martes, 11 de junio de 2024

Pequeñas Semillitas 5660

PEQUEÑAS SEMILLITAS
 
Año 19 - Número 5660 ~ Martes 11 de Junio de 2024
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)
¡Alabado sea Jesucristo!
¿Cuántas veces he pasado por alto el verdadero significado de unas palabras ajenas, simplemente por no estar escuchando de verdad?  ¿Y cuántas veces he sido mal comprendida por la misma causa?
La comunicación debe ser parte importante de todos los aspectos de mi vida. En mis relaciones con el prójimo, en el trabajo y en casa, el éxito del compromiso puede estar determinado por el grado de comunicación entre las personas.
Aprendo a ser mejor comunicador cuando me dejo dirigir por el amoroso espíritu de Dios.  Cuando escucho a otros, escucho con amor.
Confío en que Dios –no las apariencias– me muestre el verdadero significado de las palabras o los actos de alguien.
Porque confío en Dios, jamás temeré ser mal entendido.  Él me inspira para que diga y haga lo correcto en el momento correcto.
 
La Palabra de Dios
Lecturas del día
Primera Lectura: Hch 11, 21-26; 13, 1-3
 
Salmo: Sal 97, 1. 2ab. 3cd-4. 5-6
 
Santo Evangelio: Mt 5,13-16
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para nada más que para ser tirada afuera y pisoteada por los hombres. Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte. Ni tampoco se enciende una lámpara y la ponen debajo del celemín, sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en la casa. Brille así vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos».
 
Comentario:
Hoy, san Mateo nos recuerda aquellas palabras en las que Jesús habla de la misión de los cristianos: ser sal y luz del mundo. La sal, por un lado, es este condimento necesario que da gusto a los alimentos: sin sal, ¡qué poco valen los platos! Por otro lado, a lo largo de los siglos la sal ha sido un elemento fundamental para la conservación de los alimentos por su poder de evitar la corrupción. Jesús nos dice: —Debéis ser sal en vuestro mundo, y como la sal, dar gusto y evitar la corrupción.
En nuestro tiempo, muchos han perdido el sentido de su vida y dicen que no vale la pena; que está llena de disgustos, dificultades y sufrimientos; que pasa muy deprisa y que tiene como perspectiva final —y bien triste— la muerte.
«Vosotros sois la sal de la tierra» (Mt 5,13). El cristiano ha de dar el gusto: mostrar con la alegría y el optimismo sereno de quien se sabe hijo de Dios, que todo en esta vida es camino de santidad; que dificultades, sufrimientos y dolores nos ayudan a purificarnos; y que al final nos espera la vida de la Gloria, la felicidad eterna.
Y, también como la sal, el discípulo de Cristo ha de preservar de la corrupción: donde se encuentran cristianos de fe viva, no puede haber injusticia, violencia, abusos hacia los débiles... Todo lo contrario, ha de resplandecer la virtud de la caridad con toda la fuerza: la preocupación por los otros, la solidaridad, la generosidad...
Y, así, el cristiano es luz del mundo (cf. Mt 5,14). El cristiano es esta antorcha que, con el ejemplo de su vida, lleva la luz de la verdad a todos los rincones del mundo, mostrando el camino de la salvación... Allá donde antes sólo había tinieblas, incertidumbres y dudas, nace la claridad, la certeza y la seguridad.
* Rev. D. Francesc PERARNAU i Cañellas (Girona, España)
 
