domingo, 22 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0649

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0649 ~ Domingo 22 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)




Hola !!!
Al iniciar esta edición, quiero reiterar que "Pequeñas Semillitas" no se publicará desde mañana 23 y hasta el 28 de este mes de febrero, regresando a partir del 1º de marzo, con el agregado de nuevas secciones.
Nos despedimos hasta ese día.




La Palabra de Dios : Evangelio del día



Entró de nuevo Jesús en Cafarnaúm; al poco tiempo había corrido la voz de que estaba en casa. Se agolparon tantos que ni siquiera ante la puerta había ya sitio, y Él les anunciaba la Palabra. Y le vienen a traer a un paralítico llevado entre cuatro. Al no poder presentárselo a causa de la multitud, abrieron el techo encima de donde Él estaba y, a través de la abertura que hicieron, descolgaron la camilla donde yacía el paralítico. Viendo Jesús la fe de ellos, dice al paralítico: «Hijo, tus pecados te son perdonados». Estaban allí sentados algunos escribas que pensaban en sus corazones: «¿Por qué éste habla así? Está blasfemando. ¿Quién puede perdonar pecados, sino Dios sólo?».
Pero, al instante, conociendo Jesús en su espíritu lo que ellos pensaban en su interior, les dice: «¿Por qué pensáis así en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: ‘Tus pecados te son perdonados’, o decir: ‘Levántate, toma tu camilla y anda?’. Pues para que sepáis que el Hijo del hombre tiene en la tierra poder de perdonar pecados —dice al paralítico—: ‘A ti te digo, levántate, toma tu camilla y vete a tu casa’». Se levantó y, al instante, tomando la camilla, salió a la vista de todos, de modo que quedaban todos asombrados y glorificaban a Dios, diciendo: «Jamás vimos cosa parecida».
(Marcos 2, 1-12)

Comentario
Hoy, leyendo el Evangelio, centramos nuestra atención en tres mementos concretos: un paralítico que no se vale por sí mismo, un grupo de amigos, y Jesús.
En el paralítico nos podemos ver reflejados cada uno de nosotros; todos podemos estar paralizados, ya que el pecado nos paraliza en nuestro camino hacia Dios. A veces, no nos damos cuenta o nos parece que ya estamos bien como estamos, o que ya solucionaremos o pondremos en orden nuestras relaciones con Dios en otra ocasión.
Entonces, «le vienen a traer a un paralítico llevado entre cuatro» (Mc 2,3). Necesitamos verdaderos amigos que nos lleven a Dios, que venzan nuestra resistencia. El paralítico, después de ver el jaleo que estaban ocasionando los amigos, seguro que debía decirles que pararan, que ya habría más tiempo otro día, que había mucha gente... Y no digamos nada cuando «abrieron el techo encima de donde Él estaba» (Mc 2,4): el ruido que harían, el polvo, las molestias para todos los que estaban allí y los gritos que harían los asistentes, pues no les dejaban escuchar a Jesús, etc.
Pero los auténticos amigos no encuentran dificultades, aman de verdad y quieren lo mejor, porque «es propio del amigo hacer el bien a los amigos, principalmente a aquellos que se encuentran más necesitados» (Santo Tomás de Aquino). Preguntémonos hoy si nosotros tenemos verdaderos amigos que serán capaces de llevarnos a Dios. Preguntémonos, también, si somos amigos de verdad y nos esforzamos para llevar a quienes amamos a Dios. No conviene olvidar que también ellos pondrán resistencia. ¿Soy realmente amigo? ¿Pueden los otros confiar en que les ayudaré a estar cerca de Jesús?
¿Y Jesús? Viene a traernos la verdadera salvación, a liberarnos de la parálisis, viene a perdonarnos los pecados. ¿Ayudo a los otros a acercarse a la confesión?
Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra, nos lleva y nos da a Jesús: ¡que con su ayuda también nosotros llevemos a todos a Jesús!
Rev. D. Xavier Jauset i Clivillé (Lleida, España)



Santoral Católico


La Cátedra del Apóstol San Pedro



Etimológicamente cátedra significa “sede fija.” Viene de la lengua latina.

La celebración de hoy tiene la simbología de la cátedra de San Pedro. Se trata de poner de relieve la misión del Maestro y del Pastor conferidas a san Pedro por Jesús, constituyéndolo así, en su persona y sucesores, en el principio y fundamento visible de la unidad de la Iglesia.

El martirologio romano celebra hoy la fiesta de la cátedra de San Pedro en Antioquía y el 18 de enero la de Roma. La reforma del calendario ha unificado las dos en el día de hoy. Esta fiesta indica el lugar preeminente de San Pedro o su sucesor en el colegio apostólico, enseñado por Cristo cuando le encargó de dirigir y apacentar a la Iglesia.

Esta investidura de Cristo y revalidada después de su resurrección, se ha respetado siempre. Pedro, después de la Ascensión de Cristo al cielo, es quien preside la elección de Matías y habla en nombre de todos en este momento como en el día de Pentecostés. El mismo Herodes Agripa sabía que dando muerte a San Pedro, la iglesia naciente acabaría.

La muerte de San Pedro en Roma confirma todas las tradiciones antiquísimas llevadas a cabo por investigadores tanto católicos como no católicos. Lo confirman también las excavaciones emprendidas en el año 1939 por Pío XII en la Gruta Vaticana, bajo la Basílica de san Pedro. Los resultados los aprobaron incluso los no creyentes.

Es pues, esta fiesta la que marca la continuidad de la Iglesia, gracias al Espíritu que habita en ella y a la unidad que se establece entre esta cátedra y la de todas las iglesias locales.

Es también un homenaje al fiel discípulo y confidente de Jesús. Aceptó esta carga por amor. Y nadie arrebatará esta Iglesia. Está Dios con ella, por ella y para ella. La historia lo confirma.



Pensamiento



"La Iglesia indica por mandato del Redentor el camino para el bien espiritual y humano, camino de reconciliación y de penitencia, mediante la conversión personal y la solidaridad con el prójimo"
Juan Pablo II



Meditación breve



Hoy y todos los días bendigo mi corazón dando las gracias por el maravilloso trabajo que realiza.
Concentro mis pensamientos en el poder y la eficiencia de mi corazón. Sin dejar de latir a ritmo perfecto, proporciona a mi cuerpo la nutrición y el oxígeno necesarios.
El corazón es un símbolo del amor y lo es con razón, pues el amor divino fluye por él y se irradia por todo mi cuerpo.
El amor de Dios fortifica mi corazón, haciendo que me sienta libre de cargas, dudas, preocupaciones y miedos.
Bendigo mi corazón y sé que late constantemente con fe y amor, llevando vida y energía a todas las células de mi cuerpo.
Me desprendo de las tensiones y me relajo, para que mi corazón pueda seguir funcionando a plena capacidad.
Gra Baq



Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro



Será muy difícil encontrar un documento del magisterio eclesiástico que, en una u otra forma, no haga mención a María Santísima y a su obra en la Iglesia. Ella es presentada como ejemplo y modelo de la Iglesia, como el mejor exponente de la verdad, de la realidad teológica que se explica. Se presenta a María ante la consideración de los hijos de Dios como el primer fruto de la redención de Jesucristo.
El auténtico devoto de la Virgen es también no menos sincero y fiel devoto del magisterio de la Iglesia, de donde sabe que le habrá de llegar la verdad, el amor y la posesión de Dios.

María, Madre de la Iglesia, tú también eres Madre de la familia cristiana, pequeña Iglesia.


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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sábado, 21 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0648

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0648 ~ Sábado 21 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)



Hola !!!
Dice un proverbio chino que es más fácil variar el curso de un río que el carácter de un hombre.
Mientras lo pensamos, quiero recordar que "Pequeñas Semillitas" no se editará desde el 23 al 28 de Febrero, regresando el 1º de marzo enriquecida con nuevas secciones.


La Palabra de Dios : Evangelio del día



En aquel tiempo, Jesús toma consigo a Pedro, Santiago y Juan, y los lleva, a ellos solos, aparte, a un monte alto. Y se transfiguró delante de ellos, y sus vestidos se volvieron resplandecientes, muy blancos, tanto que ningún batanero en la tierra sería capaz de blanquearlos de ese modo. Se les aparecieron Elías y Moisés, y conversaban con Jesús.
Toma la palabra Pedro y dice a Jesús: «Rabbí, bueno es estarnos aquí. Vamos a hacer tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías»; pues no sabía qué responder ya que estaban atemorizados. Entonces se formó una nube que les cubrió con su sombra, y vino una voz desde la nube: «Este es mi Hijo amado, escuchadle». Y de pronto, mirando en derredor, ya no vieron a nadie más que a Jesús solo con ellos.
Y cuando bajaban del monte les ordenó que a nadie contasen lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre resucitara de entre los muertos. Ellos observaron esta recomendación, discutiendo entre sí qué era eso de “resucitar de entre los muertos”.
Y le preguntaban: «¿Por qué dicen los escribas que Elías debe venir primero?». Él les contestó: «Elías vendrá primero y restablecerá todo; mas, ¿cómo está escrito del Hijo del hombre que sufrirá mucho y que será despreciado? Pues bien, yo os digo: Elías ha venido ya y han hecho con él cuanto han querido, según estaba escrito de él».
(Marcos 9, 2-13)

Comentario
Hoy, el Evangelio de la transfiguración nos presenta un enigma descifrado. El texto evangélico de san Marcos está plagado de secretos mesiánicos, de momentos puntuales en los cuales Jesús prohibe que se dé a conocer lo que ha hecho. Hoy nos encontramos ante un “botón de muestra”. Así, Jesús «les ordenó que a nadie contasen lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre resucitara de entre los muertos» (Mc 9,9).
¿En qué consiste este secreto mesiánico? Se trata de levantar un poco el velo de aquello que se esconde debajo, pero que sólo será desvelado totalmente al final de los días de Jesús, a la luz de su Misterio Pascual. Hoy lo vemos claro en este Evangelio: la transfiguración es un momento, una catadura de gloria para descifrar a los discípulos el sentido de aquel momento íntimo.
Jesús había anunciado a sus discípulos la inminencia de su pasión, pero al verles tan turbados por tan trágico fin, les explica con hechos y palabras cómo será el final de sus días: unas jornadas de pasión, de muerte, pero que concluirán con la resurrección. He aquí el enigma descifrado. Santo Tomás de Aquino dice: «Con el fin de que una persona camine rectamente por un camino es necesario que conozca antes, de alguna manera, el lugar al cual se dirige».
También nuestra vida de cristianos tiene un fin desvelado por Nuestro Señor Jesucristo: gozar eternamente de Dios. Pero esta meta no estará exenta de momentos de sacrificio y de cruz. Con todo, hemos de recordar el mensaje vivo del Evangelio de hoy: en este callejón aparentemente sin salida, que es frecuentemente la vida, por nuestra fidelidad a Dios, viviendo inmersos en el espíritu de las Bienaventuranzas, se agrietará el final trágico, gozando de Dios eternamente.
Rev. D. Xavier Romero i Galdeano (Cervera-Lleida, España)



Santoral Católico


San Pedro Damián


Nació en Ravena y fue una de esas figuras severas que, como San Juan Bautista, surgen en las épocas de relajamiento para apartar a los hombres del error y traerles de nuevo al estrecho sendero de la virtud.

