martes, 26 de junio de 2018

Pequeñas Semillitas 3690

PEQUEÑAS SEMILLITAS

Año 13 - Número 3690 ~ Martes 26 de Junio de 2018
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
Alabado sea Jesucristo…
Ser feliz no es complicado.  Basta ser sencillos.
Evita complicar las cosas que se presentan en tu camino. No te perturbes. Hay solución para todos los problemas en tu vida.
Cultivando la sencillez, descubrirás que los problemas se harán cada vez menores.  No transformes una gota de agua en un océano.
No pongas exageración ni pesimismo sobre los problemas.
Usa la vivencia que ya tienes para adquirir nuevas experiencias.
La vida es sencilla. ¿Por qué complicarla?

¡Buenos días!

Mirada de fe
San Juan Bosco en su autobiografía relató: “En mi juventud leí la "Imitación de Cristo" y quedé admirado al darme cuenta de que este libro trae más enseñanzas en una sola página que otros en varios volúmenes. A este precioso libro debo el haberme aficionado a los libros espirituales”. Esta obra que, después del Evangelio fue la más leída por los cristianos, la escribió el monje Tomás de Kempis. Medita estos renglones.  

Ofrece el mundo cosas temporales y efímeras, y, con todo, se le sirve con ardor. Jesús promete lo más elevado y eterno, y los corazones de los hombres languidecen trabados por la inercia. La mayoría oye con más agrado al mundo que a Dios, y más fácilmente siguen las apetencias de los sentidos que el beneplácito de Dios. ¿Quién sirve y obedece a Jesús con tanto empeño y constancia como se sirve al mundo y a sus dueños? Avergüénzate, alma mía, indolente y quejumbrosa, de que aquéllos sean más solícitos para su perdición que tú para la vida.

Acabas de leer un fragmento de “La imitación de Cristo”, libro que puedes conseguir en librerías. Has podido advertir también el estilo denso y prolijo. El contenido no es más que la esencia del Evangelio. Uno no puede sino afirmar. “Este hombre escribe la pura verdad”.  Y conmueve, llamando a la reflexión. Aprovecha su mensaje.
* Enviado por el P. Natalio

La Palabra de Dios
Lecturas de hoy
Primera lectura: 2 Rey 19, 9-11. 14-21. 31-36

Salmo: Sal 47, 2-4. 10-11

SANTO EVANGELIO: Mt 7,6.12-14
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «No deis a los perros lo que es santo, ni echéis vuestras perlas delante de los puercos, no sea que las pisoteen con sus patas, y después, volviéndose, os despedacen. Por tanto, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos; porque ésta es la Ley y los Profetas. Entrad por la entrada estrecha; porque ancha es la entrada y espacioso el camino que lleva a la perdición, y son muchos los que entran por ella; mas ¡qué estrecha la entrada y qué angosto el camino que lleva a la Vida!; y pocos son los que lo encuentran».  