Santoral Católico:
San Bernabé
Nació en Chipre, y fue uno de los primeros fieles de Jerusalén. «Hombre bueno, lleno de Espíritu Santo y de fe», gozó de la confianza de los apóstoles, que lo enviaron a Antioquía de Siria para informarse de la marcha de aquella comunidad cristiana, integrada sobre todo por fieles no judíos, procedentes de la gentilidad. De allí partió para Tarso en busca de Saulo, y en cuanto lo encontró, se lo llevó a Antioquía. Bernabé y Saulo fueron enviados a Jerusalén, para llevar ayuda a aquella iglesia. Al regreso, Bernabé acompañó a Saulo en su primer viaje apostólico por Chipre y Asia Menor. Después estuvieron los dos en el Concilio de Jerusalén, donde explicaron su modo de proceder entre los gentiles. Luego Bernabé volvió a su patria, donde predicó el Evangelio, y allí murió.
Oración: Señor, tú mandaste que san Bernabé, varón lleno de fe y de Espíritu Santo, fuera designado para llevar a las naciones tu mensaje de salvación; concédenos, te rogamos, que el Evangelio de Cristo, que él anunció con tanta firmeza, sea siempre proclamado en la Iglesia con fidelidad, de palabra y de obra. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Para más información hacer clic acá.
(Directorio Franciscano – ACI Prensa – Catholic.net)
 
Pensamiento del día
«Coloca a Dios en todo lo que haces y en todos tus problemas, y comprobarás que tus sufrimientos se transformarán en experiencias y enseñanzas. Coloca a Dios en todos tus pensamientos, y tu vida se transformará en un himno de alegría y de alabanza, porque los dolores se disipan como las tinieblas con las primeras luces de la aurora»
(LIS CORONEL)
 
Grandes Biografías:
Ana Frank
Ana Frank fue una niña alemana judía, víctima del Holocausto, que se volvió famosa por haber llevado un diario de sus experiencias. Ana y su familia se ocultaron durante dos años para evitar la persecución nazi. Lo que Ana documentó durante esa época está ahora publicado en “El diario de Ana Frank”.
 
Annelies Marie Frank nació el 12 de junio de 1929 en Frankfurt am Main, Alemania. Sus padres fueron Otto y Edith Frank.
 
Durante los primeros cinco años de su vida, Ana vivió con sus padres y Margot, su hermana mayor, en un departamento a las afueras de Frankfurt. Después de que los nazis subieron al poder en 1933, Otto Frank huyó a Amsterdam, en los Países Bajos, donde tenía contactos comerciales. El resto de la familia Frank no tardó en seguirlo, siendo Ana la última en llegar en febrero de 1934 porque se había quedado con sus abuelos en Aachen.
 
El destino de los Frank y de otros judíos de Amsterdam quedó marcado por la ocupación alemana de la ciudad, que inició en mayo de 1940. A principios de 1942, los alemanes comenzaron los preparativos para deportar a los judíos de los Países Bajos a los centros de exterminio del este. En ese momento, exigieron que todos los judíos holandeses se concentraran en Amsterdam. También decidieron internar a todos los judíos no holandeses en el campo de tránsito de Westerbork. Desde Westerbork, los funcionarios alemanes deportaban a los judíos a los centros de exterminio de Auschwitz-Birkenau y Sobibor, en la Polonia ocupada por Alemania. El primer transporte de deportación salió de Westerbork el 15 de julio de 1942 con destino a Auschwitz-Birkenau. Estas deportaciones y la intensificación de las medidas antisemitas alarmaron a muchos judíos de los Países Bajos, entre los que se encontraban los Frank.
 
Ana y su familia decidieron ocultarse en los primeros 15 días de julio de 1942. Posteriormente se les unieron otros cuatro judíos: Hermann, Auguste y Peter van Pels, así como Fritz Pfeffer. Durante dos años, vivieron todos en un departamento secreto en la calle Prinsengracht 263. El departamento se encontraba detrás de las oficinas comerciales donde Otto Frank había trabajado como director de una empresa. En su diario, Ana se refiere al escondite como el "anexo secreto". Johannes Kleiman, Victor Kugler, Johan Voskuijl, Bep Voskuijl, Jan Gies y Miep Gies, quienes eran amigos y colegas de Otto Frank, ayudaron a preparar el escondite y llevaban comida y ropa de contrabando a los Frank, arriesgando sus propias vidas. En el tiempo en que estuvieron ocultos, Ana llevó un diario donde escribió acerca de sus temores, esperanzas y experiencias.
 
