su propia diestra. Pero pone una condición mínima: creer en Él y dejarnos salvar por Él. Dios no impone a nadie su amor en detrimento de la humana libertad.
En fin, sobre aquel Hombre que ha sufrido la lanzada en su corazón, «mirarán al que traspasaron» (Jn 19,37), nos da confirmación también el Apocalipsis: «Mirad que viene entre nubes, y todo ojo lo verá, especialmente los que le traspasaron» (Ap 1, 7). Ésta es una sagrada exigencia de la divina justicia: al fin, también aquellos que lo han rechazado obstinadamente, lo tendrán que reconocer. Incluso, el tirano autoidólatra, el asesino despiadado, el ateo soberbio..., todos sin excepción se verán constreñidos a arrodillarse ante Él, reconociéndolo como el verdadero, único Dios. ¿No es mejor, entonces, serle amigos desde ahora?
* P. Raimondo M. SORGIA Mannai OP (San Domenico di Fiesole, Florencia, Italia)
 
Santoral Católico:
San Bernabé
Apóstol
Nació en Chipre, y fue uno de los primeros fieles de Jerusalén. «Hombre bueno, lleno de Espíritu Santo y de fe», gozó de la confianza de los apóstoles, que lo enviaron a Antioquía de Siria para informarse de la marcha de aquella comunidad cristiana, integrada sobre todo por fieles no judíos, procedentes de la gentilidad. De allí partió para Tarso en busca de Saulo, y en cuanto lo encontró, se lo llevó a Antioquía. Bernabé y Saulo fueron enviados a Jerusalén, para llevar ayuda a aquella iglesia. Al regreso, Bernabé acompañó a Saulo en su primer viaje apostólico por Chipre y Asia Menor. Después estuvieron los dos en el Concilio de Jerusalén, donde explicaron su modo de proceder entre los gentiles. Luego Bernabé volvió a su patria, donde predicó el Evangelio, y allí murió.
Oración: Señor, tú mandaste que san Bernabé, varón lleno de fe y de Espíritu Santo, fuera designado para llevar a las naciones tu mensaje de salvación; concédenos, te rogamos, que el Evangelio de Cristo, que él anunció con tanta firmeza, sea siempre proclamado en la Iglesia con fidelidad, de palabra y de obra. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Para más información hacer clic acá.
* Directorio Franciscano – Aciprensa – Catholic.net
 
Sagrado Corazón de Jesús
Solemnidad
Celebramos la Solemnidad del Corazón de Jesús, símbolo del amor que el Salvador tiene por nosotros las personas. "Jesús nos mira, nos ama y nos respeta. Es todo corazón y toda misericordia. Vamos con confianza a Jesús, Él siempre nos perdona", escribe el Papa Francisco en un Tweet para celebrar la fiesta
La devoción al Corazón de Jesús ha existido desde los primeros tiempos de la Iglesia, desde que se meditaba en el costado y el Corazón abierto de Jesús, de donde salió sangre y agua. De ese Corazón nació la Iglesia y por ese Corazón se abrieron las puertas del Cielo.
Para más amplia información hacer clic acá.
 
Pensamientos sobre el Corazón de Jesús

🌸 “A pesar de toda oposición, este Divino Corazón eventualmente triunfará. Dichosos los que han sido instrumentos para establecer su reinado”.
(Santa Margarita María de Alacoque)
 
🌸 “El Corazón de Jesús es el símbolo por excelencia de la misericordia de Dios; pero no es un símbolo imaginario, es un símbolo real, que representa al centro, la fuente de la que ha brotado la salvación entera de la humanidad”.
(Papa Francisco)
 
🌸 “Sagrado Corazón de Jesús, enséñame a olvidarme enteramente de mí, ya que éste es el único camino para entrar en Ti”.
(San Claudio de la Colombiére)
 