Comentario:
Hoy, el Señor nos hace tres recomendaciones. La primera, «No deis a los perros lo que es santo, ni echéis vuestras perlas delante de los puercos» (Mt 7,6), contrastes en que los “bienes” son asociados a “perlas” y lo “que es santo”; y, por otro lado, los “perros y puercos” a lo que es impuro. San Juan Crisóstomo nos enseña que «nuestros enemigos son iguales a nosotros en su naturaleza pero no en su fe». A pesar de que los beneficios terrenales son concedidos de igual manera a los dignos e indignos, no es así en lo que se refiere a las “gracias espirituales”, privilegio de aquellos que son fieles a Dios. La correcta distribución de los bienes espirituales implica un celo por las cosas sagradas.
La segunda es la llamada “regla de oro” (cf. Mt 7,12), que compendiaba todo lo que la Ley y los Profetas recomendaron, tal como ramas de un único árbol: El amor al prójimo presupone el Amor a Dios, y de Él proviene.
Hacer al prójimo lo que queremos que nos hagan implica una transparencia de acciones para con el otro, en el reconocimiento de su semejanza a Dios, de su dignidad. ¿Por qué razón deseamos el Bien para nosotros mismos? Porque lo reconocemos como medio de identificación y unión con el Creador. Siendo el Bien el único medio para la vida en plenitud, es inconcebible su ausencia en nuestra relación con el prójimo. No hay lugar para el bien donde prevalezca la falsedad y predomine el mal.
Por último, la "puerta estrecha"... El Papa Benedicto XVI nos pregunta: «¿Qué significa esta ‘puerta estrecha’? ¿Por qué muchos no pueden pasar por ella? ¿Es un pasaje reservado para algunos elegidos?». ¡No! El mensaje de Cristo «nos dice que todos podemos entrar en la vida. El pasaje es ‘estrecho’, pero abierto a todos; ‘estrecho’ porque es exigente, requiere compromiso, abnegación, mortificación del propio egoísmo».
Roguemos al Señor que realizó la salvación universal con su muerte y resurrección, que nos reúna a todos en el Banquete de la vida eterna.
Diácono D. Evaldo PINA FILHO (Brasilia, Brasil)

Santoral Católico:
San Josemaría Escrivá de Balaguer
Presbítero y Fundador
Nació en Barbastro (Huesca, España) en 1902. Recibió la ordenación sacerdotal en Zaragoza el año 1925, y en 1927 se trasladó a Madrid para hacer el doctorado en Derecho Civil; su celo apostólico le puso en contacto con gentes de todos los ambientes y, en particular, con las de las barriadas periféricas. El 2 de octubre de 1928 nació el Opus Dei: durante un retiro espiritual ve la misión que el Señor quiere confiarle: abrir en la Iglesia un nuevo camino vocacional, dirigido a difundir la búsqueda de la santidad y la realización del apostolado mediante la santificación del trabajo ordinario en medio del mundo sin cambiar de estado. Y se entregó en cuerpo y alma a su misión. Comenzaron a seguirle personas de todas las condiciones sociales, en particular, grupos de universitarios. En 1934 publicó su libro Camino. Aunque no faltaron dificultades, la Obra se afianzó, y en 1950 recibió de Pío XII la aprobación definitiva. Se multiplicaron los proyectos: escuelas, universidades, colegios, hospitales, publicaciones, etc. Murió en Roma el 26 de junio de 1975 y Juan Pablo II lo canonizó el 2002.
Oración: Señor y Dios nuestro, que elegiste a san Josemaría, presbítero, para anunciar en la Iglesia la vocación universal a la santidad y al apostolado: concédenos, por su intercesión y su ejemplo, que, realizando fielmente el trabajo cotidiano según el Espíritu de Cristo, seamos configurados a tu Hijo y, en unión con la Santísima Virgen María, sirvamos con ardiente amor a la obra de la Redención. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén. 
© Directorio Franciscano – Aciprensa – Catholic.net

Pensamientos de San Josemaría 
“El cristiano debe amar a los demás,
y por tanto, respetar las opiniones contrarias a las suyas,
y convivir con plena fraternidad
con quienes piensan de otro modo”.

“En la línea del horizonte, hijos míos,
parecen unirse el cielo y la tierra.
Pero no, donde de verdad se juntan
es en vuestros corazones,
cuando vivís santamente la vida ordinaria”.

“Son santos los que luchan hasta el final de su vida:
los que siempre se saben levantar
después de cada tropiezo, de cada caída,
para proseguir valientemente el camino
con humildad, con amor, con esperanza”.

Historias:
Pequeña gran gente

Da gusto leer muchos de los mensajes que llegan a nuestra redacción cada semana. Al ir desgranando cada uno de ellos se me llena el alma de esperanza. Me alegra ver cómo nos vamos dando cuenta de la cantidad de gente buena a nuestro alrededor, incluso cuando parece que hay más vinagre que aceite en el mundo.