El 4 de agosto de 1944, las SS y la policía alemana descubrieron el escondite. Durante mucho tiempo se creyó que las autoridades habían actuado al recibir una denuncia de un holandés anónimo, pero en una teoría más reciente se determinó que los alemanes descubrieron el escondite por casualidad, mientras investigaban informes de que en la casa se hacía trabajo ilegal y se cometían fraudes con los cupones de racionamiento.
 
Ese día, el sargento Karl Silberbauer de las SS (Hauptscharführer) y dos policías holandeses detuvieron a la familia Frank. La Gestapo los envió al campo de tránsito de Westerbork el 8 de agosto. Un mes después, el 3 de septiembre de 1944, las autoridades de las SS y de la policía enviaron por tren a los Frank y a los otros cuatro que se escondían con ellos a Auschwitz-Birkenau, en la Polonia ocupada por los alemanes. Este fue el último transporte de Westerbork a Auschwitz.
 
Dos días después, el tren llegó a Auschwitz con 1.019 judíos a bordo. Ahí separaron a los varones y a las mujeres. Todos los residentes del anexo secreto fueron seleccionados para hacer trabajos forzados.
 
Al igual que otros judíos seleccionados para trabajar, las mujeres elegidas de este transporte, entre ellas Ana, Edith y Margot, fueron tatuadas con números de prisioneras. No se han conservado registros que indiquen sus números exactos. Aunque el certificado de defunción de Ana Frank documenta sus movimientos entre campos, no indica el número se su tatuaje de identificación.
 
Ana y su hermana Margot fueron trasladadas al campo de concentración de Bergen-Belsen, en el norte de Alemania, a principios de noviembre de 1944.
 
Ana Frank murió en febrero o marzo de 1945, poco antes de que las tropas británicas liberaran Bergen-Belsen el 15 de abril de ese año. Ana Frank murió a la edad de 15 años. Margot Frank tenía 19 años cuando murió, también en febrero o marzo de 1945. Tanto Margot como Ana murieron de tifus.
 
Los oficiales de las SS también seleccionaron a los padres de Ana para trabajar. Edith, la madre de Ana, murió en Auschwitz a principios de enero de 1945.
 
Solo Otto, el padre de Ana, sobrevivió a la guerra. Las fuerzas soviéticas lo liberaron de Auschwitz el 27 de enero de 1945. Posteriormente, a Otto le entregaron los escritos de Ana que había conservado Miep Gies, una de las ciudadanas holandesas que ayudaron a ocultar a la familia Frank. Otto Frank contribuyó de manera fundamental a la publicación del diario de su hija. El diario de Ana Frank es el primero y a veces el único contacto que muchas personas tienen con la historia del Holocausto. Entre los escritos de Ana Frank también hay relatos cortos, cuentos de hadas y ensayos.
 
La casa donde se ocultaron los Frank en Amsterdam sigue atrayendo a gran cantidad de visitantes. La que ahora se conoce como la "casa de Ana Frank" atrajo en 2017 a más de 1.2 millones de visitantes.
.
(Fuente: Enciclopedia del Holocausto – Imagen: Google)
 