🌸 “Valen tanto los hombres, su vida y su felicidad, que el mismo hijo de Dios se entregó para redimirlos. ¿Quién no amará su Corazón tan herido? preguntaba ante eso un alma contemplativa. Y seguía preguntando: ¿Quién no devolverá amor por amor? ¿Quién no abrazará un Corazón tan puro?”.
(San Josemaría Escrivá)
 
🌸 “En el Sagrado Corazón está el símbolo y la imagen expresa del amor infinito de Jesucristo que nos mueve a amarlo en correspondencia”.
(Papa León XIII)
 
Tema del día:
Sta. Margarita y el Sgdo. Corazón de Jesús
Santa Margarita María Alacoque fue una monja de la Orden de la Visitación de la Virgen María en el siglo XVII, que progresó de modo admirable en la vía de la perfección y, enriquecida con gracias místicas, trabajó mucho para propagar el culto al Sagrado Corazón de Jesús, del que era muy devota.
 
A los nueve años hizo su primera comunión y a los 22 recibió la Confirmación, a la que se preparó con una confesión general: empleó quince días escribiendo en un cuaderno la larga lista de sus faltas para leérselas luego al confesor. En esa ocasión añadió al nombre de Margarita, el de María. Después, habiendo vencido las últimas resistencias de la madre, que hubiera preferido verla casada, pudo entrar al convento de la Orden de la Visitación, fundado 60 años antes por San Francisco de Sales, ofreciéndose desde el día de su entrada como “víctima al Corazón de Jesús.”
 
En la festividad de San Juan evangelista de 1673, sor Margarita María, que tenía 25 años, estaba en adoración ante el Santísimo Sacramento. En ese momento tuvo el privilegio particular de la primera de las manifestaciones visibles de Jesús que se repetirían durante dos años más, todos los primeros viernes de mes. En 1675, durante la octava del Corpus Christi, Jesús se le manifestó con el corazón abierto, y señalando con la mano su corazón, exclamó: “He aquí el corazón que ha amado tanto a los hombres, que no se ha ahorrado nada, hasta extinguirse y consumarse para demostrarles su amor. Y en reconocimiento no recibo de la mayoría sino ingratitud.”
 
Durante 18 meses el Corazón de Jesús se le fue apareciendo. Le pidió que se celebrara la Fiesta del Sagrado Corazón cada año el viernes de la semana siguiente a la fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo (Corpus).
 
El Corazón de Jesús le hizo a Santa Margarita unas promesas maravillosas para los que practiquen esta hermosa devoción. Por ejemplo "Bendeciré las casas donde sea expuesta y honrada la imagen de mi Sagrado Corazón. Daré paz a las familias. A los pecadores los volveré buenos y a los que ya son buenos los volveré santos. Asistiré en la hora de la muerte a los que me ofrezcan la comunión de los primeros Viernes para pedirme perdón por tantos pecados que se cometen", etc.
 
Margarita le decía al Sagrado Corazón: "¿Por qué no elige a otra que sea santa, para que propague estos mensajes tan importantes? Yo soy demasiado pecadora y muy fría para amar a mi Dios". Jesús le dijo: "Te he escogido a ti que eres un abismo de miserias, para que aparezca más mi poder. Y en cuanto a tu frialdad para amar a Dios, te regalo una chispita del amor de mi Corazón". Y le envió una chispa de la llama que ardía sobre su Corazón, y desde ese día la santa empezó a sentir un amor grandísimo hacia Dios y era tal el calor que le producía su corazón que en pleno invierno, a varios grados bajo cero, tenía que abrir la ventana de su habitación porque sentía que se iba a quemar con tan grande llama de amor a Dios que sentía en su corazón (¡Ojalá Dios nos diera a nosotros una chispita de esas!)
 
Margarita enfermó gravemente. La superiora le dijo: "Creeré que sí son ciertas las apariciones de que habla, si el Corazón de Jesús le concede la curación". Ella le pidió al Sagrado Corazón que la curara y sanó inmediatamente. Desde ese día su superiora creyó que sí en verdad se le aparecía Nuestro Señor.
 