Debido a la prematura muerte de sus padres, el santo fue criado por su hermano, convirtiéndose en un excelente discípulo, y más tarde en un profundo servidor de Cristo.

Pedro decidió abandonar el mundo exterior y abrazar la vida religiosa en otra región, entrando al convento de Fonte Avellana, comunidad de ermitaños que gozaba de gran reputación. Allí se dedicó a la oración, lectura espiritual y estudios sagrados, viviendo con gran austeridad.

Pese a su negativa, Pedro asumió la dirección de la abadía en 1043 gobernando con gran prudencia y piedad.

Fundó otras cinco comunidades de ermitaños, donde fomentó entre los monjes el espíritu de retiro, caridad y humildad y además estuvo al servicio de la Iglesia, siendo nombrado Cardenal y Obispo de Ostia en 1057.

San Pedro Damián escribió varios documentos que ayudaron a mantener la observancia de la moral y de la disciplina, particularmente en lo que se refiere a los deberes de los clérigos y monjes. A pesar de su severidad, el santo sabía tratar a los pecadores con bondad e indulgencia, cuando la caridad y la prudencia lo pedían.

Murió el 21 de febrero de 1072. Inmediatamente la gente empezó a considerarlo como un gran santo y a conseguir favores de Dios por su intercesión. El Papa lo canonizó y lo declaró Doctor de la Iglesia por los elocuentes sermones que compuso y por los libros tan sabios que escribió.



Pensamiento



"Cuando vives con tu corazón abierto a nuevas experiencias, este se convierte en un canasto donde recoges frutos y flores. Sólo ten el cuidado de escoger la mejor cosecha para tu alma"



Pedidos de oración



Pedimos oración por el matrimonio de Jorge y Marcela, que viven en Costa Rica, y que están pasando por una situación de crisis, para que el Señor haga que renazca el amor en esa pareja y se dé el perdón necesario y la paz. Que así sea.



Nuestra lectora Martha R. nos pide oraciones por la salud de su tía María que está internada en terapia intensiva en ciudad de México, para que Dios le conceda calmar su dolor y devolver su salud.



Pedimos oración por nuestra lectora Patricia C., que vive en Guadalajara, Jalisco, México, que está pasando por una situación económica muy difícil, para que la Divina Providencia le permita superar sus dificultades siempre sobre la base de la oración y la fe.



Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.



Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro



Otra sugestiva invocación a María en sus letanías la llama "Espejo de Justicia". María no podía menos que serlo, por ser ella la primera feliz poseedora del Reino de Dios, que es un reino de justicia.
La verdad, el amor y la paz, son las otras características del Reino de Dios y esas características son otros tantos rasgos de María, que es Reina de la verdad, Reina del amor y Reina de la Paz.
Cada uno de nosotros está llamado a construir un mundo nuevo, basado en el Evangelio. Un mundo en el que los grandes valores sean siempre la justicia, la verdad, el amor y la paz; cuanto se haga por estos valores, se hará por el Reino.

María, ayúdanos a vivir cada día desde la perspectiva de la fe.


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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viernes, 20 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0647

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0647 ~ Viernes 20 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)




Hola !!!
Al iniciar esta edición de viernes de "Pequeñas Semillitas" recordamos que este boletín no se publicará entre los días 23 y 28 de este mes de febrero, regresando el 1º de marzo.
Para que esta introducción no carezca de alguna reflexión como lo hacemos siempre, les transcribo este proverbio, que no por breve deja de ser muy bonito: "La luna y el amor, cuando no crecen, disminuyen"



La Palabra de Dios : Evangelio del día



En aquel tiempo, Jesús llamando a la gente a la vez que a sus discípulos, les dijo: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. Porque quien quiera salvar su vida, la perderá; pero quien pierda su vida por mí y por el Evangelio, la salvará. Pues, ¿de qué le sirve al hombre ganar el mundo entero si arruina su vida? Pues, ¿qué puede dar el hombre a cambio de su vida? Porque quien se avergüence de mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles». Les decía también: «Yo os aseguro que entre los aquí presentes hay algunos que no gustarán la muerte hasta que vean venir con poder el Reino de Dios».
(Marcos 8, 34 - 9,1)

Comentario
Hoy el Evangelio nos habla de dos temas complementarios: nuestra cruz de cada día y su fruto, es decir, la Vida en mayúscula, sobrenatural y eterna.
Nos ponemos de pie para escuchar el Santo Evangelio, como signo de querer seguir sus enseñanzas. Jesús nos dice que nos neguemos a nosotros mismos, expresión clara de no seguir «el gusto de los caprichos» -como menciona el salmo- o de apartar «las riquezas engañosas», como dice san Pablo. Tomar la propia cruz es aceptar las pequeñas mortificaciones que cada día encontramos por el camino.
Nos puede ayudar a ello la frase que Jesús dijo en el sermón sacerdotal en el Cenáculo: «Yo soy la vid verdadera y mi Padre es el labrador. Todo sarmiento que en mí no da fruto, lo corta; y todo el que da fruto, lo poda para que dé más fruto» (Jn 15,1-2). ¡Un labrador ilusionado mimando el racimo para que alcance mucho grado! ¡Sí, queremos seguir al Señor! Sí, somos conscientes de que el Padre nos puede ayudar para dar fruto abundante en nuestra vida terrenal y después gozar en la vida eterna.
San Ignacio guiaba a san Francisco Javier con las palabras del texto de hoy: «¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero si arruina su vida?» (Mc 8,36). Así llegó a ser el patrón de las Misiones. Con la misma tónica, leemos el último canon del Código de Derecho Canónico (n. 1752): «(...) teniendo en cuenta la salvación de las almas, que ha de ser siempre la ley suprema de la Iglesia». San Agustín tiene la famosa lección: «Animam salvasti tuam predestinasti», que el adagio popular ha traducido así: «Quien la salvación de un alma procura, ya tiene la suya segura». La invitación es evidente.
María, la Madre de la Divina Gracia, nos da la mano para avanzar en este camino.
Rev. D. Joaquim Font i Gassol (Piera-Barcelona, España)



Santoral Católico


Francisco y Jacinta Marto, Beatos


En Aljustrel, pequeño pueblo situado a unos ochocientos metros de Fátima, Portugal, nacieron los pastorcitos que vieron a la Virgen María: Francisco y Jacinta, hijos de Manuel Pedro Marto y de Olimpia de Jesús Marto. También nació allí la mayor de los videntes, Lucía Dos Santos, quien murió el 13 de Febrero de 2005.

Francisco nació el día 11 de junio, de 1908. Jacinta nació el día 11 de marzo, de 1910.

Desde muy temprana edad, Jacinta y Francisco aprendieron a cuidarse de las malas relaciones, y por tanto preferían la compañía de Lucía, prima de ellos, quien les hablaba de Jesucristo. Los tres pasaban el día juntos, cuidando de las ovejas, rezando y jugando.

Entre el 13 de mayo y el 13 de octubre de 1917, a Jacinta, Francisco y Lucía, les fue concedido el privilegio de ver a la Virgen María en el Cova de Iría. A partir de esta experiencia sobrenatural, los tres se vieron cada vez más inflamados por el amor de Dios y de las almas, que llegaron a tener una sola aspiración: rezar y sufrir de acuerdo con la petición de la Virgen María. Si fue extraordinaria la medida de la benevolencia divina para con ellos, extraordinario fue también la manera como ellos quisieron corresponder a la gracia divina.

Los niños no se limitaron únicamente a ser mensajeros del anuncio de la penitencia y de la oración, sino que dedicaron todas sus fuerzas para ser de sus vidas un anuncio, mas con sus obras que con sus palabras. Durante las apariciones, soportaron con espíritu inalterable y con admirable fortaleza las calumnias, las malas interpretaciones, las injurias, las persecuciones y hasta algunos días de prisión. Durante aquel momento tan angustioso en que fue amenazado de muerte por las autoridades de gobierno si no declaraban falsas las apariciones, Francisco se mantuvo firme por no traicionar a la Virgen, infundiendo este valor a su prima y a su hermana. Cuantas veces les amenazaban con la muerte ellos respondían: "Si nos matan no importa; vamos al cielo." Por su parte, cuando a Jacinta se la llevaban supuestamente para matarla, con espíritu de mártir, les indicó a sus compañeros, "No se preocupen, no les diré nada; prefiero morir antes que eso."


Puedes leer el artículo completo en:


Pensamiento


"He tenido muchas cosas en mis manos y todas las he perdido, pero las que he puesto en las manos de Dios, esas siempre las poseo"



Tema del día : Esto es para ti



Esta carta no te hará feliz. Porque tu felicidad no está en esta carta ni en ninguna otra cosa o lugar.

Tu felicidad está en ti. Dentro de ti. En tu actitud interior. Y tu actitud en último término depende solamente de ti. Son muchos los títulos, los nombres, pero un solo tema: la vida.