Para nosotros es noticia la de aquel buen hombre que llegó un día al metro. Apenas había dejado su moneda sobre el taburete cuando la cajera le dijo sonriendo: «Hoy usted no paga». «¿Por qué? -preguntó azorado el señor- ¿hoy es gratis?». «No, pero ayer se olvidó usted del cambio».

El hombre no salía de su asombro: «¡Pero si usted no estaba aquí ayer!». La chica sonrió de nuevo y dijo: «Es verdad. Pero mi compañera me comentó: “Dale el cambio a ese señor que cada vez nos da los buenos días”. Era inconfundible, porque usted es el único».  El ilustre individuo se alejó ruborizado, pero alegre. Ser educado enriquece y abre puertas.

También vale la pena relatar en nuestras líneas esta otra historia.

Un padre de familia numerosa se acercó a la escuela de sus hijos. Quería ver la forma de negociar un poco con la dirección, pues ese semestre no había podido pagar casi nada de las colegiaturas. Cuál no fue su sorpresa cuando se encontró que otra familia ya había pagado todo: libros, colegiatura, comidas, transporte, etcétera.

«Pero, ¿cómo? ¿Está segura, señorita? ¿Cuándo y por qué?». Una cándida risa respondió a todas estas preguntas.  Por fin, tras reponerse un poco del susto, pidió el nombre de la familia, para agradecerle. De nuevo aquella pícara y cómplice sonrisa se dibujó en el rostro de la secretaria y contestó: «Lo siento, pero no puedo dárselo. Es la condición que nos han pedido: quieren permanecer en el anonimato». ¿No es esto algo digno de una primera página?

Estoy seguro de una cosa: hay mucha gente que se merece el honor de la letra impresa de los periódicos, y que casi nunca aparece en ellos. Gente que todos los días se levanta, con heroísmo, para ir a trabajar. Gente que lucha a diario por ser coherente. Gente que sufre con una sonrisa en su rostro. ¡Cuánta de esta gente buena llena el mundo!

Todos podemos ser protagonistas de una buena noticia. Basta con vivir conscientes de ser portadores de algo nuevo y viejo a la vez: el amor.

Tengo la gran ilusión de pensar que en el cielo, darán los “Óscar” de la eternidad a la pequeña buena gente, protagonista de estas buenas noticias, que muchas veces “sólo” se dedicaba a amar.
Fuente: Buenas Noticias 
Autor: Juan Antonio Ruiz

Mes del Sagrado Corazón de Jesús
Día 26: Devoción a la Virgen
Jesús antes de morir, dio su testamento. En medio de la agonía contempla al discípulo predilecto y le dice: "He aquí a tu madre". Por su última voluntad, María se convierte en madre de todos.
Jesús, que amaba perfectamente a su madre, se mostró siempre sometido y obediente a ella.
Todas las gracias del Señor vienen a ti por su mediación. Y si la estimas. ¿Cómo tratas de amarla? Un hijo que dice amar a su madre y después la ofende no es sincero; es un mal hijo. ¿Y tú no ofendes a la Virgen con tus faltas de amor?
Web Católico de Javier

Mensaje de María Reina de la Paz 

Mensaje de María Reina de la Paz del 25 de junio de 2018

“Queridos hijos, este es el Día que el Señor me ha dado para agradecerle por cada uno de vosotros, por aquellos que se han convertido y han acogido mis mensajes y han emprendido el camino de la conversión y de la santidad. Alegraos, hijos míos, porque Dios es misericordioso y a todos os ama con su inmenso amor y os conduce hacia el camino de la salvación a través de mi venida aquí. Os amo a todos y os doy a mi Hijo para que Él os dé la paz. ¡Gracias por haber respondido a mi llamada!”
  