Las extraordinarias visiones con que fue favorecida le causaron al principio incomprensiones y juicios negativos hasta cuando, por disposición divina, fue puesta bajo la dirección espiritual del jesuita santo Claudio de la Colombière. En el último periodo de su vida, elegida maestra de novicias, tuvo el consuelo de ver difundida la devoción al Corazón de Jesús, y los mismos opositores de un tiempo se convirtieron en fervorosos propagandistas. Murió a los 43 años de edad, el 17 de octubre de 1690.
 
Promesas del Sagrado Corazón de Jesús
He aquí las promesas que hizo Jesús a Santa Margarita, y por medio de ella a todos los devotos de su Sagrado Corazón:
1. Les daré todas las gracias necesarias a su estado.
2. Pondré paz en sus familias.
3. Les consolaré en sus penas.
4. Seré su refugio seguro durante la vida, y, sobre todo, en la hora de la muerte.
5. Derramaré abundantes bendiciones sobre todas sus empresas.
6. Bendeciré las casas en que la imagen de mi Corazón sea expuesta y venerada.
7. Los pecadores hallarán en mi Corazón la fuente, el Océano infinito de la misericordia.
8. Las almas tibias se volverán fervorosas.
9. Las almas fervorosas se elevarán a gran perfección.
10. Daré a los sacerdotes el talento de mover los corazones más empedernidos.
11. Las personas que propaguen esta devoción tendrán su nombre escrito en mi Corazón, y jamás será borrado de Él.
12. Les prometo en el exceso de mi misericordia, que mi amor todopoderoso concederá a todos aquellos que comulgaren por nueve primeros viernes consecutivos, la gracia de la perseverancia final. No morirán sin mi gracia, ni sin la recepción de los santos sacramentos. Mi Corazón será su seguro refugio en aquel momento supremo.
 
Las condiciones para ganar esta gracia son tres:
1. Recibir la Sagrada Comunión durante nueve primeros viernes de mes de forma consecutiva y sin ninguna interrupción.
2. Tener la intención de honrar al Sagrado Corazón de Jesús y de alcanzar la perseverancia final.
3. Ofrecer cada Sagrada Comunión como un acto de expiación por las ofensas cometidas contra el Santísimo Sacramento.
 
Poesía
Al Sagrado Corazón
 
Sagrado Corazón, en Vos confío,
porque la cumbre es alta y muy pendiente.
La tentación, al atacar de frente,
nos muestra su maldad y poderío.
 
Corazón de Jesús, en Ti confío
y creo siempre en Vos tan ciegamente,
que no quiero abrevar en otra fuente,
sino en tu santo corazón, Dios mío.
 
De tu pecho horadado por la lanza
y el acero cruel de mis pecados
brota el perdón en anchuroso río.
 
Tu gran misericordia es mi esperanza,
todo mi amor. ¡Oh Corazón Sagrado,
mi Dios, mi buen Jesús, en Vos confío!
(José María Zandueta Munárriz)
 
Mes del Sagrado Corazón de Jesús
Día 11.-El respeto humano
A Jesús no le valen las medias tintas, las almas insípidas. Él quiere cristianos solo de una pieza; tiene el corazón abierto para todos, también para los corazones más obstinados, pero no quiere saber nada del respeto humano. Muchas veces nos ha dicho que no podemos servir a Dios y al mundo. Él ha hablado claro, que si queremos contentar al mundo, no estamos con Él, estaremos en contra de Él.
Tú sabes que ciertas amistades son un continuo peligro para el alma y comprendes que no te dejan tranquila la conciencia y no te sientes con fuerza de romper esa triste cadena. ¿Cuántas veces no has observado los preceptos de la Iglesia por no huir de las críticas de alguna mala lengua?
* Web Católico de Javier
 