La Vida vivida por ti, por mí. La vida en concreto. Con todas esas pequeñas y grandes cosas que la acompañan: el Amor, el Odio, el Dolor, la Ingratitud, la Alegría, la Compasión, el Trabajo, el Descanso, la Riqueza, la Pobreza, la Generosidad, la Esperanza, el Orgullo, el Egoísmo, la Ansiedad...

No te desanimes. Alégrate de que tienes tarea humana para hoy, mañana y muchos días más. Yo creo en la Vida. Y creo en tu Vida.

Yo creo que la Vida, aun con todos sus aparentes absurdos, su acción, en muchos casos desintegradora, sus contratiempos, ansiedades, temores y luchas, es como tiene que ser.

Quizás, o sin quizás, tú y yo tenemos mucho que ver en esa marcha de la Vida. ¡Ánimo!

Frente a tantos agoreros y cantores de cataclismos, ruinas y muerte, ésta carta quiere abrirte la puerta de la felicidad, sin optimismos dulzones de sacarina falsa.

Tú, yo y todos los seres humanos estamos anhelando en cada momento un poco más de felicidad.

Esto es alcanzable. Tú puedes ser un poco más feliz de lo que eres ahora. Lo serás cuando vivas tu Vida más plenamente. Cuando desarrolles lo que eres y puedes, más intensamente. Yo sé que cuando reflexiones y medites serenamente, descubrirás por ti mismo cosas mucho más claras, luminosas y reveladoras de las que acá se dicen. No debes permitir que nadie haga por vos lo que tienes que hacer vos mismo.

No leas esta carta una sola vez. Reléela...y trata de reflexionar. Que esta carta no sea como un chaparrón que cae de repente y corre hacia el barranco sin mojar la tierra.

Y recuerda que la mejor escuela es la Vida, la de tu Vida.

La Vida que está en vos y en cada ser humano con todas sus riquezas y variados matices de expresión y sobre todo con la principal, propia y únicamente verdadera expresión de la vida: el amor.

Sólo cuando somos fieles a nosotros mismos sin concesiones fáciles a la alabanza exterior o al instinto ciego egoísta, vivimos plenamente y amamos de verdad.

El mundo será menos malo cuando vos y yo seamos mejores. Muchos quieren cambiar el mundo, que el mundo cambie. Pero no empiezan por donde únicamente pueden empezar: cambiarse a sí mismos. Es el único camino. Los demás caminos son evasiones de ese reto que tenemos todos de ser hoy mejores que ayer para que el mundo también mejore.

El día que dejemos de lamentarnos y echar las culpas de los males del mundo a otros, habremos empezado a recorrer un buen camino. El Verdadero.

¿Por qué no empezar hoy? No esperes a que los demás lo hagan. Hay muchos que ya lo están haciendo.

Angelina (Ángel Sonriente)



Meditación breve



Un discípulo fue en busca de su maestro en su lecho de muerte para recibir sus últimas enseñanzas y mensajes. Después de agradecerle las enseñanzas que le había dado a lo largo de los años, el discípulo rogó al maestro que le dijera si tenía todavía algún secreto que pudiera ayudarle a ser feliz.
El maestro fijó sus ojos en él y le invitó a que se acercara y le mirara la boca.
- ¿Ves mi lengua?, le preguntó.
- Sí, la veo, respondió el discípulo.
- ¿Tengo todavía dientes?, siguió preguntando el maestro.
- No, no los veo.
- Bien -prosiguió el maestro- ¿Sabes por qué se han caído los dientes y no la lengua?
El joven, un tanto confuso, respondió:
- Supongo que la vejez y el paso de los años han causado la caída de los dientes.
- No -concluyó el maestro- los dientes se han caído porque son duros y rígidos, y la lengua sigue ahí porque es flexible y ha sabido adaptarse. Ahora ya sabes todo lo que vale la pena saber.



Pedidos de oración



Pedimos oración por la conversión de Rafael, que vive en Puebla, México. Que el Señor ilumine su corazón y lo haga encaminar sus pasos por el amor en el marco de la familia. Que así sea.



Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.



Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro



Aunque neguemos a María, y nos olvidemos de ella, María no desaparecerá. Ella seguirá cumpliendo amorosamente su rol maternal.
Los que perderemos seremos nosotros; nos veremos privados de luz, de fuerzas, de entusiasmo, del calor de su regazo materno, de las bondades de su Corazón.
La orfandad es triste, pero es inmensamente más triste si la elegimos nosotros. Si no conocer a la madre es causa de amarga pena, ¡cuánto más amargo será no querer reconocerla y aceptarla!

María, ilumina nuestra vida con la luz del Evangelio.


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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jueves, 19 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0646

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0646 ~ Jueves 19 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)



Hola !!!
Durante la vida, todo lo que hacemos y toda la gente que se nos cruza en el camino nos deja algo. Y una parte pequeña de todo lo que experimentamos se queda en cada persona que hemos conocido, y nada se pierde. Eso es lo eterno, esas gotitas de experiencia en un vasto río que no tiene fin...
Harriet Doerr


La Palabra de Dios : Evangelio del día


En aquel tiempo, salió Jesús con sus discípulos hacia los pueblos de Cesarea de Filipo, y por el camino hizo esta pregunta a sus discípulos: «¿Quién dicen los hombres que soy yo?». Ellos le dijeron: «Unos, que Juan el Bautista; otros, que Elías; otros, que uno de los profetas». Y Él les preguntaba: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?». Pedro le contesta: «Tú eres el Cristo». Y les mandó enérgicamente que a nadie hablaran acerca de Él. Y comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre debía sufrir mucho y ser reprobado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser matado y resucitar a los tres días. Hablaba de esto abiertamente. Tomándole aparte, Pedro, se puso a reprenderle. Pero Él, volviéndose y mirando a sus discípulos, reprendió a Pedro, diciéndole: «¡Quítate de mi vista, Satanás! porque tus pensamientos no son los de Dios, sino los de los hombres».
(Marcos 8, 27-33)

Comentario
Hoy seguimos escuchando la Palabra de Dios con la ayuda del Evangelio de san Marcos. Un Evangelio con una inquietud bien clara: descubrir quién es este Jesús de Nazaret. Marcos nos ha ido ofreciendo, con sus textos, la reacción de distintos personajes ante Jesús: los enfermos, los discípulos, los escribas y fariseos. Hoy nos lo pide directamente a nosotros: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?» (Mc 8,29).
Ciertamente, quienes nos llamamos cristianos tenemos el deber fundamental de descubrir nuestra identidad para dar razón de nuestra fe, siendo unos buenos testigos con nuestra vida. Este deber nos urge para poder transmitir un mensaje claro y comprensible a nuestros hermanos y hermanas que pueden encontrar en Jesús una Palabra de Vida que dé sentido a todo lo que piensan, dicen y hacen. Pero este testimonio ha de comenzar siendo nosotros mismos conscientes de nuestro encuentro personal con Él. Juan Pablo II, en su Carta apostólica Novo millennio ineunte, nos escribió: «Nuestro testimonio sería enormemente deficiente si nosotros no fuésemos los primeros contempladores de su rostro».
San Marcos, con este texto, nos ofrece un buen camino de contemplación de Jesús. Primero, Jesús nos pregunta qué dice la gente que es Él; y podemos responder, como los discípulos: Juan Bautista, Elías, un personaje importante, bueno, atrayente. Una respuesta buena, sin duda, pero lejana todavía de la Verdad de Jesús. Él nos pregunta: «Y vosotros, quién decís que soy yo?». Es la pregunta de la fe, de la implicación personal. La respuesta sólo la encontramos en la experiencia del silencio y de la oración. Es el camino de fe que recorre Pedro, y el que hemos de hacer también nosotros.
Hermanos y hermanas, experimentemos desde nuestra oración la presencia liberadora del amor de Dios presente en nuestra vida. Él continúa haciendo alianza con nosotros con signos claros de su presencia, como aquel arco puesto en las nubes prometido a Noé.
Rev. D. Joan Pere Pulido i Gutiérrez (Molins de Rei-Barcelona, España)



Santoral Católico


San Auxibio, obispo


Auxibio nació en Roma, de padres idólatras y tenía carácter dulce y honesto. Para asegurarle un puesto en el desempeño de los cargos públicos, su padre quiso que contrajera un matrimonio ventajoso, pero el santo tenía otros propósitos y pensaba en hacerse cristiano, huyendo de la ciudad y embarcándose en secreto hacia la isla de Chipre.

En dicho lugar, Auxibio encontró a Juan Marcos, pariente de San Bernabé quien lo bautizó, confirmó y lo instruyó sobre como predicar para luego ordenarlo sacerdote y obispo. Juan Marco le confió también la misión de predicar en la ciudad de Soles, donde fue acogido favorablemente por un sacerdote de Júpiter, a quien lo edificó con su vida santa, hasta llegar a convertirlo.

El Apóstol Pablo supo por Juan Marcos los progresos que hacía la fe en Chipre y le confió a Heracles el poder de instituir más obispo y de construir una nueva Iglesia. Auxibio empezó a predicar la fe en pleno día y luego de la construcción y consagración del nuevo edificio, comenzó su obra de apostolado a la vista de todos.

La gracia de Dios lo sostuvo y los milagros corroboraron su predicación de modo que llegó a formar en Soles una comunidad cristiana floreciente. Después de un episcopado de 50 años, Auxibio sintió que se aproximaba su fin y reunió a su clero y los exhortó a permanecer firme en la fe.



Pensamiento


"La esperanza es como el pajarillo que presiente el amanecer y canta con sigilo en medio de la oscuridad"



Tema del día:
Diálogo de Dios con el alma pecadora



– Jesús: No tengas miedo, alma pecadora, de tu Salvador; Yo soy el primero en acercarme a ti, porque sé que por ti misma no eres capaz de ascender hacia Mí. No huyas, hija, de tu Padre; desea hablar a solas con tu Dios de la Misericordia que quiere decirte personalmente las palabras de perdón y colmarte de Sus gracias. Oh, cuánto me es querida tu alma. Te he asentado en Mis brazos. Y te has grabado como una profunda herida en Mi Corazón.

– El alma: Señor, oigo Tu voz que me llama a abandonar el mal camino, pero no tengo ni valor ni fuerza.

– Jesús: Yo soy tu fuerza, Yo te daré fuerza para luchar.