Pedidos de oración
Pedimos oración por la Santa Iglesia Católica; por el Papa Francisco, por el Papa Emérito Benedicto, por los obispos, sacerdotes, diáconos, seminaristas, monjas, religiosas, novicias, catequistas y todos los que componemos el cuerpo místico de Cristo; por la unión de los cristianos para que seamos uno, así como Dios Padre y nuestro Señor Jesucristo son Uno junto con el Espíritu Santo; por las misiones; por el triunfo del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María;  por la conversión de todos los pueblos; por la Paz en el mundo; por los cristianos perseguidos y martirizados en Medio Oriente, África, y en otros lugares; por nuestros hermanos sufrientes por diversos motivos especialmente por las enfermedades, el abandono, la carencia de afecto, la falta de trabajo, el hambre y la pobreza; por los pacientes internados en la Casa de la Bondad en  Córdoba (Argentina); por los niños con cáncer y otras enfermedades graves; por el drama de los refugiados del Mediterráneo; por los presos políticos y la falta de libertad en muchos países del mundo; por las víctimas de catástrofes naturales; por la unión de las familias, la fidelidad de los matrimonios y por más inclinación de los jóvenes hacia este sacramento; por el aumento de las vocaciones sacerdotales y religiosas; y por las Benditas Almas del Purgatorio.

Pedimos oración por el eterno descanso del alma de José María V., de Argentina, que el sábado pasado pasó de este mundo a la patria celestial.

Pedimos oración para Annabel, de Cuba, que presenta un cuadro febril muy prolongado y hasta ahora de causa desconocida, rogando a la Santísima Virgen que interceda ante Jesús para que ilumine a los médicos con su Santo Espíritu y se pueda arribar a un diagnóstico y luego a su curación.

Pedimos oración para Edmundo C., de 93 años de edad, de San Lorenzo, Santa Fe, Argentina, a quien colocaron un marcapasos  y tal vez hoy pueda ser dado de alta. Que el Señor lo proteja para que pueda retornar a a su hogar y a su vida normal. 

Pedimos oración para María Trinidad (Trini), de Bogotá, Colombia, que en un desafortunado accidente se ha fisurado un hombro y ahora debe mantenerse con inmovilización durante tres meses. Que la Divina Providencia obre en ella para que sane sin ninguna secuela.

Continuamos unidos en oración por medio del rezo del Santo Rosario poniendo en Manos de Nuestra Madre Bendita todas nuestras preocupaciones, alegrías y necesidades, poniendo al mundo entero en Manos de nuestra Madre y pidiéndole a Ella paz para el mundo. Al rezar por la paz, rezamos por todo, por la paz en el mundo, en los corazones, porque la violencia sea desterrada, por la paz para los niños que están en peligro de ser abortados. Paz para los jóvenes que no encuentran el camino, paz para los deprimidos. Paz para los que no han tenido la dicha de conocer al Amor. En fin rezamos por la paz, y sigamos haciéndolo.

Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades,
para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia;
escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos
y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad,
la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu hijo ha llamado dichosos,
y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén

Cinco minutos del Espíritu Santo
Junio 26
Donde no lo hago presente al Espíritu Santo, me siento yo el creador de las emociones y de las realidades. Entonces me fabrico un mundo personal donde el Espíritu Santo no puede entrar, como si fuera un sector sólo mío, donde me creo libre.
Pero no me doy cuenta de que si lo aparto a él de algo, allí terminará entrando la debilidad, la muerte y el fracaso, porque sólo de él viene la vida.
Esa falsa libertad no es más que una esclavitud que me arrastra a la muerte. Lo que vivo fuera de su presencia de amor, poco a poco se va convirtiendo en fuente de dolor, ansiedad, desgaste, y cada vez brinda menos la felicidad de antes. Pero yo me empeño en sacarle el jugo y me revuelco, y me sucede como al degenerado que termina usando a las mujeres como si fueran animales para recuperar el placer que ya no logra sentir.
En cambio, si yo voy construyendo mi felicidad con el Espíritu Santo, si le permito que guíe mi libertad y me sane de mis esclavitudes, cada vez soy más libre, cada vez puedo ser más dueño de mi vida, sin que me dominen las tristezas ocultas, las angustias sin sentido, los nerviosismos, los cansancios, las necesidades obsesivas, etc.
* Mons. Víctor Manuel Fernández
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.