domingo, 10 de diciembre de 2023

Pequeñas Semillitas 5510

PEQUEÑAS SEMILLITAS
 
Año 18 - Número 5510 ~ Domingo 10 de Diciembre de 2023
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
¡Alabado sea Jesucristo!
Juan el Bautista tiene buenas noticias para el pueblo judío. Vive en el desierto con solo los recursos básicos, pero cerca a Dios. Dice que hay uno trayendo el Espíritu de Dios que vendrá pronto para superar la tristeza y el vacío. No lo nombra, pero lo reconoce como tan superior de él que él no es digno de desatar su sandalia. Aunque lo conocemos como Jesucristo, la gente que se acude a Juan en el desierto se queda en suspenso en cuanto su nombre.
En Adviento con los anuncios de Isaías y de Juan el Bautista nos damos cuenta de que Jesús está para llegar a nosotros de nuevo. Viene como para compartir su Espíritu que nos hace generosos, gozosos, y santos. Tenemos que vigilar por él en los acontecimientos cotidianos, particularmente en la misa. También tenemos que acogernos a él en nuestro servicio a los demás. Jesús está viniendo…
 
La Palabra de Dios
Lecturas del día
Primera Lectura: Is 40,1-5.9-11
 
Salmo: Sal 84, 9ab-10. 11-12. 13-14
 
Segunda Lectura: 2Pe 3,8-14
 
Santo Evangelio: Mc 1,1-8
Comienzo del Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios. Conforme está escrito en Isaías el profeta: «Mira, envío mi mensajero delante de ti, el que ha de preparar tu camino. Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas».
Apareció Juan bautizando en el desierto, proclamando un bautismo de conversión para el perdón de los pecados. Acudía a él gente de toda la región de Judea y todos los de Jerusalén, y eran bautizados por él en el río Jordán, confesando sus pecados.
Juan llevaba un vestido de piel de camello; y se alimentaba de langostas y miel silvestre. Y proclamaba: «Detrás de mí viene el que es más fuerte que yo; y no soy digno de desatarle, inclinándome, la correa de sus sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero Él os bautizará con Espíritu Santo».
 
Comentario:
Hoy, cuando se alza el telón del drama divino, podemos escuchar ya la voz de alguien que proclama: «Preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas» (Mc 1,3). Hoy, nos encontramos ante Juan el Bautista cuando prepara el escenario para la llegada de Jesús.
Algunos creían que Juan era el verdadero Mesías. Pues hablaba como los antiguos profetas, diciendo que el hombre ha de salir del pecado para huir del castigo y retornar hacia Dios a fin de encontrar su misericordia. Pero éste es un mensaje para todos los tiempos y todos los lugares, y Juan lo proclamaba con urgencia. Así, sucedió que una riada de gente, de Jerusalén y de toda Judea, inundó el desierto de Juan para escuchar su predicación.
¿Cómo es que Juan atraía a tantos hombres y mujeres? Ciertamente, denunciaba a Herodes y a los líderes religiosos, un acto de valor que fascinaba a la gente del pueblo. Pero, al mismo tiempo, no se ahorraba palabras fuertes para todos ellos: porque ellos también eran pecadores y debían arrepentirse. Y, al confesar sus pecados, los bautizaba en el río Jordán. Por eso, Juan Bautista los fascinaba, porque entendían el mensaje del auténtico arrepentimiento que les quería transmitir. Un arrepentimiento que era algo más que una confesión del pecado —en sí misma, ¡un gran paso hacia delante y, de hecho, muy bonito! Pero, también, un arrepentimiento basado en la creencia de que sólo Dios puede, a la vez, perdonar y borrar, cancelar la deuda y barrer los restos de mi espíritu, enderezar mis rutas morales, tan deshonestas.
«No desaprovechéis este tiempo de misericordia ofrecido por Dios», dice San Gregorio Magno. —No estropeemos este momento apto para impregnarnos de este amor purificador que se nos ofrece, podemos decirnos, ahora que el tiempo de Adviento comienza a abrirse paso ante nosotros.
¿Estamos preparados, durante este Adviento, para enderezar los caminos para nuestro Señor? ¿Puedo convertir este tiempo en un tiempo para una confesión más auténtica, más penetrante en mi vida? Juan pedía sinceridad —sinceridad con uno mismo— a la vez que abandono en la misericordia Divina. Al hacerlo, ayudaba al pueblo a vivir para Dios, a entender que vivir es cuestión de luchar por abrir los caminos de la virtud y dejar que la gracia de Dios vivificara su espíritu con su alegría.
* Fr. Faust BAILO (Toronto, Canadá)
 
Palabras del Santo Padre Pío
«Vive alegre y animoso, porque el ángel, que preconiza el nacimiento de nuestro pequeño Salvador y Señor, anuncia cantando y canta anunciando que él promulga alegría, paz y felicidad, a los hombres de buena voluntad, para que no haya nadie que ignore que, para recibir a este Niño, basta ser de buena voluntad»
 
Predicación del Evangelio:
El inicio según Marcos
He aquí el comienzo de una narración fascinante que ha servido probablemente de base a san Lucas y a san Mateo. Es un libro pequeño que ha influenciado profundamente la humanidad y sobre el cual vamos a reflexionar juntos en el transcurso del ciclo del año B.
 