Meditaciones de “Pequeñas Semillitas”
En verdad, el Salvador del mundo ha puesto la dulzura y la humildad en el zócalo del edificio de las virtudes. La abstinencia, el ayuno, la austeridad, la pobreza interior o exterior, las buenas obras, los milagros, todo no es nada sin la humildad del corazón. Pero todas estas cosas cobrarán vida y recibirán bendiciones, si la humildad las apoya.
La humildad del corazón es la fuerza generativa de las virtudes, el tallo y las ramas proceden de la raíz. Debido a que su precio es infinito, porque es el fundamento sobre el que se eleva toda la perfección espiritual, el Señor solo ha querido confiarse a sí mismo el cuidado de decirnos: "Sed humildes.”
Y la Virgen María, porque la humildad es la guardiana universal, como si hubiese olvidado todas las demás virtudes de su alma y cuerpo, admira solo una cosa en sí misma, y da una sola razón sobre la encarnación del Hijo de Dios en ella: "Porque miró la humildad de su sierva. “
Por eso, y no por otra cosa, se elevó el clamor de las generaciones que la proclamaron bienaventurada. (Santa Ángela de Foligno)
🌸
Durante el periodo anterior al nacimiento de Jesús, María y José tuvieron que pasar por una experiencia muy dolorosa. Esta será la primera de las grandes pruebas compartidas de los recién casados.
Entre el momento de la Anunciación y la Encarnación de la Palabra de Dios en el vientre de María, por la acción del Espíritu Santo que "la cubrió con su sombra", y el momento del nacimiento de Jesús, María comprometida con José, le fue dada como esposa. Cuando ella vino a vivir a su casa, al final del período de compromiso, ya estaba embarazada. José percibió el estado de la Virgen sin explicarse cómo era eso posible. En cuanto a María, ella misma no podía revelar la extraordinaria maravilla realizada en ella por el Señor. Sin embargo, José, como María, se mantiene fiel a la voluntad divina y la recibe en su casa.
Esta primera gran prueba entre María y José, en los primeros días de su vida en común, incluso antes del nacimiento de Jesús, fue una prueba importante para su amor mutuo, pero también para su fe, tal como lo había sido para Abraham cuando fue llamado a sacrificar a su hijo Isaac: locura ante los ojos de los hombres, sabiduría ante los ojos de Dios; lo que pudo destruir a la familia desde el principio, por el contrario, la unió para siempre, por la fe. Además, es al precio de esta prueba para los santos esposos, narrada en las Escrituras, que el nacimiento virginal de Jesús es puesto de relieve sin ambigüedad.
 
Extractos de cartas del Padre Pío
(Recopilación: P. Gianluigi Pasquale en “365 días con el Padre Pío”)
11 de junio
Hay algunas enfermedades físicas cuya curación depende de un acertado modo de vivir.
El amor propio, la estima de sí mismo, la falsa libertad de espíritu son raíces que no se pueden erradicar fácilmente del corazón humano. Solamente se puede impedir la producción de sus frutos, que son los pecados; porque sus primeros retoños y sus ramas, esto es, sus primeras sacudidas y sus primeros movimientos de hecho no se pueden impedir mientras se está en esta vida mortal, aunque sí se puede moderar y disminuir su calidad y su fuerza mediante la práctica de las virtudes contrarias, particularmente del amor de Dios.
Es necesario, pues, tener paciencia al cortar los malos hábitos, domar las antipatías y superar las propias inclinaciones y cambios de humor; porque, mi buena hijita, esta vida es una lucha continua y no hay quien pueda decir: «Yo no he sido tentado». La quietud está reservada para el cielo, donde nos espera la palma de la victoria. Aquí, en la tierra, hay que combatir siempre entre la esperanza y el temor; pero con el propósito de que la esperanza sea siempre más fuerte, y teniendo presente la omnipotencia de aquel que nos auxilia. No te canses, pues, de trabajar, con constancia, con confianza y con resignación, por tu conversión y perfección.
(11 de junio de 1918, a Erminia Gargani, Ep. III, 735)
 
FELIPE
-Jardinero de Dios-
(el más pequeñito de todos)
 
 
PÁGINAS DE FELIPE DE URCA:
 
”PEQUEÑAS SEMILLITAS”
”JUAN PABLO II INOLVIDABLE”
FACEBOOK de “FELIPE DE URCA”
FACEBOOK de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
”X” (ex TWITTER) de “PEQUEÑAS SEMILLITAS”
INSTAGRAM: FELIPE DE URCA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por participar comentando! Por favor, no te olvides de incluir tu nombre y ciudad de residencia al finalizar tu comentario dentro del cuadro donde escribes.