– El alma: Señor, conozco Tu santidad y tengo miedo de Ti.

– Jesús: ¿Por qué tienes miedo, hija Mía, del Dios de la Misericordia? Mi santidad no Me impide ser misericordioso contigo. Mira, alma, por ti he instituido el trono de la misericordia en la tierra y este trono es el tabernáculo y de este trono de la misericordia deseo bajar a tu corazón. Mira, no me he rodeado ni de séquito ni de guardias, tienes el acceso a Mí en cualquier momento, a cualquier hora del día deseo hablar contigo y deseo concederte gracias.

– El alma: Señor, temo que no me perdones un número tan grande de pecados; mi miseria me llena de temor.

– Jesús: Mi misericordia es más grande que tu miseria y la del mundo entero. ¿Quién ha medido Mi bondad? Por ti bajé del cielo a la tierra, y por ti dejé clavarme en la cruz, por ti permití que Mi Sagrado Corazón fuera abierto por una lanza, y abrí la Fuente de la Misericordia para ti. Ven y toma las gracias de esta fuente con el recipiente de la confianza. Jamás rechazaré un corazón arrepentido, tu miseria se ha hundido en el abismo de Mi misericordia. ¿Por qué habrías de disputar Conmigo sobre tu miseria? Hazme el favor, dame todas tus penas y toda tu miseria y Yo te colmaré de los tesoros de Mis gracias.

– El alma: Con Tu bondad has vencido, oh Señor, mi corazón de piedra; heme aquí acercándome con confianza y humildad al tribunal de Tu misericordia, absuélveme Tú Mismo por la mano de Tu representante. Oh Señor, siento que la gracia y la paz han fluido a mi pobre alma. Siento que Tu misericordia, Señor, ha penetrado mi alma en su totalidad. Me has perdonado más de cuanto yo me atrevía esperar o más de cuanto era capaz de imaginar. Tu bondad ha superado todos mis deseos. Y ahora Te invito a mi corazón, lleno de gratitud por tantas gracias. Había errado por el mal camino como el hijo pródigo, pero Tú no dejaste de ser mi Padre. Multiplica en mí Tu misericordia, porque ves lo débil que soy.

– Jesús: Hija, no hables más de tu miseria, porque Yo ya no Me acuerdo de ella. Escucha, niña Mía, lo que deseo decirte: estréchate a Mis heridas y saca de la fuente de la vida todo lo que tu corazón pueda desear. Bebe copiosamente de la fuente de la vida y no pararás durante el viaje. Mira el resplandor de Mi misericordia y no temas a los enemigos de tu salvación. Glorifica Mi misericordia.

“Difusora Mariana Chilena”
Don Pasiri.




Meditación breve



Según la afirmación de Jesús, existen muchos ángeles en el cielo. Están al servicio de la obra creadora, redentora y santificadora de la Trinidad.
El mismo Señor, cuando vivió en esta tierra, podría haber utilizado a los ángeles para facilitar su tarea. Sin embargo, quiso contar con su fe en la fidelidad del Padre.
De este ejemplo podemos aprender también nosotros: hagamos lo que está al alcance de nuestras manos. No esperemos que Dios lo resuelva todo solo o con milagros.
Los ángeles están a nuestro alrededor para protegernos de los peligros, sobre todo de la tentación del desánimo, de que busquemos soluciones mágicas o inmediatistas.
¡Construyamos el bien paso a paso!
Sergio J. De Souza



Pedidos de oración



Pedimos oración por un bebé de dos añitos de edad que ha contraído Sindrome Urémico Hemolítico y cuyo nombre es Lisandro. Que el buen Jesús lo proteja y lo cure de su enfermedad y alivie la angustia de toda su familia.



Nuestra lectora Carlonia de B., que vive en Guatemala, Centroamérica, nos pide oraciones por su esposo, del cual se encuentra alejada porque él anda en malos pasos vinculados con la drogadicción, para que la Virgen del Santo Rosario lo proteja y Jesús lo ilumine para que recupere su sentido de responsabilidad y pueda darse de ese modo la recomposición matrimonial y familiar.



Nuestra lectora Marina R. G., de Argentina, nos pide oraciones por su sobrino y ahijado en gestación, Sebastián, su mamá Analía y su papá Javier, que están pasando por una situación difícil porque hay mucho líquido en la gestación y podría producirse el nacimiento antes de tiempo o bien tener que terminar el embarazo en reposo absoluto. Toda la familia, muy preocupada, pide oraciones.



Nuestra lectora María del Carmen S. A., nos pide oraciones por la familia U. P. (no publicamos apellidos) que viven en México, cuyo hijo de 7 años se cayó y se produjo un traumatismo de cráneo y se está recuperando. Que la Santísima Virgen los ayude a recuperar la plena normalidad y la tranquilidad que hoy no tienen por esta razón.



Pedimos oración por Paquito F., que vive en Los Ángeles, California, y se encuentra muy enfermo, en diálisis y con problemas hepáticos también. Que el Señor Misericordioso lo ayude a restablecer su salud.



Pedimos oración por la señora Rosa Margarita D. S., que vive en Nicaragua, y que está afectada desde hace cuatro años por un derrame cerebral que la ha dejado postrada en silla de ruedas, y ahora también tiene problemas en la visión por diabetes. Además, su hija Cris ha perdido recientemente un embarazo lo cual la sume en la tristeza. Pidamos a Dios y a la Virgen Milagrosa por la salud de la señora Rosa y por la mejoría anímica de su hija.



Pedimos oracióon por Diego y Stephanie V., de Houston, Texas, USA. Que el Señor siempre los acompañe para que sigan el buen camino y sean personas útiles y llenas de amor hacia ellos mismos y los demás. Que la Santísima Madre María sea su consejera y amiga todos los días de sus vidas.



Pedimos oración por Valeria, de Mar del Plata, Argentina, que atraviesa un momento muy difícil de su vida. Que el Señor con su infinita bondad y María con su amor de Madre, la ayuden a superar sus dificultades actuales.



Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.



Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro



La madre es la lágrima que llora todas nuestras penas, la sonrisa que alegra todas nuestras dichas, el perdón que se nos ofrece para nuestras culpas, la mano siempre tendida para ayudarnos, el corazón siempre latiendo por nosotros, amándonos como sólo una madre puede y sabe amar, la oración elevada a los cielos por nuestras necesidades, el pensamiento que siempre nos tiene presentes.
Eso es una madre y esa es María y todo eso hace María con nosotros. Cuando uno toma conciencia de que es hijo de María, la vida se transforma.

María, te pedimos que en cada uno de nuestros hogares permanezca encendido "el fuego" de la familia de Nazaret.


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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miércoles, 18 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0645

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0645 ~ Miércoles 18 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)



Hola !!!
Sé optimista y no dejes que el pesimismo ni la negatividad se apoderen de ti. No te acostumbres a ver nublados los amaneceres.
No quieras asegurar por anticipado el éxito de lo que emprendas, porque así nunca vas a hacer nada. Cree en ti, cree en los demás, cree en lo que haces. La Biblia dice que Abrahám creyó contra toda esperanza y fue recompensado.
Con alegría, optimismo, esperanzas, fe, salud, perseverancia, positivismo y amor, todo podremos lograr lo que en la vida queramos para nuestros semejantes y para nosotros mismos.


La Palabra de Dios : Evangelio del día


En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos llegan a Betsaida. Le presentan un ciego y le suplican que le toque. Tomando al ciego de la mano, le sacó fuera del pueblo, y habiéndole puesto saliva en los ojos, le impuso las manos y le preguntaba: «¿Ves algo?». Él, alzando la vista, dijo: «Veo a los hombres, pues los veo como árboles, pero que andan». Después, le volvió a poner las manos en los ojos y comenzó a ver perfectamente y quedó curado, de suerte que veía claramente todas las cosas. Y le envió a su casa, diciéndole: «Ni siquiera entres en el pueblo».
(Marcos 8, 22-26)

Comentario
Hoy a través de un milagro, Jesús nos habla del proceso de la fe. La curación del ciego en dos etapas muestra que no siempre es la fe una iluminación instantánea, sino que, frecuentemente requiere un itinerario que nos acerque a la luz y nos haga ver claro. No obstante, el primer paso de la fe —empezar a ver la realidad a la luz de Dios— ya es motivo de alegría, como dice san Agustín: «Una vez sanados los ojos, ¿qué podemos tener de más valor, hermanos? Gozan los que ven esta luz que ha sido hecha, la que refulge desde el cielo o la que procede de una antorcha. ¡Y cuán desgraciados se sienten los que no pueden verla!».
Al llegar a Betsaida traen un ciego a Jesús para que le imponga las manos. Es significativo que Jesús se lo lleve fuera; ¿no nos indicará esto que para escuchar la Palabra de Dios, para descubrir la fe y ver la realidad en Cristo, debemos salir de nosotros mismos, de espacios y tiempos ruidosos que nos ahogan y deslumbran para recibir la auténtica iluminación?
Una vez fuera de la aldea, Jesús «le untó saliva en los ojos, le impuso las manos y le preguntó: ‘¿Ves algo?’» (Lc 8,23). Este gesto recuerda al Bautismo: Jesús ya no nos unta saliva, sino que baña todo nuestro ser con el agua de la salvación y, a lo largo de la vida, nos interroga sobre lo que vemos a la luz de la fe. «Le puso otra vez las manos en los ojos; el hombre miró: estaba curado, y veía todo con claridad» (Lc 8,25); este segundo momento recuerda el sacramento de la Confirmación, en el que recibimos la plenitud del Espíritu Santo para llegar a la madurez de la fe y ver más claro. Recibir el Bautismo, pero olvidar la Confirmación nos lleva a ver, sí, pero sólo a medias.
Rev. D. Joaquim Meseguer i García (Sant Quirze del Vallès-Barcelona, España)



Santoral Católico


San Simeón, obispo y mártir



El Evangelio de San Mateo describe a San Simeón como uno de los parientes o hermanos del Señor. Su padre era Cleofás, hermano de San José, y su madre, era hermana de la Virgen María, siendo Simeón primo carnal del Señor. Sin duda, el santo fue uno de los hermanos de Jesús que recibió el Espíritu Santo el día de Pentecostés.