Pedidos de oración
Pedimos oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas, monjas, religiosas, novicias, catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones; por el triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María;  por la conversión de todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por los cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo, el hambre y la pobreza; por los niños con cáncer y otras patologías graves; por los jóvenes, especialmente los que han caído en las drogas o cualquier tipo de adicción, por las víctimas de trata, por el drama de los refugiados del Mediterráneo; por los presos políticos y la falta de libertad en muchos países del mundo; por las víctimas de catástrofes naturales; por la unión de las familias, por lo no nacidos, por la fidelidad de los matrimonios y por más inclinación de los jóvenes hacia este sacramento; por el aumento de las vocaciones sacerdotales y religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio. En este tiempo pedimos especiales oraciones por todas las personas que en diversos países del mundo han sido afectadas por el coronavirus, rogando que el Sagrado Corazón de Jesús nos proteja ante esta terrible pandemia, y que con fe y esperanza, y siguiendo las indicaciones médicas de prevención, el riesgo de contagio vaya disminuyendo en todo el planeta y los que están enfermos se sanen. Para lectores argentinos, pedimos especial oración por la salvación de Argentina en el marco de la justicia.
 
Pedimos oración por todos los países de Latinoamérica, para que no caigan en las garras nefastas del comunismo y/o gobiernos populistas que tienden hacia lo dictatorial, sin tener interés en las necesidades de los pueblos, sino en satisfacer las propias ambiciones desmedidas de los políticos enquistados en los diversos gobiernos. Elevamos nuestra oración a Jesucristo, el Señor de la Historia.
 
Pedimos oración por el eterno descanso de José E., hombre joven de Córdoba, Argentina, fallecido hace unos días por Covid. Y sumamos este pedido de oración por todas las víctimas de esta terrible pandemia que han partido en estos días a la Casa del Padre.
 
Pedimos oración para Vilma P., de 66 años de edad, del interior de la provincia de Córdoba, Argentina, lectora y amiga de esta página, que ha sido operada de un tumor en el páncreas hace una semana. Invocamos para ella la protección del Sagrado Corazón de Jesús, para que le conceda la gracia de recuperarse bien.
 
Pedimos oración para el niño Pedrito P., de solo 3 años de edad, de Canals, provincia de Córdoba, que ha sido operado de una malformación del aparato digestivo. Rogamos a la Virgen, Madre de Jesús y Madre nuestra, que interceda por él para que la cirugía sea exitosa y la enfermedad quede curada.
 
Continuamos unidos en oración por medio del rezo del Santo Rosario poniendo en Manos de Nuestra Madre Bendita todas nuestras preocupaciones, alegrías y necesidades, poniendo al mundo entero en Manos de nuestra Madre y pidiéndole a Ella paz para el mundo. Al rezar por la paz, rezamos por todo, por la paz en el mundo, en los corazones, porque la violencia sea desterrada, por la paz para los niños que están en peligro de ser abortados. Paz para los jóvenes que no encuentran el camino, paz para los deprimidos. Paz para los que no han tenido la dicha de conocer al Amor. En fin rezamos por la paz, y sigamos haciéndolo.
Tú quisiste, Señor, que tu hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia. Escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos y conceda a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.
 
Año de San José
San José, hombre justo y modelo de virtudes,
es el Patrono Universal de la santa Iglesia,
y por lo tanto de todos nosotros.
Es el santo que tuvo en la tierra
la misión más grande y noble:
proteger al Niño Dios y su Santísima Madre.
 
Junio 11
El Espíritu se goza en habitar nuestros corazones, y nos hace exclamar confiadamente Abba, es decir Padre, dándole constantemente fuerzas para practicar la virtud y vencer a nuestros enemigos. Glorioso san José, que aprendamos de tu fidelidad. Amén.
(P. Florentín Brusa, cmf)
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)
 
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AMDG

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