San Marcos precisa bien que se trata de un comienzo. Su historia está lejos de acabarse. Le da por título: EVANGELIO, que quiere decir la Buena Nueva que Jesús de Nazaret es verdaderamente el Mesías anunciado por los profetas, el Hijo de Dios resucitado y exaltado, del que los discípulos preparan su vuelta al fin de los tiempos, y desde hace una semana, la venida más actual, muy cercana ya la Navidad.
 
Con Juan Bautista, el secreto de la identidad de Jesús se ha revelado ya: no es el libertador político que muchos esperaban sino el “bautizará en el Espíritu Santo.” El verbo “bautizar” significa sumergir; y al igual que Juan Bautista se sumergía en el agua, la fuente de vida en el valle del Jordán, así Jesús sumergirá a los y a las que lo acojan en el Espíritu Santo, la fuente inacabable de la vida de Dios. Toda persona que acepta su proyecto tiene ya acceso a esta fuente que salta hasta la vida eterna.
 
La única condición de la inmersión anunciada por Juan Bautista es la fe ligada al deseo de transformarse a sí mismo y al mundo, instaurando el Reino de Dios. Es el sentido de la conversión proclamada por Juan. Pues la narración, recordémoslo, sólo acaba de empezar. El Jesús que vendrá en Navidad será el Servidor de Dios rechazado, quebrantado y humillado, el que reunirá al conjunto de las naciones.
 
Tal perspectiva orienta ya a los discípulos hacia el corazón y la conclusión o fin de toda la narración. Jesús es el que viene a dar su vida para que todos vivan su gracia para siempre. Desde el inicio, Juan une el Antiguo y el Nuevo Testamento. Es el profeta que prepara el camino para alguien más grande que él. Esta ruta recuerda los caminos allanados antes para la vuelta del pueblo de Dios después del exilio, en el año 538.
.
(P. Felipe Santos, SDB - Imagen: Misioneros Digitales Católicos)
 
Poesía
San Juan Bautista
 
A bautizarse acuden las gentes al Jordán.
Preguntaban algunos: -¿Y qué haremos nosotros?
-Quien tiene dos vestidos, respondíales Juan,
dé uno al que no tenga. Y preguntaban otros
 
(esta vez publicanos): -Y nosotros ¿qué haremos?
-No exigir más, decíales, de lo que está ordenado.
-Y a nosotros, Maestro, dinos cómo obraremos-
en nombre de los suyos, le requería un soldado.
 
-No hagáis nunca extorsiones, contentaos con el sueldo.
Yo os bautizo con agua; mas Otro ha de venir,
que ya está entre vosotros aunque no Lo hayáis visto,
que con fuego bautiza. El usará del bieldo
para limpiar la era de acuerdo a lo previsto:
el trigo irá al granero, la paja a consumir.
.
(Marilina Rébora)
 
Nuevo vídeo y artículo
 
Hay un nuevo vídeo subido al blog
de "Pequeñas Semillitas" en internet
referido al Evangelio de este Domingo.
Para verlo tienes que ir al final de esta página:
 
Hay nuevo material publicado en el blog
"Juan Pablo II inolvidable"
sobre el tema: “Preparad los caminos del Señor”
Puedes acceder en la dirección:
 
Agradecimientos
Imaginemos que en el cielo hay dos oficinas diferentes para tratar lo relativo a las oraciones de las personas en la tierra:
Una es para receptar pedidos de diversas gracias, y allí los muchos ángeles que atienden trabajan intensamente y sin descanso por la cantidad de peticiones que llegan en todo momento.
La otra oficina es para recibir los agradecimientos por las gracias concedidas y en ella hay un par de ángeles aburridos porque prácticamente no les llega ningún mensaje de los hombres desde la tierra para dar gracias...
Desde esta sección de "Pequeñas Semillitas" pretendemos juntar una vez por semana (los domingos) todos los mensajes para la segunda oficina: agradecimientos por favores y gracias concedidas como respuesta a nuestros pedidos de oración.
 