Siendo asesinado Santiago el menor por lo judíos, los apóstoles y discípulos se reunieron para elegir a su sucesor en la sede de Jerusalén y por unanimidad escogieron a Simeón. El año 66 estalló en Palestina la guerra civil a consecuencia de la oposición de los judíos a los romanos y parece que los cristianos de Jerusalén recibieron del cielo el aviso de que la ciudad sería destruida y que debían salir de ella sin tardanza, refugiándose con el santo en la ciudad de Pela.

Después de la toma y destrucción de Jerusalén, los cristianos volvieron y se establecieron en las ruinas, hasta que el emperador Adriano arrasó con los escombros, pero este hecho permitió que la Iglesia floreciera grandemente y que numerosos judíos se convirtieran al cristianismo debido a los milagros obrados por los santos. Vespaciano y Domiciano mandaron a matar a todos los miembros descendientes de David, pero Simeón consiguió escapar.

Sin embargo, durante la persecución de Trajano, fue denunciado como cristiano y descendiente de David, siendo sentenciado a muerte por el gobernador romano Atico. Fue torturado y crucificado, soportando con fortaleza y valentía el suplicio, pese a que contaba con 120 años.


Nota:

Hoy, 18 de febrero, tan sólo en Francia se la festeja a Santa Bernardita Soubirous. En el resto del mundo su fecha es el 16 de abril.




Pensamiento



"Si os manifestais fieles a mi Padre seréis verdaderamente mis discípulos y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres"
Jesucristo (Jn 8, 31-32)



Tema del día : Los desencadenantes del éxito



— La estrategia.

La planificación del modo más adecuado de proceder y la organización bien razonada de todos los recursos de que disponemos pueden ser, sin duda, determinantes. Hay estrategias, recetas o formas de proceder que nos garantizan el éxito en diferentes metas u objetivos; por eso es tan importante diseñarlas.

— La fe en el éxito.

La ilusión, el entusiasmo y la pasión son los detonantes que siempre se dan la mano y arrastran a la acción de forma coordinada y conjunta. “Pueden porque creen que pueden”, decía Virgilio. Y es que sólo creyendo firmemente en uno mismo y en las propias capacidades y valores se está en la mejor disposición de lograr algo. La fe en lo que somos y en lo que podemos llegar a ser determina con bastante exactitud lo que seremos en realidad. Nuestra fe, nuestra ilusión, deben ir propulsadas por la pasión, esa arrolladora fuerza interior que pulveriza las dificultadas y desconoce la palabra imposible. Esta pasión esta encaminada como energía canalizada y alentada por una noble e incontenible obsesión, la misma que llevo a Thomas Alba Edison, a fabricar diez mil bombillas defectuosas hasta que consiguió dar con la bombilla perfecta.

— Una escala de valores morales.

Es necesario contar con una escala de valores o juicios de carácter ético, y moral práctica, que nos sirvan para juzgar lo que está bien y lo que está mal; lo que verdaderamente importa, lo que realmente merece nuestros esfuerzos, desvelos y sacrificios.

—La fuerza, la vitalidad, el vigor físico y psíquico.

No hay que dormirse en los laureles, sino buscar incansablemente nuevas oportunidades que aprovechar al máximo. Esta es una de las características de las personas eficaces, quienes saben, además, hacer del buen empleo del tiempo su principal aliado.

— Las buenas relaciones con los demás.

Sentirse apoyado. Entendido y valorado por las “personas adecuadas” que nos activan a ser activos y emprendedores y hacer oídos sordos a los mensajes desalentadores y pesimistas de los temerosos y los desconfiados. ¿Quiénes son “personas adecuadas”? Las que mantienen una contagiosa actitud mental positiva, pues están habituadas a vencer dificultades, tienen ideas bien claras sobre sus objetivos, poseen gran vitalidad psíquica, nos arrastran a la acción con su ejemplo y nos sirven de inapreciable modelo que imitar.

Despójate de los temores del pasado; cada cual se labra su felicidad o su desgracia. Eres tú quien eliges y sentencias tu vida con tus acciones, con tu conducta.

Finalizamos con una frase de O. S. Marden para leerla cada día, nada más levantarte: "Procura que todas las ocasiones sean una gran ocasión, por que no puedes decir cuando el destino puede tomarte las medidas para un puesto más alto".

Autor Bernabé Tierno
Enviado por Patricia Ortiz




Meditación breve



¡Ama lo que tienes! Es bueno que desees algo mejor que lo que posees actualmente, pero no le restes valor a lo que has ganado hasta ahora con tanto sacrificio.
¡Ama lo que eres! No importa el rol que desempeñes, ama lo que haces; busca lo positivo que tiene cada cosa. Rodéate de personas optimistas; sus vibraciones te llegarán.
¡No hagas caso del "qué dirán"! Intenta ser siempre tú. Da lo mejor de ti cada día; lo importante es llegar a la meta, no es el tiempo que tomes en arribar. En la vida hay recompensa para todos. En cada paso que des deja tu huella. Hay personas tímidas y silenciosas que han dejado grandes huellas, porque el tesoro no está en "decir", sino en "hacer"
¡Ama con el corazón! Cuando es éste quien habla, las palabras sobran.




Pedidos de oración



Pedimos oración por el joven Manuel Antonio T., que vive en República Dominicana, tiene 24 años de edad, y sufrió un derrame cerebral, está en estado de inconciencia y los médicos dicen que sólo un milagro puede salvarlo. Que Dios Nuestro Señor obre ese milagro para que este hijo suyo recupere su salud.



Pedimos oración por la salud de María Cristina D.L.V., de Buenos Aires, Argentina, lectora de esta página y afectada de diabetes con mucha inestabilidad metabólica, lo cual la deprime y la entristece. Que la Santísima Virgen le de todo su apoyo emocional y físico para que pueda sobrellevar esta enfermedad crónica de la mejor manera.



Pedimos oración por Armando, por Rafael y por Miguel Angel, todos de Puebla, México, para que el Señor satisfaga sus necesidades laborales.



Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.



Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro



Jesús es la Verdad y la Vida. Por eso la Madre de Jesús es la Madre de la Verdad y la Vida. Madre de la Verdad, porque nos conduce a la Verdad, que es Jesús.
Quien está en Jesús permanece en la Verdad y está ciertamente con María. María se convierte así en el camino más rápido y seguro para llegar a la Verdad y a la Vida.

María, que consagraste tu vida a la obra de tu Hijo, ayúdanos a comprometernos en el servicio a nuestros hermanos.


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-



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martes, 17 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0644

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0644 ~ Martes 17 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)



Hola !!!
Iniciamos hoy la edición de "Pequeñas Semillitas" con esta reflexión de R. Steele:
La mejor manera de pasar fácilmente por una situación difícil es con buen humor. Cuanto más usted se irrita con determinada situación, más usted se desgasta y más ella persiste. Use el buen humor, y la situación va a desaparecer como humo delante del viento...



La Palabra de Dios : Evangelio del día



En aquel tiempo, los discípulos se habían olvidado de tomar panes, y no llevaban consigo en la barca más que un pan. Jesús les hacía esta advertencia: «Abrid los ojos y guardaos de la levadura de los fariseos y de la levadura de Herodes». Ellos hablaban entre sí que no tenían panes. Dándose cuenta, les dice: «¿Por qué estáis hablando de que no tenéis panes? ¿Aún no comprendéis ni entendéis? ¿Es que tenéis la mente embotada? ¿Teniendo ojos no veis y teniendo oídos no oís? ¿No os acordáis de cuando partí los cinco panes para los cinco mil? ¿Cuántos canastos llenos de trozos recogisteis?». «Doce», le dicen. «Y cuando partí los siete entre los cuatro mil, ¿cuántas espuertas llenas de trozos recogisteis?» Le dicen: «Siete». Y continuó: «¿Aún no entendéis?».
(Marcos 8, 14-21)

Comentario
Hoy notamos que Jesús —como ya le pasaba con los Apóstoles— no siempre es comprendido. A veces se hace difícil. Por más que veamos prodigios, y que se digan las cosas claras, y se nos comunique buena doctrina, merecemos su reprensión: «¿Aún no comprendéis ni entendéis? ¿Es que tenéis la mente embotada?» (Mc 8,17).
Nos gustaría decirle que le entendemos y que no tenemos el entendimiento ofuscado, pero no nos atrevemos. Sí que osamos, como el ciego, hacerle esta súplica: «Señor, que vea» (Lc 18,41), para tener fe, y para ver, y como el salmista dice: «Inclina mi corazón a tus dictámenes, y no a ganancia injusta» (Sal 119,36) para tener buena disposición, escuchar y acoger la Palabra de Dios y hacerla fructificar.
Será bueno también, hoy y siempre, hacer caso a Jesús que nos alerta: «Abrid los ojos y guardaos de la levadura de los fariseos» (Mc 8,15), alejados de la verdad, “maniáticos cumplidores”, que no son adoradores en Espíritu y en verdad (cf. Jn 4,23), y «de la levadura de Herodes», orgulloso, despótico, sensual, que sólo quiere ver y oír a Jesús para complacerse.
Y, ¿cómo preservarnos de esta “levadura”? Pues haciendo una lectura continua, inteligente y devota de la Palabra de Dios y, por eso mismo, “sabia”, fruto de ser «piadosos como niños: pero no ignorantes, porque cada uno ha de esforzarse, en la medida de sus posibilidades, en el estudio serio, científico de la fe (...). Piedad de niños, pues, y doctrina segura de teólogos» (San Josemaría).
Así, iluminados y fortalecidos por el Espíritu Santo, alertados y conducidos por los buenos Pastores, estimulados por los cristianos y cristianas fieles, creeremos lo que hemos de creer, haremos lo que hemos de hacer. Ahora bien, hay que “querer” ver: «Y el Verbo se hizo carne» (Jn 1,14), visible, palpable; hay que “querer” escuchar: María fue el “cebo” para que Jesús dijera: «Dichosos más bien los que escuchan la palabra de Dios y la guardan» (Lc 11,28).
+ Rev. D. Lluís Roqué i Roqué (Manresa-Barcelona, España)



Santoral Católico


Siete Santos Fundadores



Eran siete amigos, comerciantes de la ciudad de Florencia, Italia. Sus nombres: Alejo, Amadeo, Hugo, Benito, Bartolomé, Gerardino y Juan.

Pertenecían a una asociación de devotos de la Virgen María, que había en Florencia, y poco a poco fueron convenciéndose de que debían abandonar lo mundano y dedicarse a la vida de santidad. Vendieron sus bienes, repartieron el dinero a los pobres y se fueron al Monte Senario a rezar y a hacer penitencia. La idea de irse a la montaña a santificarse, les llegó el 15 de agosto, fiesta de la Asunción de la Sma. Virgen, y la pusieron en práctica el 8 de septiembre, día del nacimiento de Nuestra Señora. Ellos se habían propuesto propagar la devoción a la Madre de Dios y confiarle a Ella todos sus planes y sus angustias. A tan buena Madre le encomendaron que les ayudara a convertirse de sus miserias espirituales y que bendijera misericordiosamente sus buenos propósitos. Y dispusieron llamarse "Siervos de María" o "Servitas".

En el monte Senario se dedicaban a hacer muchas penitencias y mucha oración, pero un día recibieron la visita del Sr. Cardenal delegado del Sumo Pontífice, el cual les recomendó que no se debilitaran demasiado con penitencias excesivas, y que más bien se dedicaran a estudiar y se hicieran ordenar sacerdotes y se pusieran a predicar y a propagar el evangelio. Así lo hicieron, y todos se ordenaron de sacerdotes, menos Alejo, el menor de ellos, que por humildad quiso permanecer siempre como simple hermano, y fue el último de todos en morir.

Un Viernes Santo recibieron de la Sma. Virgen María la inspiración de adoptar como Reglamento de su Asociación la Regla escrita por San Agustín, que por ser muy llena de bondad y de comprensión, servía para que se pudieran adaptar a ella los nuevos aspirantes que quisieran entrar en su comunidad. Así lo hicieron, y pronto esta asociación religiosa se extendió de tal manera que llegó a tener cien conventos, y sus religiosos iban por ciudades y pueblos y campos evangelizando y enseñando a muchos con su palabra y su buen ejemplo, el camino de la santidad. Su especialidad era una gran devoción a la Santísima Virgen, la cual les conseguía maravillosos favores de Dios.

El más anciano de ellos fue nombrado superior, y gobernó la comunidad por 16 años. Después renunció por su ancianidad y pasó sus últimos años dedicado a la oración y a la penitencia. Una mañana, mientras rezaba los salmos, acompañado de su secretario que era San Felipe Benicio, el santo anciano recostó su cabeza sobre el corazón del discípulo y quedó muerto plácidamente. Lo reemplazó como superior otro de los Fundadores, Juan, el cual murió pocos años después, un viernes, mientras predicaba a sus discípulos acerca de la Pasión del Señor. Estaba leyendo aquellas palabras de San Lucas: "Y Jesús, lanzando un fuerte grito, dijo: ¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu!" (Lc. 23, 46). El Padre Juan al decir estas palabras cerró el evangelio, inclinó su cabeza y quedó muerto muy santamente.

Lo reemplazó el tercero en edad, el cual, después de gobernar con mucho entusiasmo a la comunidad y de hacerla extender por diversas regiones, murió con fama de santo.

El cuarto, que era Bartolomé, llevó una vida de tan angelical pureza que al morir se sintió todo el convento lleno de un agradabilísimo perfume, y varios religiosos vieron que de la habitación del difunto salía una luz brillante y subía al cielo.

De los fundadores, Hugo y Gerardino, mantuvieron toda la vida entre sí una grande y santísima amistad. Juntos se prepararon para el sacerdocio y mutuamente se animaban y corregían. Después tuvieron que separarse para irse cada uno a lejanas regiones a predicar. Cuando ya eran muy ancianos fueron llamados al Monte Senario para una reunión general de todos los superiores. Llegaron muy fatigados por su vejez y por el largo viaje. Aquella tarde charlaron emocionados recordando sus antiguos y bellos tiempos de juventud, y agradeciendo a Dios los inmensos beneficios que les había concedido durante toda su vida. Rendidos de cansancio se fueron a acostar cada uno a su celda, y en esa noche el superior, San Felipe Benicio, vio en sueños que la Virgen María venía a la tierra a llevarse dos blanquísimas azucenas para el cielo. Al levantarse por la mañana supo la noticia de que los dos inseparables amigos habían amanecido muertos, y se dio cuenta de que Nuestra Señora había venido a llevarse a estar juntos en el Paraíso Eterno a aquellos dos que tanto la habían amado a Ella en la tierra y que en tan santa amistad habían permanecido por años y años, amándose como dos buenísimos hermanos.

El último en morir fue el hermano Alejo, que llegó hasta la edad de 110 años. De él dijo uno que lo conoció: "Cuando yo llegué a la Comunidad, solamente vivía uno de los Siete Santos Fundadores, el hermano Alejo, y de sus labios oímos la historia de todos ellos. La vida del hermano Alejo era tan santa que servía a todos de buen ejemplo y demostraba como debieron ser de santos los otros seis compañeros". El hermano Alejo murió el 17 de febrero del año 1310.



Pensamiento



"No ores por una vida fácil... ora para ser más fuerte. No pidas por tareas iguales a tus fuerzas... ora por fuerzas iguales a tus tareas"



Tema del día : No te pude esperar



Una vez un hombre muy afortunado había conseguido la mejor entrevista de su vida: Iba a entrevistar ni más ni menos que a Dios. Esa tarde el hombre llegó a su casa dos horas antes, se arregló con sus mejores ropas, lavó su automóvil e inmediatamente salió de su hogar.

Maniobró por la avenida principal rumbo a su cita, pero en el trayecto cayó un chubasco que produjo un embotellamiento de tránsito y quedó parado. El tiempo transcurría, eran las 7:30 y la cita era a las 8:00 p.m.

Repentinamente le tocaron el cristal de la ventanilla y al girarse vio a un chiquillo de unos nueve años ofreciéndole su cajita llena de chicles (goma de mascar). El hombre sacó algún dinero de su bolsillo y cuando lo iba a entregar al niño ya no lo encontró. Miró hacia el suelo y ahí estaba, en medio de un ataque de epilepsia.

El hombre abrió la portezuela e introdujo al niño como pudo al automóvil. Inmediatamente buscó como salir del embotellamiento y lo logró, dirigiéndose al hospital de la Cruz Roja más cercano. Ahí entregó al niño, y después de pedir que lo atendiesen de la mejor forma posible, se disculpó con el doctor y salió corriendo para tratar de llegar a su cita con Dios.

Sin embargo, el hombre llegó 10 minutos tarde y Dios ya no estaba. El hombre se ofendió y le reclamó al cielo: "Dios mío, pero tú te diste cuenta, no llegué a tiempo por el niño, no me pudiste esperar. ¿Qué significan 10 minutos para un ser eterno como tú?".

Desconsolado se quedó sentado en su automóvil; de pronto lo deslumbró una luz y vio en ella la carita del niño a quien auxilió. Vestía el mismo suetercito deshilachado, pero ahora tenía el rostro iluminado de bondad.

El hombre, entonces, escuchó en su interior una voz: - Hijo mío, no te pude esperar... y salí a tu encuentro.

Web Católico de Javier
http://webcatolicodejavier.org/



Meditación breve



Señor; sé que puedo hablarte, sé que puedo confiarte cosas grandes y cosas pequeñas porque Tú eres mi Señor. Hoy quiero pedirte algo muy especial; quiero poner en tus manos la persona de quien estoy enamorado/a, aquella con quien deseo compartir mi vida entera.
Te pido que la bendigas, la cuides y la ayudes. Donde quiera que esté, bendice su camino, conserva su ánimo, guía sus pasos, fortalece su corazón, muéstrale tu misericordia y llénala de alegría. No permitas que nada dañe sus sentimientos hacia mí y auméntale su capacidad de amarme. Donde quiera que ella se encuentre, bendice a esta persona y cúbrela con tu manto sagrado del amor.
Y a mí Señor, ayúdame a ser cada día mejor, y hazme digno de estar a su lado.
Amén


Pedidos de oración



Pedimos oración por la salud de Eduardo D. S., de 70 años de edad, que vive en Santa Cruz, Bolivia, y que mañana será sometido a una difícil intervención quirúrgica. Que la Santísima Virgen, de la cual es muy devoto, lo acompañe, lo proteja y le permita recuperar la plenitud de su salud.



Pedimos oración por Rosa Edith A. L., que vive en Pachuca, Hidalgo, México, que está pasando una situación de profesión muy difícil y está sumida en depresión y tristeza. Que la Virgen Santísima le den paz, esperanza y la luz que ilumine el camino para orientarla en su carrera.



Nuestra lectora María Mercedes, de Costa Rica, Centroamérica, nos pide oraciones por su hija que está con diagnóstico de leucemia linfocítica aguda, y por el hijo mayor de ésta que está sumido en el mundo de la drogadependencia. Que Dios misericordioso se apiade de ellos y les lleve sanación física y espiritual.



Nuestra lectora Martha R. nos pide oraciones por su tía María, que será operada hoy en ciudad de México para extirparle un tumor. Que Dios y la Virgen la acompañen y la protejan en esta operación.



Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.



Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro



La Iglesia pone en los labios de la Virgen estas palabras: "Yo soy la Madre del buen Consejo". Sin embargo, tal vez ella pueda reprendernos diciéndonos: "Soy la Madre del buen Consejo, pero no me piden mi parecer".
Acertaríamos mucho más en nuestras determinaciones, serían mucho más prudentes nuestras decisiones, si antes de tomarlas consultáramos con nuestra Madre del cielo.
Cuando una madre aconseja a su hijo, siempre está acertada; pero cuando esa madre es la misma Madre de Dios, estamos absolutamente seguros de estar en la verdad.

María, confiamos en tu consejo para que él nos guíe a Jesús, en todo tiempo y circunstancia de nuestra vida.