💕 Desde Concordia, provincia de Entre Ríos, Argentina, llega el agradecimiento a Dios y a tantas personas que han rezado (y lo siguen haciendo) por la recuperación de Luciana, mujer joven y madre, que hace unos meses recibió un trasplante de médula y pasó por diversas alternativas nada fáciles, de todo lo cual se va recuperando satisfactoriamente, por la gracia de Dios. Ella sigue tratamiento y controles.
 
💕 Desde San Pablo, Brasil, Evelin P. H., amiga de tantos años de “Pequeñas Semillitas”, agradece a Dios y a quienes rezaron por ella, a quien extirparon una lesión quística de parótida con todo éxito. Y la biopsia del material extirpado ha dado negativa para malignidad. Damos gracias a Dios junto a ella.
 
Bendito seas, Dios mío, porque a pesar de ser yo indigno de toda ayuda, tu generosidad e infinita bondad nunca dejan de otorgar el bien aún a los ingratos y a los que se han apartado de ti. Conviértenos a ti, para que seamos agradecidos, humildes y piadosos, pues Tú eres nuestra salud, nuestra fortaleza y nuestra salvación.
 
Meditaciones de “Pequeñas Semillitas”
El Evangelio de esta semana nos invita a hacer cosas muy concretas, como fruto de algo que resulta especialmente difícil hoy en día: la fe en la gracia de Dios, la fe en que Dios no nos ha dejado solos en la lucha cotidiana contra el pecado, la fe en la fuerza de Dios que es capaz de intervenir en nuestra vida y de hacernos vencer las tentaciones. Porque queremos creer en la gracia es por lo que tendremos que ser intrépidos a veces, tomando iniciativas que pueden ser arriesgadas. En otras ocasiones, esta fe en la gracia nos hará ser pacientes, pues creemos que si algo está sucediendo es porque Dios, aunque sea misteriosamente, lo permite. Por último, creer en la gracia nos ayudará a practicar los sacramentos, sobre todo el de la confesión, que es un hermoso acto de fe en que Dios, además de perdonar los pecados, puede ayudarnos a que no los repitamos. Pensemos en la Virgen María, la Purísima, la llena de gracia. Porque creía en la fuerza de Dios aceptó correr los riesgos que entrañaba hacer la voluntad de Dios. Ella sabía que para los hombres lo que el Señor le proponía era imposible, pero para Dios –como le dijo el ángel- esa palabra no existe. En esta semana segunda de Adviento, aprovechemos para poner nuestra mirada en María de una manera especial, más intensa. Siempre debió parecerle todo imposible, desde un punto de vista humano. Imposible la encarnación, imposible que su niño fuera Dios, imposible que si era Dios muriera en la cruz, imposible la resurrección. Pero siempre creyó en Dios, creyó en su fuerza, en su gracia, y porque creyó esperó y porque esperó venció. Hagamos nosotros lo mismo, imitemos a María, la llena de gracia.
(P. Santiago Martín)
 
Recordando al Padre Natalio
Entre truenos y relámpagos
Un niño es el regalo de Dios para tus días tristes. Es el movimiento y el torbellino de la vida que se agita, que salta, que corre, que sueña, que sonríe y se duerme. Un niño es siempre una esperanza, un por qué vivimos y trabajamos sin dar lugar a la fatiga. Un niño es un misterio impenetrable; ¿qué será de él en el futuro?
 
Una nena, como todos los días fue caminando a la escuela, a pesar del mal tiempo y de las nubes oscuras. A los pocos minutos el viento arreció y empezaron los rayos y los truenos. La madre pensó que su hijita podría tener miedo en el camino, pues ella misma estaba asustada por la tormenta. Preocupada, la madre entró a su auto, y se dirigió a la escuela. En el camino encontró a su hija caminando, y notó que a cada relámpago la niña se detenía, miraba hacia arriba y sonreía. Cuando la niña subió al auto, la madre le preguntó muy curiosa: —¿Qué estabas haciendo? La niña le respondió: —Estaba sonriendo, porque Dios no paraba de sacarme fotos.
 
Un niño es el interrogante permanente sobre el mundo que hemos construido, sobre los valores que nos movilizan, sobre el destino de nuestra humanidad... ¿Saldría el sol cada mañana si ellos no iluminaran nuestras noches? ¿Podríamos vivir sin su bullicio, sin sus sonrisas, sin la abismante profundidad de sus preguntas? (Anónimo). Agradezcamos este don del Cielo.
(P. Natalio)
 
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)
 
 
 
BLOG ”PEQUEÑAS SEMILLITAS”
”JUAN PABLO II INOLVIDABLE”
FACEBOOK de “FELIPE DE URCA”
FACEBOOK de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
”X” (ex TWITTER) de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
INSTAGRAM: FELIPE DE URCA
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.