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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lunes, 16 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0643

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0643 ~ Lunes 16 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)



Hola !!!
Hoy quiero iniciar la presente edición de “Pequeñas Semillitas” transcribiendo algunos párrafos de Alicia de Verón, de Radio María Argentina:

Se presienten los pasos de Dios en la tierra. Se percibe su voz que nos llama: ¿Dónde estás?... y casi que estalla nuestro corazón cuando nos pregunta: ¿Dónde está tu hermano?
Algunos nos escondimos Señor. Tuvimos miedo… nos descubrimos groseramente desnudos, incapaces de enfrentar tu mirada…
Otros contestamos con arrogancia para encubrir nuestro interior: "¿Acaso soy yo guardián de mi hermano? ¿Qué tengo que ver con la muerte de Eluana, con el niño abortado en Santiago del Estero y en tantos miles de lugares públicos y clandestinos? ¿Qué me preguntas a mí Señor, de la crisis de desempleo que azota a las naciones, de los muertos en Irak, de los desvastadores incendios en Australia, de los desaparecidos en Tartagal, de los muertos y secuestrados por la mafia, de los jóvenes que se drogan en las calles?
En este panorama viene a nuestra mente las palabras del apóstol: "Quiero que sepas que en los últimos tiempos sobrevendrán momentos difíciles. Porque los hombres serán egoístas, soberbios, rebeldes, impíos, incapaces de amar,..." 2Tim 3,1-9
El tiempo que transcurrimos es extremadamente doloroso pero también sumamente fecundo, porque la misericordia de Dios sobrepasa toda esta miseria, porque su amor desborda todo límite, todo lo que podamos pensar o creer, y porque "la prueba de que Dios nos ama es que Cristo murió por nosotros cuando todavía éramos pecadores. Y ahora que estamos justificados por su sangre, con mayor razón seremos librados por él de la ira de Dios. …"
Por esta razón nos postramos ante Ti Señor, para darte gracias por tanto amor, por tanta bondad. Nuestra alma se eleva hacia Ti para alabarte por tu fidelidad, por este constante abajamiento hacia nosotros tus hijos y hacernos sentir tu cariño de Padre.



La Palabra de Dios : Evangelio del día


En aquel tiempo, salieron los fariseos y comenzaron a discutir con Jesús, pidiéndole una señal del cielo, con el fin de ponerle a prueba. Dando un profundo gemido desde lo íntimo de su ser, dice: «¿Por qué esta generación pide una señal? Yo os aseguro: no se dará a esta generación ninguna señal». Y, dejándolos, se embarcó de nuevo, y se fue a la orilla opuesta.
(Marcos 8, 11-13)

Comentario
Hoy, el Evangelio parece que no nos diga mucho ni de Jesús ni de nosotros mismos. «¿Por qué esta generación pide una señal?» (Mc 8,12). Juan Pablo II, comentando este episodio de la vida de Jesucristo, dice: «Jesús invita al discernimiento respecto a las palabras y las obras que testifican (son “señal de”) la llegada del reino del Padre». Parece que a los judíos que interrogan a Jesús les falta la capacidad o la voluntad de discernir aquella señal que —de hecho— es toda la actuación, obras y palabras del Señor.
También hoy día se piden señales a Jesús: que haga notar su presencia en el mundo o que nos diga de una manera evidente cómo hemos de actuar nosotros. El Papa nos hace ver que la negativa de Jesucristo a dar una señal a los judíos —y, por tanto, también a nosotros— se debe a que quiere «cambiar la lógica del mundo, orientada a buscar signos que confirmen el deseo de autoafirmación y de poder del hombre». Los judíos no querían un signo cualquiera, sino aquel que indicara que Jesús era el tipo de mesías que ellos esperaban. No aguardaban al que venía para salvarlos, sino el que venía a dar seguridad a su visión de cómo se tenían que hacer las cosas.
En definitiva, cuando los judíos del tiempo de Jesús como también los cristianos de ahora pedimos —de una manera u otra— una señal, lo que hacemos es pedir a Dios que actúe según nuestra manera, la que nosotros creemos más acertada y que de hecho apoya a nuestro modo de pensar. Y Dios, que sabe y puede más (y por eso pedimos en el Padrenuestro que se haga “su” voluntad), tiene sus caminos, aunque a nosotros no nos sea fácil comprenderlos. Pero Él, que se deja encontrar por todos los que le buscan, también, si le pedimos discernimiento, nos hará comprender cuál es su manera de obrar y cómo podemos distinguir hoy sus signos.
Rev .D. Jordi Pou i Sabaté (Sant Jordi Desvalls-Girona, España)



Santoral Católico


San Macario, sacerdote


Etimológicamente Macario significa “feliz”. Viene de la lengua griega.

Este joven creció en la dureza del desierto apacentando un pequeño ganado. En este lugar solitario aprendió el arte de la oración y de la penitencia que suponen los rigores de ese infértil campo. No le faltaron peligros, mentiras y hasta calumnias. Todo ser que se entrega a Dios, sufre tentaciones como cualquier mortal.

Una mujer pregonó por todos sitios que el hijo que esperaba era fruto de su relación con el joven Macario. La gente le tomó coraje. La mujer, al ver que no podía dar a luz y que sentía, sin embargo, los dolores de parto, dijo a todo el mundo que había mentido. Macario mientras tanto, hacía oración en su corazón hasta que la misma gente comenzó a quererlo como se merecía.

La comunidad que seguía a este joven aumentaba cada vez más. Entonces el obispo de Egipto lo ordenó de sacerdote, para que celebrara los sagrados misterios a los chicos que seguían su estilo de vida. Una de las frases bíblicas que más le impactaron fue la del Evangelio: "Si alguno quiere ser mi discípulo, tiene que negarse a sí mismo".

Nadie – hasta ahora – puede vencer sus malas inclinaciones si no es mediante la disciplina, el control de sí mismo, la oración y la penitencia. El mismo pudo exclamar:"Si supieras las recompensas que se consiguen mortificando las pasiones del cuerpo, nunca te parecerían demasiadas las mortificaciones que se hacen para conservar la virtud".

Cuando era ya mayor, los herejes arrianos lo desterraron a una isla de la que volvió para derrotarlos. Murió el año 390 a los 90 años.


San Onésimo, mártir


Onésimo era esclavo de Filemón, personaje importante de Colosa de Frigia, convertido al cristianismo por San Pablo. Cuando huía de la justicia, después de haber robado a su amo, Onésimo entró en contacto con San Pablo, quien se hallaba entonces prisionero en Roma. El Apóstol lo convirtió y bautizó y lo envió a la casa de Filemón con una carta de recomendación.

Según parece, Filemón perdonó y puso en libertad a su esclavo arrepentido y lo mandó reunirse de nuevo con San Pablo. Según cuenta San Jerónimo, Onésimo llegó a ser predicador del Evangelio y luego Obispo de Efeso por orden del Apóstol Pablo.

Posteriormente, Onésimo fue hecho prisionero y llevado a Roma, donde murió lapidado.



Pensamiento



"El hecho de que la gente nazca con dos ojos y dos oídos, pero con sólo una lengua, indica que deberían mirar y oír dos veces en proporción a lo que hablan"



Tema del día : Cuidado con el teclado


Un teclado de pc puede alojar más bacterias que las que se hallan en los retretes.

Un biólogo inglés examinó más de treinta teclados con su microscopio y se reveló así que éstos estaban tan sucios que eran una amenaza superior a la que se puede encontrar en un baño o en un picaporte de un lavabo. El teclado más sucio superaba 150 veces las bacterias permitidas y entre las enfermedades capaces de ser contraídas se encontraba aquella que provoca la intoxicación alimentaria.

Pero ¿cómo es posible que se hallen tantos gérmenes en la superficie de un ordenador? “Esto ocurre porque el usuario tiene una tendencia a comer mientras trabaja o se entretiene con su ordenador”, comenta el español José Luis Álvarez Castillo, especialista en enfermedades infecto contagiosas. “Los restos que quedan rondando por ahí por más minúsculos que sean predisponen a la proliferación de bacterias.

También otra causa es la mala higiene personal. “Hay gente que luego de ir al baño no se lava las manos, lo cual puede producir diarreas y demás cuadros que comprometen el aparato digestivo”, continúa diciendo. Otra de las infecciones detectadas en varios teclados ha sido la presencia del staphylococcus aureus, bacteria que se encuentra en la piel y mucosas y que son causantes de graves infecciones.

El estudio ha encuestado a más de cuatro mil usuarios. El once por ciento ha manifestado no haber limpiado jamás su teclado. Un veinte por ciento reveló que nunca limpió su mouse y el cuarenta y seis por ciento dijo haber limpiado el teclado una vez al mes.

Consejos para limpiar el teclado:

- Apagar el pc y la pantalla y dejar que se enfríen.

- Colocar el teclado boja abajo y sacudir con firmeza, pero con cuidado.

- Limpiar con un paño suave. Nunca utilizar spray.

- Lo ideal es utilizar líquidos especiales y no hurgar entre las teclas para quitar la suciedad.

- No usar alcohol para limpiar el monitor.

- Lo mejor para desinfectar el teclado es el alcohol ya que elimina las bacterias, pero se corre el riesgo de que las letras se borren.

- Se aconseja taparlo con una funda cuando no se esté utilizando.

Para tener en cuenta: La reserva de gérmenes que se esconde en un teclado puede ocasionar: gastroenteritis, resfriados, alergias, infecciones estomacales y diarreas.

Enviado por Melissa


Pedidos de oración



Pedimos oración por el niño de dos añitos de edad Juan José, de Asunción, Paraguay, que mañana martes será sometido a una operación bajo anestesia general. Que el Niño Jesús esté junto a él en ese momento y que la divina Providencia guíe las manos de los médicos y acompañe a sus padres hasta su total recuperación.



Pedimos oración por los niños Julieta y Nacho, que viven en Mendoza, Argentina, y que necesitan de la protección de Dios Nuestro Señor y de María nuestra Madre, para poder crecer en medio de un hogar donde se den todas las condiciones de amor y cariño que ellos necesitan.



Pedimos oración por el niño Nicolás, que tiene 10 años y vive en Bahía Blanca, Argentina, y que está afectado de un tumor, para que Dios en su infinita bondad le conceda la gracia de la curación. Que así sea.



Pedimos oración por la salud de la niñita Milagros M., que vive en Mendoza, Argentina, tiene 3 años y padece de un cáncer de timo, que hace un mes motivó la muerte de su hermano mellizo. Ahora ha sido derivada a Houston (USA). Que el Buen Jesús se apiade de ella y la sane.



Pedimos oración por Juan Gerónimo R., que vive en Paraná, Argentina, y que es un adolscente que padece de un problema intestinal bastante serio. Que el Señor Jesús le ayude a hacerle frente y a superarlo con bien, y fortalezca en esta instancia a toda su familia.



Nuestra lectora Gladys M., que vive en Mendoza, Argentina, nos pide oraciones por su familia, para que el Señor la bendiga, la proteja, la ilumine y les conceda cada día unión, paz y armonía. Nos unimos a ellos...



Nuestra lectora Aury de A., que vive en Guatemala, nos pide oraciones por su familia, ya que están pasando por un mal momento en lo espiritual y en lo material. Que la Santísima Virgen los ayude a unirse en estos momentos y a buscar a través de la fe el acercamiento a Dios como primer paso para la unión familiar.



Pedimos oración por la señora Angélica Luisa G., que vive en Buenos Aires, Argentina, tiene 79 años de edad y está padeciendo serios problemas de salud. Que Dios Nuestro Señor tenga misericordia de ella y le devuelva la salud perdida.



Tú quisiste, Señor, que tu Hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha ahora las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos, y concede a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu Hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.


Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro


Encontrarse con María, descubrir la persona de María, llegar a conocer la función maternal de María y su misión salvadora, es provechosísimo y de honda consolación para sus devotos.
Algunos han pasado al lado de María sin reconocerla; el trato que han tenido con ella ha sido un trato frío, poco menos que diplomático; hasta que un día descubrieron que ella es su Madre y, como tal, los protege y los guía.
Desde entonces su vida cambió fundamentalmente. Como huérfanos que un día felicísimos encontraron a su Madre y comenzaron a vivir con ella, una muy sentida alegría inundó su corazón.

María, "causa de nuestra alegría", gracias por darnos a Jesús que nos comunica su vida.


Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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domingo, 15 de febrero de 2009

Pequeñas Semillitas 0642

PEQUEÑAS SEMILLITAS


Número 0642 ~ Domingo 15 de Febrero de 2009
Desde la ciudad de Córdoba (Argentina)



Hola !!!
Esta es una edición reducida de "Pequeñas Semillitas", tal como hemos publicado los sábados y domingos de enero y febrero. Asimismo aviso que este boletín no se publicará desde el 23 al 28 de febrero por razones de viaje. Y desde marzo volverán a publicarse algunas secciones que muchos lectores han pedido que vuelvan a esta página: Temas Médicos, Poesía, Historias, Biografías, Humor.
Que todos tengamos un buen domingo...!!!




La Palabra de Dios : Evangelio del día



En aquel tiempo, se acerca a Jesús un leproso suplicándole, y, puesto de rodillas, le dice: «Si quieres, puedes limpiarme». Compadecido de él, extendió su mano, le tocó y le dijo: «Quiero; queda limpio». Y al instante, le desapareció la lepra y quedó limpio. Le despidió al instante prohibiéndole severamente: «Mira, no digas nada a nadie, sino vete, muéstrate al sacerdote y haz por tu purificación la ofrenda que prescribió Moisés para que les sirva de testimonio». Pero él, así que se fue, se puso a pregonar con entusiasmo y a divulgar la noticia, de modo que ya no podía Jesús presentarse en público en ninguna ciudad, sino que se quedaba a las afueras, en lugares solitarios. Y acudían a él de todas partes.
(Marcos 1, 40-45)

Comentario
Hoy, el Evangelio nos invita a contemplar la fe de este leproso. Sabemos que, en tiempos de Jesús, los leprosos estaban marginados socialmente y considerados impuros. La curación del leproso es, anticipadamente, una visión de la salvación propuesta por Jesús a todos, y una llamada a abrirle nuestro corazón para que él lo transforme.
La sucesión de los hechos es clara. Primero, el leproso pide la curación y profesa su fe: «Si quieres, puedes limpiarme» (Mc 1,40). En segundo lugar, Jesús —que literalmente se rinde ante nuestra fe— lo cura («Quiero, queda limpio»), y le pide seguir lo que la ley prescribe, a la vez que le pide silencio. Pero, finalmente, el leproso se siente impulsado a «pregonar con entusiasmo y a divulgar la noticia» (Mc 1,45). En cierta manera desobedece a la última indicación de Jesús, pero el encuentro con el Salvador le provoca un sentimiento que la boca no puede callar.
Nuestra vida se parece a la del leproso. A veces vivimos, por el pecado, separados de Dios y de la comunidad. Pero este Evangelio nos anima ofreciéndonos un modelo: profesar nuestra fe íntegra en Jesús, abrirle totalmente nuestro corazón, y una vez curados por el Espíritu, ir a todas partes a proclamar que nos hemos encontrado con el Señor. Éste es el efecto del sacramento de la Reconciliación, el sacramento de la alegría.
Como bien afirma san Anselmo: «El alma debe olvidarse de ella misma y permanecer totalmente en Jesucristo, que ha muerto para hacernos morir al pecado, y ha resucitado para hacernos resucitar para las obras de justicia». Jesús quiere que recorramos el camino con Él, quiere curarnos. ¿Cómo respondemos? Hemos de ir a encontrarlo con la humildad del leproso y dejar que Él nos ayude a rechazar el pecado para vivir su Justicia.
Rev. D. Ferran Jarabo i Carbonell (Agullana-Girona, España)




Santoral Católico


Santos Faustino y Jovita, mártires


Nacidos en Brescia (Lombardía). Son dos hermanos varones aunque el nombre del segundo nos induzca a confusión. Fueron bautizados desde pequeños y siempre estuvieron unidos por lazos aún más fuertes que los de la sangre.

Apolonio, obispo de Brescia, los llamó al sacerdocio; a Faustino lo hizo presbítero y a Jovita, más joven, diácono. Con la consagración se aumenta el fervor de los hermanos. Sienten ahora más profundamente la responsabilidad de ser fieles para no defraudar a los que ha llegado su fama de propagadores de la doctrina de Cristo. Hasta les ha hecho populares su bondad; la gente los busca para oírles hablar del Señor; incluso los paganos quieren escuchar las doctrinas que les son extrañas, pero que tienen tanto que ver con la verdad. Ya comienzan algunos a destrozar sus propios ídolos.

Marchaban bien las cosas hasta que se encendió el fuego de la persecución.

El cacique aprovecha la coyuntura de que el emperador Adriano se les hace próximo al pasar por Liguria. Les acusa ante las autoridades romanas de querer destrozar al Imperio por la ofensa que infiere a los dioses que son su fundamento. El emperador toma cartas en el asunto porque lo que le ha llegado es que Faustino y Jovita son unos embaucadores; sí, engañan con magia, son poderosos en las palabras y adoran a un judío que murió crucificado llamado Jesucristo. Han lavado el cerebro a mucha gente honrada; los templos están desiertos y los dioses abandonados ¡Hay que salvar al Imperio!

Era cosa tan sencilla ofrecer unos granos de incienso en el templo del dios Sol... pero no hubo manera de que lo hicieran. Eso es llanamente apostasía. Mueren con la cabeza cortada en el camino de Cremona, en el año 122.

El buen sentido de los cristianos adornó luego la magnífica figura de sus ejemplares héroes mártires con narración apócrifa que rellenara los huecos de la escueta y seca historia. Dicen esos relatos que aún hicieron mucho mayor bien del que se desprende de la entrega de sus vidas. Es ingenuo, pero conmovedor el añadido posterior. Si entretiene, podemos seguir leyendo.

Fueron apresados y puestos a disposición del emperador. Ante la mantenida negativa a sacrificar, resultó que la estatua idolátrica del dios Sol se tiñó de negro y, cuando los servidores del templo pagano se dispusieron a limpiarla, se deshizo en un montón de polvo. Después los echaron a las fieras, pero los cuatro leones del circo se mostraron mansos y echados a sus pies; lo mismo pasó con los osos y leopardos. Aunque en realidad no eran tan mansos porque el delator -que bajó furioso a la arena para excitar a las fieras- fue devorado por ellos. La gente que presenciaba el espectáculo huyó despavorida a sus casas dejando las puestas abiertas y Faustino y Jovita mandaron los bichos al campo.

El emperador, continúa el fabuloso relato, también se asustó; pero quiso sacar partido de los dos hermanos. Se le ocurrió la idea de utilizarlos en su provecho haciendo que recorrieran las ciudades de Italia para divertir con su magia a la gente en el circo. Milán, primero; Nápoles, luego. En todas partes los prodigios se repitieron y fue providencial la marcha para que muchos y en todas partes conocieran al Resucitado entre los tormentos y los prodigios que se contemplan en el cuerpo de los santos: plomo derretido, huesos apaleados, tormento de fuego aplicado a los costados. Su carcelero, Calocero, se convirtió y también murió mártir. Finalmente les cortaron la cabeza.




Pensamiento



"La vocación del cristiano es la santidad, en todo momento de la vida. En la primavera de la juventud, en la plenitud del verano de la edad madura, y después también en el otoño y en el invierno de la vejez, y por último, en la hora de la muerte"
Juan Pablo II




Los cinco minutos de María - por Alfonso Milagro



Es enternecedor el cuadro que nos muestra a María enseñanado a Jesús a dar los primeros pasos. ¡Y pensar que la Virgen enseñó a Dios a caminar, a comer, a calzarse las sandalias...!
Si Dios hecho niño se subordinó a María para aprender algunas cosas, ¿cómo nosotros no vamos a aprender de ella muchas cosas? Sobre todo aprenderemos a caminar hacia Dios; ella nos tomará de su mano maternal y llegaremos con certeza a nuestro Padre Dios.
No nos olvidemos, pues, de aferrarnos cada día a las manos de María. Invoquémosla, recémosle, acudamos a ella con confianza y amor de verdaderos hijos.

María, modelo de la fe, enséñanos a vivir el Evangelio de tu Hijo.



Felipe de Urca
-Jardinero de Dios-


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